Se reunieron diputados con editores para discutir la propuesta del precio único
Fue postergada la sesión para analizar y dictaminar la iniciativa de ley del libro
La iniciativa de la Ley de Fomento para la Lectura y el Libro cuenta con el apoyo de los legisladores de los partidos de la Revolución Democrática, Acción Nacional y Revolucionario Institucional -integrantes de la Comisión de Cultura de la Cámara de Diputados-, adelantó el presidente de la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana (Caniem), José Angel Quintanilla, quien este miércoles encabezó un grupo que se reunió con diputados perredistas, entre ellos el coordinador parlamentario de ese partido, Pablo Gómez.
Durante ese encuentro se discutieron algunas dudas que existían en torno a la aplicación del precio único del libro, en especial acerca de cómo se vigilaría que se cumpla, precisó a La Jornada Inti Muñoz, portavoz de la Comisión de Cultura. Por lo pronto queda de nuevo en el aire la reunión en la que se analizará el tema y se someterá a votación la iniciativa dentro de esa instancia debido a los cambios dentro del PRI tras la salida de varios diputados de ese partido. Algunos de los ahora diputados independientes participaban dentro de la Comisión de Cultura.
Ante esos cambios en la conformación de la comisión, la reunión prevista originalmente para el martes, podría aplazarse hasta después del periodo vacacional, indicó Muñoz: ''El hecho de que se haya suspendido la sesión del martes pasado, por falta de quórum por los problemas en la bancada priísta, sí nos mete en un problema de tiempos. Es muy posible que la comisión se reúna regresando de Semana Santa".
Respecto del apoyo de los legisladores a la iniciativa, aprobada por el Senado el pasado 16 de marzo, el secretario técnico de la Comisión de Cultura, el panista José Antonio Cabello, destacó que ''es una ley que ayuda a la industria editorial, no le perjudica al lector y las experiencias que hay en otros países son favorables al sector librero. Me parece que es de apoyarse".
Agregó que antes de dictaminar la iniciativa tomarán en cuenta los criterios de las personas que están en favor y de quienes están en contra de la ley.
En tanto, por parte del PRD existe una vocación clara de apoyar la iniciativa para reactivar la industria editorial en el país y sabemos que el PRI está en favor, manifestó Inti Muñoz.
Cada vez hay menos librerías
Por su parte, el presidente de la Caniem señaló que ''en general" nos va bien con los tres partidos. ''Ha habido acercamientos desde mucho tiempo antes con diputados y senadores y desde entonces trabajamos con ellos", dijo Quintanilla y subrayó que la aprobación y aplicación de la ley no encarecerá el libro.
''El libro ya se encarece en este momento en otras ciudades del país. Ahora, como está el mercado, el libro se encarece de una manera extrema", cada vez hay menos librerías por lo que hay menos posibilidades de exhibir los 9 mil títulos nuevos que se publican anualmente en el país o los 75 mil que salen cada año en el área de habla hispana.
''Esas preocupaciones de que suba el precio o de situaciones que tiendan al monopolio ya se encuentran en el mercado. La práctica del precio único ha demostrado que el aumento en el precio de los libros es 40 por ciento menor al aumento en la inflación general."
El precio único ''lo que hace es favorecer la diversidad cultural, la diversidad de editores y fomenta de manera indudable el hábito de lectura porque el lector tiene más cerca las librerías".
En cuanto al posible encarecimiento de los libros, María Esther García, directora comercial de Editorial Norma, expresó que en ese tema ''las editoriales tenemos que hacer una labor muy importante para buscar un precio justo para el mercado o para que al lector no se le quiera sobrecargar costos".
En el mismo sentido se manifestó Claudia Galán, gerente de la editorial independiente Tusquets, y enfatizó que el precio único permitirá la creación de librerías y la competencia por servicio, ya no por descuentos.
Actualmente, añadió, ''México tiene una inquietud por leer. Es un hecho que la lectura no es una costumbre del mexicano, pero vienen generaciones con mucho empuje y una necesidad de leer o conocer cada vez más. En colegios y universidades se está retomando este deseo por la lectura. Por eso hay que estar ahí con precios adecuados".