Hay que demostrar más flexibilidad y capacidad de respuesta con la IP: Moreno
Buscará el BID mejorar préstamos a pequeñas empresas y aliviar deudas
Discutirá la necesidad de invertir más en infraestructura en Latinoamérica
Ampliar la imagen En Belo Horizonte, Brasil, comienza el lunes la 47 asamblea anual del BID, el mayor cónclave económico de América Latina, donde se reúnen ministros de Economía y presidentes de bancos centrales de los 26 países latinoamericanos y caribeños miembros, y también de Estados Unidos, Canadá y 19 países industrializados extrarregionales Foto: Ap
Washington, 3 de abril. La 47 asamblea anual del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) que comienza este lunes en Belo Horizonte, Brasil, discutirá la necesidad de invertir más en infraestructura, mejorar los préstamos al sector privado -sobre todo a pequeñas y medianas empresas-, y aliviar la deuda de los países más pobres de la región.
De los cerca de 12 mil participantes, estarán presentes en calidad de invitados de honor los presidentes de Bolivia, Evo Morales, y de Honduras, José Manuel Zelaya, quienes mantendrán reuniones con su par brasileño Luiz Inacio Lula da Silva, anfitrión del encuentro.
''Debemos demostrar mayor flexibilidad y capacidad de respuesta en términos de nuestras operaciones con el sector privado'', escribió el presidente del BID, Luis Alberto Moreno, en el mensaje que abre el informe anual 2005 del banco, difundido este lunes.
''Tanto países como mercados nos requerirán emprender nuevos acercamientos al financiamiento de infraestructura -y cerrar el círculo de la integración subregional, regional y continental- sin la cual nuestra región no puede avanzar hacia la mayor competitividad que la economía mundial demanda'', añadió.
''Si de algo adolece Latinoamérica es de la necesidad de conectarnos mucho más'', subrayó Moreno a periodistas, y puso de ejemplo el Plan Puebla-Panamá, un megaproyecto de infraestructura de 7 mil millones de dólares que apunta a desarrollar e integrar el sur de México y Centroamérica y es financiado en parte por el BID.
Estados Unidos, el mayor accionista del BID, coincide en que una inversión superior en infraestructura es necesaria para que la gente tenga más oportunidades de llegar a los mercados con sus productos, pero insiste en que debe hacerse hincapié en pequeños proyectos.
El camino para dar más a los que tienen menos ''es a través del desarrollo de pequeñas y medianas empresas, no necesariamente a través de un gran proyecto de desarrollo de infraestructura'', dijo a periodistas Clay Lowery, secretario adjunto del Tesoro para Asuntos Internacionales, que representará al gobierno de George W. Bush en la reunión.
Washington espera que el BID se comprometa en la reunión a aumentar y mejorar los préstamos a las pequeñas y medianas empresas, ''quizá poniendo fechas y una hoja de ruta'', subrayó Lowery.
''El paquete (de propuestas) que el BID ha presentado no trata realmente algunos de estos temas, lo cual es comprensible, aunque están procesándolo de a poco y esa es una de nuestras mayores preocupaciones'', precisó.
Aunque muchos esperaban que anunciara cambios concretos dentro del BID durante su primer asamblea como presidente de la institución, Moreno descartó que eso vaya a ocurrir, y admitió que las reformas que pretende impulsar pueden llevar entre 18 y 24 meses.
''No vamos a llegar con una fórmula mágica (...) No vamos a llegar con un anuncio a los gobernadores'', indicó.
Moreno asumió el cargo en octubre en reemplazo del uruguayo Enrique Iglesias, que dirigió la institución durante 17 años.
Estados Unidos también quiere que la asamblea del BID avance en el alivio de la deuda de los países más pobres de la región propuesto por el Grupo de los Ocho (G-8), siguiendo los pasos del Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial y el Banco Africano de Desarrollo.
Bolivia, Honduras y Nicaragua reclaman que la iniciativa de condonar el 100 por ciento de la deuda de 18 países pobres altamente endeudados con estas tres instituciones se aplique también al BID.
En 2005, el volumen de préstamos del banco -la mayor fuente de financiamiento de la región- superó los 7 mil millones de dólares, 17 por ciento más que el año anterior. Los desembolsos aumentaron 20 por ciento a 5 mil 300 millones de dólares.
La asamblea anual del BID, el mayor cónclave económico de América Latina, reúne a ministros de Economía y presidentes de bancos centrales de los 26 países latinoamericanos y caribeños miembros, y también de Estados Unidos, Canadá y 19 países industrializados extrarregionales.
Además de las delegaciones oficiales, se cuentan entre los participantes, ministros, políticos, gobernadores, empresarios, banqueros, delegados de organismos internacionales y organizaciones no gubernamentales.
Entre las personalidades que participarán de la reunión, destaca el viceministro de Finanzas de Corea del Sur, Kwon Tae-shin, quien pretende consolidar la cooperación económica con los países latinoamericanos, usando como modelo un tratado de libre comercio que su país firmó con Chile en 2004.
Dentro de los principales objetivos del encuentro están la rendición de cuentas de los trabajos realizados por la entidad en 2005 y la discusión de directrices para definir las futuras inversiones de la institución en la región.
México perdonaría deudas
Uno de los debates que promete acaparar la atención del plenario se refiere a la posibilidad de perdonar las deudas que algunos países pobres tienen con la entidad, informó el secretario de Hacienda de México, Francisco Gil Díaz, luego de una reunión que mantuvo el sábado con el representante de Brasil en el BID, el ministro de Planificación Paulo Bernardo.
Según Gil Díaz, tanto Brasil como México estarían dispuestos a perdonar las deudas de Honduras, Nicaragua, Bolivia, Haití y Guyana, que juntas suman 3 mil 500 millones de dólares.