Usted está aquí: jueves 13 de abril de 2006 Sociedad y Justicia Piden ONG de Oaxaca a diputados derogar la ley de bioseguridad

Podrían perderse 18 variedades de maíz, aducen

Piden ONG de Oaxaca a diputados derogar la ley de bioseguridad

DE LA CORRESPONSALIA

Oaxaca, Oax., 12 de abril. Organizaciones de la Pastoral Social de la Iglesia católica oaxaqueña solicitaron a los diputados locales "no dejarse sobornar por intereses económicos", y manifestarse por la derogación de la ley de bioseguridad aprobada por el Congreso federal, que permite la introducción de semillas modificadas genéticamente.

A nombre de las agrupaciones que conforman la pastoral, Carmen Santiago, coordinadora del Centro de Derechos Indígenas Flor y Canto, dijo que la demanda está fundamentada ante el severo riesgo de la pérdida de 18 variedades de maíz criollo cultivado por los 16 pueblos indígenas del estado.

Desde 2001, añadió, se ha detectado la presencia de maíz transgénico en cultivos de maíz criollo y orgánico en las regiones de la mixteca, sierra sur y valles centrales, donde se han descubierto milpas con deformaciones, como por ejemplo un manojo de ramas en vez de espigas, pelo de maíz de hasta 20 centímetros, elotes pequeños en la espiga y "muchas otras rarezas".

Mencionó que en algunas parcelas donde se ha encontrado la presencia de maíz transgénico se perdió totalmente el cultivo del criollo. En los hogares, además, se ha perdido el complemento alimenticio por la desaparición de plantas que crecían en asociación con el maíz, principalmente el frijol, la calabaza y los quelites.

"El maíz es nuestra sangre, es nuestra carne, porque a su alrededor está nuestra forma de vivir", asentó.

Independientemente de esto, mencionó que el campo se ha abandonado por la falta de recursos para obtener los insumos químicos, a fin de cultivar maíz transgénico.

Pero lo más lamentable "son los envenenamientos por pesticidas y herbicidas al ser ingeridos directamente por accidente o por la contaminación de los ríos".

Destacó que el Congreso del estado necesita asumir su responsabilidad con el pueblo y pronunciarse contra la ley de bioseguridad y declarar al estado como territorio libre de transgénicos, así como exigir a los gobiernos federal y estatal detener la distribución de alimentos transgénicos en el estado.

"Les pedimos a los diputados que sean verdaderos representantes del pueblo atendiendo nuestra demanda y no se dejen sobornar por intereses económicos, porque si atentan contra el maíz atentan contra la vida de muchos seres humanos", apuntó.

Carmen Santiago dijo que en la Pastoral Social de la Iglesia católica oaxaqueña participan, además, la Organización de Agricultores Biológicos, Promotores de la Salud y los organismos de productores Michiza y Kiee Lu'u, pertenecientes a la pastoral indígena.

 
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