Preocupa en Roma la ley Sensenbrenner: canciller pontificio
El canciller pontificio de la Academia de Ciencias y Ciencias Sociales del Vaticano, Marcelo Sánchez Sorondo, dijo que Roma está preocupada por la posible votación de la nueva ley antinmigrante en Estados Unidos, sobre todo por ser este fenómeno "una de las características de la globalización".
Entrevistado en la Catedral Metropolitana, adonde acudió a escuchar misa, defendió la libertad de los 400 millones de migrantes en el mundo para movilizarse. "El hombre no nace pegado a una tierra. Nace con dos piernas para caminar. Todos los hombres han caminado siempre. Todos los pueblos han sido migrantes", insistió.
Cómo es posible, cuestionó, que se les cierren las puertas a esas personas. "Es contra el orden natural, contra el orden cristiano y tanto más a los que trabajan, porque tienen derecho a él."
Sin embargo, prefirió esperar al desarrollo del congreso internacional sobre migración, a partir de hoy en la Secretaría de Relaciones Exteriores. "No conozco la articulación; hemos venido a estudiar el tema (los del Vaticano) y no quiero hacer una declaración contra una ley, porque no es nuestro objetivo, pero es claro que el hombre tiene derecho a emigrar y las comunidades y los pueblos tienen derecho a recibir a los que emigran y derecho a establecer ciertas reglas." Lo que "nunca debe pasar", abundó, es que la migración "se convierta en clandestina, y en que haya instituciones que no son buenas. Me preocupa si esta ley no favorecerá el abuso de derechos humanos".
Por su parte, el obispo auxiliar de la arquidiócesis de México, Antonio Ortega, condenó que se "pongan barreras tan drásticas al ser humano". En general, afirmó, la ley que se pretende votar en Estados Unidos "afecta los derechos humanos, como nosotros a veces perjudicamos a los centroamericanos que vienen aquí. También les dañamos mucho, pisoteamos sus derechos".