BAJO LA LUPA
Estrepitosa caída de las bolsas árabes de la OPEP
Ampliar la imagen El especialista Jeffrey Rayman (izquierda) explica a corredores de la Bolsa de Nueva York el comportamiento de las acciones de la compañía de seguros Healthcare, mientras los inversionistas esperaban el anuncio de la Reserva Federal sobre las tasas de interés FOTOAp
TENIA QUE SER marzo. Después de la pulverización de la bolsa de Islandia se presentó el crash (título con que se adelantó la entrega de los Oscares de Hollywood) de las bolsas árabes del golfo Pérsico. Las burbujas de los mercados emergentes/detergentes explotaron secuencialmente en cascada, una a una, días previos al ocultamiento del M3 (medición de masa monetaria) por la Reserva Federal, en la etapa de Ben helicóptero Bernanke, quien piensa imprimir billetes verdes para arrojarlos desde un helicóptero (sic). A Bernanke se le olvida que también los helicópteros se caen, con todo y sus tripulantes.
LA BURBUJA ES global (otro terminajo neoliberal frente a la palabra más humanista de "universal"), y su estallido es igualmente global. El globo financiero bursátil de la globalización estalla literalmente. La primera onda de choque fue la explosión de la burbuja de Islandia, y sus reverberaciones han alcanzado las bolsas de los países árabes integrantes de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP). A principios de marzo, las ondas de Islandia repercutieron en divisas, bonos y acciones de las bolsas de Rusia, Turquía, Latinoamérica y Africa, que orillaron a ventas globales de pánico.
DESPUES DE LA prueba experimental del desplome de la bolsa de Islandia (ver Bajo la Lupa, Efecto Islandia: hacia la sequía crediticia global, 1/3/06), ocultada por los multimedia especializados de Estados Unidos, toca el turno a los mercados árabes de la OPEP de sufrir un descalabro preocupante, el cual ha sido despreciado por los medios financieros anglosajones, que han empleado como espesa cortina de humo el neoproteccionismo estadunidense que impidió la compra de seis puertos por una empresa de Dubai, como había hecho meses antes frente a la petrolera estatal china, que deseaba adquirir a la petrolera Unocal. EU va que vuela al neoproteccionismo y al neoaislacionismo, pero ese no es el foco de atención en referencia al desplome global del mecanismo especulativo de carry trade, mediante el cual los bancos centrales subsidian los préstamos en el corto plazo con tasas de interés de cero (como en Japón) para dar prestado a largo plazo con tasas superiores en la periferia de las plazas financieras.
LAS BOLSAS ARABES del golfo Pérsico, las principales beneficiadas por el alza espectacular del crudo, son las que habían obtenido las mayores ganancias a escala global el año pasado, con rendimientos azorantes. Después de haber alcanzado sus máximos históricos a mitad de febrero, la "capitalización total de mercado" (valor en que se cotiza las acciones) de las bolsas de la región perdió la escalofriante cifra de 250 mil millones de dólares para quedar en poco menos de un millón de millones de dólares (un trillón de dólares en anglosajón). Para ubicarnos: la pérdida repentina representa más de 2.5 veces el PIB de Chile y 1.6 veces lo que proyecta recaudar Arabia Saudita por la venta de petróleo este año (Peak Oil, 27/3/06). La total "capitalización de mercado" de las siete bolsas del golfo se disparó casi 10 veces desde 2000, al pasar de 119 mil millones de dólares a 1.3 millones de millones a mediados de febrero.
ENTRE EL 9 Y EL 14 de marzo (Afp y The Daily Star), las bolsas árabes de la OPEP sufrieron un estrepitoso derrumbe en la región del golfo, lo cual alcanzó las bolsas concéntricas de Jordania y Egipto, y llevó a protestas en Kuwait. Según Ali Dakkak, profesor de economía de la Universidad Abdul Aziz en Jedah, se trata de una "corrección de largo plazo que durará dos años", lapso en el cual la bolsa saudita caería alrededor de 60 por ciento. Dakkak atribuyó la pérdida regional a los agentes sauditas que invierten muy fuerte en los mercados del golfo, quienes se retiraron de éstos para cubrir sus pérdidas domésticas, lo cual desencadenó un efecto dominó en los Emiratos Arabes Unidos, Bahrain y Qatar.
