BAJO LA LUPA

Alfredo Jalife Rahme

Brzezinski: la salvación de EU mediante el G-14

LAS PLAÑIDERAS SOBRE la decadencia de EU se aglutinan. En Francia ha surgido un nuevo segmento de declinólogos, especialidad nada novedosa que España conoció después del desastre de 1898 y entre quienes se cataloga a Unamuno y a Ortega y Gasset. En EU empiezan a proliferar los estudiosos de la decadencia, como Kevin Phillips, "hombre blanco" y prominente pensador del Partido Republicano, quien resalta en su nuevo libro La teocracia estadunidense: el peligro y la política de la religión radical, petróleo y dinero prestado en el siglo XXI.

EN LA CUPULA del pensamiento geoestratégico, Zbigniew Brzezinski (ZB) admite la decadencia de EU, cuyo vacío está siendo llenado por el "despertar político" y la revuelta global protagonizadas por la sociedad civil y el poder ciudadano, demográficamente juveniles (Ver Bajo la Lupa, 19/3/06). Su "diagnóstico geoestratégico" es certero: EU se encuentra aislado en un mundo que le es hostil y donde no puede imponer más su agenda unilateral. Abusa del sofisma: "EU no puede resolver ningún problema internacional mayor por si mismo, mientras ningún problema internacional mayor puede ser resuelto sin EU". It depends, diría Shakespeare, el genial dramaturgo del caos.

ZB "REFUNDA LA MISION global de EU" mediante una "cada vez mayor cooperación supranacional (sic) promovida activamente (sic) por EU, para compensar la debilidad de estados soberanos que de hecho se han vuelto menos soberanos y menos autosustentables". ¿Existirá acaso en la era biosférica un solo estado-nación, aun siendo superpotencia, genuinamente "autosustentable"?

NO SUELTA EL ULTIMO bote de salvavidas que le queda a EU: la "globalización" que "entremezcla las quejas y deseos domésticos con la conciencia trasnacional (sic)", que le lleva a despedazar el "marco de referencia del estado-nación que se ha vuelto muy estrecho para las soluciones políticas, remedios (sic) económicos, y la descompresión social que la mayoría de las poblaciones necesitan urgentemente".

EU "NECESITA SOCIOS", aduce ZB, quien regresa por otra vía a la exitosa etapa de la Comisión Trilateral atlantista con Europa y Japón, esta vez sumada con China. Pero cuando habla de EU, abocado a una "nueva visión de solidaridad (¡súper sic!) global", todavía bajo el control de los antropófagos neoconservadores straussianos, parece que habla de un país imaginario: "EU requiere apuntalar su legitimidad (sic) internacional mediante un compromiso demostrable de objetivos políticos y sociales compartidos. (...) La promoción de la democracia debe estar vinculada directamente a los esfuerzos que buscan la eliminación de la extrema pobreza y la disminución gradual (sic) de las disparidades globales". Destaca su catolicismo ("solidaridad" y "bien común") mediante el cual piensa salvar a la secta de los "blancos angloprotestantes" huntingtonianos (el "WASP") aliada a los neoconservadores straussianos, quienes aceleraron la decadencia de EU.

A SU JUICIO, los "arreglos supranacionales efectivos" no deben ser confundidos con "un gobierno mundial", y EU debe ser el "marcapasos para configurar al mundo" mediante una "globalización", menos definida económicamente y más políticamente, para servir el "bien común", lo cual haría que EU sea de nuevo aceptado por el mundo.

TAL ESQUEMA DE buenas intenciones suena huecamente ilusorio y el "despertar político" de la revuelta ciudadana a escala planetaria difícilmente aceptará el liderazgo desfalleciente de EU que deberá antes transfigurarse en su interior como en el exterior. Too little; too late.

EMBELESADO POR SUS fantasías tecnotrónicas de los setentas, no entiende que la globalización que creció a la par de la unipolaridad de EU, también decrecerá en la misma proporción que su decadencia, y que su lugar será colmado por los regionalismos emergentes y los nacionalismos resucitados.

DESECHA LOS ALCANCES de la ONU y la OTAN, y propone la instauración "seminstitucionalizada" de una "Cumbre de Seguridad Global" anual, el G-14: EU; tres potencias europeas (Gran Bretaña, Francia y Alemania); Rusia,"un poder euroasiático con poder militar significativo"; cinco poderes asiáticos (China, India, Japón, Pakistán e Indonesia); dos países africanos (Nigeria y Sudáfrica); y dos latinoamericanos (Brasil y México).

