La iniciativa Sensenbrenner, sometida a liposucción, pero falta que la apruebe el Senado

Aún no se puede cantar victoria sobre política migratoria, sostiene Derbez

También es un logro del gobierno mexicano, considera Ricardo Sepúlveda

PATRICIA MUÑOZ, ELIZABETH VELASCO Y ANGELES CRUZ

El titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Luis Ernesto Derbez, aseguró ayer que la propuesta migratoria aprobada por el Senado estadunidense fue sometida a una "liposucción", debido a que a la iniciativa original del senador Sensenbrenner le quitaron las partes más negativas, como las propuestas de construir una barda fronteriza y la criminalización de indocumentados.

No obstante, planteó que todavía no se puede cantar victoria, ya que la propuesta podría sufrir cambios cuando pase al pleno del Senado para su discusión, ya que el proceso al que estará sometida es muy largo y participarán legisladores de todas las tendencias.

Consideró que la propuesta seguirá un curso complicado en el proceso legislativo de Estados Unidos debido a que cien senadores manifestarán sus puntos de vista con la finalidad de moldear la que se espera una ley que contenga dos elementos sustantivos: seguridad en la frontera y una reforma migratoria que garantice la permanencia y el respeto a los derechos de los indocumentados.

En el contexto de un coloquio sobre migración, organizado por la SRE, Derbez explicó que el presidente George W. Bush ya abrió claramente sus cartas al decir que esta combinación -la de garantizar la seguridad de las fronteras, fortalecer la aplicación de las leyes en Estados Unidos y los programas de trabajadores temporales- es lo que él estaría interesado en que se obtuviera.

De modo que el presidente Bush habló inclusive de incrementar el número de permisos, lo que se conoce coloquialmente como tarjeta verde, para conducir a la ciudadanía, pero no debe ser la emoción lo que guíe las siguientes acciones de México, sino seguir impulsando políticas que coadyuven a resolver esta problemática en términos de corresponsabilidad en asuntos como la seguridad en la frontera, dijo.

Opinó que hasta el momento se ha hecho una "liposucción" a la propuesta de Sensenbrenner, porque se adelgazó, se eliminó toda referencia a la barda, así como el proceso de criminalización.

Acerca de la criminalización de indocumentados, Bush declaró que debe ser eliminada, es decir, él mismo ya está cambiando su posición, particularmente en este tema.

En tanto, el coordinador de Asuntos para la Promoción y Defensa de los Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, Ricardo Sepúlveda, señaló que el proyecto de ley aprobado por el Senado estadunidense para regularizar la estancia de algunos indocumentados y un programa de trabajadores huéspedes es un logro de los migrantes mexicanos y de otras nacionalidades que se han movilizado en Estados Unidos, y es clara la responsabilidad del gobierno de ese país de dar continuidad a dicha iniciativa.

Sepúlveda manifestó que la ley aprobada por un comité del Senado estadunidense no es sólo un tema de política exterior, sino de logros para el gobierno federal en cuanto a la defensa de los derechos humanos. Yo "la vería no solamente como tema de política exterior; no nos salgamos de lo que en realidad se trata; es una muy buena noticia para una política de derechos humanos que ha sido consistente durante estos cinco años y que empieza a tener cada vez más resultados".

Por su parte, el vocero de la Presidencia, Rubén Aguilar, dijo por la mañana que el de tema migratorio es uno de los puntos centrales de la reunión que el presidente Vicente Fox sostendrá con su homólogo estadunidense George W. Bush, aun cuando la decisión está en manos del Congreso de aquel país.

Dijo que la reforma aprobada el lunes pasado por el Comité de Justicia del Senado estadunidense es una buena señal, aunque es un primer paso. Habrá que seguir trabajando y para ello la cancillería está atenta al desarrollo del debate en Estados Unidos.