ALGUNOS ANALISTAS REGIONALES, como Ahmed Hefnawi, del banco de inversiones EFG-Hermes, consideran que la corrección era inevitable después del alza de 148 por ciento del año pasado. Las bolsas de países del golfo miembros de la OPEP incrementaron hasta 10 veces su valor desde 2000, gracias a la abundante liquidez proveniente del alza estratosférica del crudo. El economista saudita Abdul Aziz al-Daghestani comentó que los pisos de remates se habían vuelto casinos de juego, más que centros de inversiones, lo que explica su abrupto desplome.
EL 14 DE MARZO, la bolsa de Dubai (prodigioso centro financiero lleno de rascacielos, con 1.5 millones de habitantes, de los cuales un millón son migrantes, quienes pagarán los platos rotos) se desplomó 14 por ciento, el mayor declive de su corta historia en un solo día. En suma: el índice de su mercado financiero ha perdido más de 40 por ciento de su valor desde comienzos del año. El mismo día, la reguladora bursátil de Kuwait intervino con compras masivas de acciones para impedir mayor desplome de las acciones, mientras el pánico contagiaba el índice bursátil CASE-30, de Egipto, que se hundió casi 6 por ciento, lo cual obligó a la reguladora a anunciar que estaba comprando acciones para prevenir un crash. La bolsa egipcia había crecido en forma antigravitatoria más de 100 por ciento el año pasado, en lo que concurrieron tanto el alza del petróleo como el mecanismo especulativo del carry trade. El analista financiero Yousuf Al-Qustanteen alega que las caídas bursátiles árabes constituyen un crack: en el mundo, una caída superior a 25 por ciento es crack (Arab News, 14/3/06)
PESE A TODAS las medidas contingentes, las bolsas de Arabia Saudita y Dubai continuaban su desplome el mismo día que la Reserva Federal empezó el ocultamiento del M3 (Afp, 23/3/06). Ni las hilarantes "alertas tempranas" ni los delirantes blindajes, mucho menos las nuevas medidas para estimular la inversión, han servido para contener el pánico. El índice bursátil de Dubai lleva más de 50 por ciento de pérdidas a partir de sus niveles paroxísticos de agosto pasado, y el índice accionario Tadawul, de Arabia Saudita, la mayor plaza bursátil de la región, ha sufrido severos descalabros desde el 11 de marzo. El 15, "el día después" de la paliza bursátil regional, el príncipe saudita, de madre libanesa, Alwale ed bin Talal bin Abdulaziz Al Saud, considerado el "Warren Buffett de los árabes", anunció a la revista Time que invertiría 10 mil millones de dólares en la bolsa saudita. De cierta manera, su intervención (¿existe realmente el libre mercado?) ha frenado la caída en cascada del mercado de su país, pero las plazas de Dubai, Abu Dhabi, Bahrain, Qatar y Kuwait todavía no se reponen de la paliza (Live Punjab, 28/3/06).
SERIA UN GRAVE error de juicio pretender que se trata de fenómenos aislados desde Islandia hasta las bolsas árabes del golfo Pérsico. En la periferia de los mercados matriciales de la globalización, el desplome de los mercados emergentes (ya casi nadie usa el terminajo después de los cataclismos de finales de la década de los 90, que empezó con el efecto Tequila) pronto "contagiará" al G-7, que no vemos cómo pueda blindarse (otro terminajo de la jerigonza neoliberal), fuera del ocultamiento de datos de su lastimosa realidad financiera, y que ya empezó con el cese de la publicación de una de sus principales mediciones de masa monetaria (el M3), desde el 23 de marzo.
EL DESORBITADO FOX y el delirante equipo financiero salinista que gobierna tiránicamente a México desde hace un cuarto de siglo, aseguran que "México" se encuentra blindado de aquí a la eternidad. A ver si aguantan los impactos a partir de ahora, cuando la Reserva Federal acaba de elevar las tasas por quinceava vez consecutiva (ahora se ubica en 4.75 por ciento) y dejó las puertas abiertas para un mayor incremento en mayo (Market Watch, 28/3/06), que luego se intensificarán en julio y en el último trimestre del aciago foxismo.
LA REALIDAD ES que las burbujas del carry trade global están implosionando por doquier, como habíamos advertido con antelación, y conforme se elevan las tasas de interés en Japón, Europa y EU estallan sus burbujas y arrastran miserablemente a la periferia subdesarrollada y dependiente de sus juegos especulativos, por lo que nadie (salvo el salinismo-foxismo, desde luego) se puede salvar de sus inevitables secuencias y consecuencias.