¿DE QUE TAMAÑO sería la decadencia de EU para que el rusófobo ZB admita la incrustación de Rusia y confiese su "poder militar significativo"? Su proclividad hacia Japón se centra en su "poder económico global como prestamista".

LLAMA LA ATENCION que no haya incrustado a Canadá ni a Israel, pero sorprende más que coloque a Pakistán, "importante país islámico dotado de armas nucleares", y a Indonesia, el "país islámico más poblado", lo que delata el temor por la galopante revuelta demográfica islámica juvenil que representa alrededor de mil 500 millones de creyentes, por lo que, a fortiori, no se puede dejar de incorporar a Turquía, Egipto, Arabia Saudita e Irán en su lista muy sesgada.

EN CUANTO A "MEXICO", mucho dependerá de la identidad del futuro presidente: con AMLO la política exterior sería más creativamente independiente, lo cual daría realce a la filosofía de Alfonso García Robles (nuestro Premio Nobel de la Paz), mientras que con el castañedista Calderón, pelele clonado de Fox y entreguista del petróleo mexicano a las trasnacionales texanas y españolas, serviría para promover la agenda unilateral del bushismo necrófilo.

EN LA ESTRUCTURA artificial del G-14, donde brilla intensamente la demografía mezclada de religión, se subsume el nuevo "orden hexapolar" que hemos avanzado: EU, la Unión Europea (más como bloque integrado que como tres países aislados) y el "BRIC", acrónimo con las iniciales de Brasil, Rusia, India y China.

EL MISMO EISUKE Sakakibara, mejor conocido como Mister Yen, considera el grave peligro de extinción demográfica que corre Japón en el mediano plazo, motivo por el cual no aparece en nuestro radar hexapolar, que la óptica de ZB abulta con ocho países adicionales muy discutibles.

VUELVE A JUGAR la "carta islámica" a favor de EU y fustiga la "santa alianza" propuesta por ciertos estrategas rusos para "seducir a EU", que incorporaría a India e Israel, diseñada "en forma ostensible contra el terrorismo global, pero en realidad dirigida contra el mundo islámico y China, a quienes Rusia ve como sus adversarios de largo plazo. Tal alianza sería fatal (sic) para EU, que se convertiría en el objetivo central de los resentimientos resultantes mientras actúa como escudo para los intereses de Rusia".

EL ORDEN INTERNACIONAL quedó tan resquebrajado que ZB opina que el nuevo G-14 "sustituya el cada vez mas anómalo (sic) G-8 para tratar con los temas socioeconómicos y de seguridad", lo cual "beneficiaría claramente a EU para encabezar dicho club, aunque el proceso también requiere el deseo que EU acate decisiones compartidas a cambio de las cargas compartidas".

¿ESTARA CAPACITADO el "nuevo liderazgo" de EU a acatar decisiones "humanitarias" que le pueden ser adversas, en cuanto a clima, contaminación, energía, justicia mundial, desarme nuclear y belicismo se refiere -para citar un mínimo de temas contenciosos que pisotea en forma unilateral?

JUSTAMENTE UNA DE las características de la conducta de los entes decadentes es que no se percatan de ello hasta que pierden todo. ZB clama por la "redefinición ambiciosa (sic) y amplia del papel global de EU" por lo que deberá aceptar las "nuevas realidades históricas", en lugar de enfrentar las "ominosos vaticinios de tres teóricos políticos del siglo XXI: Oswald Spengler, Arnold Toynbee y Samuel Huntington".

LOS TRES ABORDARON el "ascenso y la caída de las grandes potencias", cada uno en la "cúspide de una era cataclísmica (sic)": Spengler, después de la Primera Guerra Mundial y el colapso de la Alemania imperial; Toynbee, después de la Segunda Guerra Mundial que agotó a Gran Bretaña; y Huntington "en vísperas de la desintegración de la URSS y la emergencia de EU como potencia unipolar".

MEJOR SE HUBIESE INSPIRADO en Edward Gibbon y su Ascenso y caída del imperio romano, y en Fernand Braudel, quien analizó el desplome financiero del imperio español. A cada quien sus muy respetables gustos para diagnosticar el epílogo irreversible de la decadencia de EU.