Usted está aquí: sábado 15 de abril de 2006 Política Organización delictuosa y secuestro, cargos contra líder minero detenido

Continuará el paro en instalaciones de Nacozari, dicen

Organización delictuosa y secuestro, cargos contra líder minero detenido

CRISTOBAL GARCIA BERNAL CORRESPONSAL

Hermosillo, Son., 14 de abril. La detención del delegado del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del Sindicato de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos y Similares de la República Mexicana (SNTMMSRM), Indalecio Pérez Morones, causó indignación entre el gremio de Sonora, al considerar que se trata de una clara agresión contra esa organización sindical.

Pérez Morones fue detenido el jueves pasado en el municipio de Nacozari de García y posteriormente recluido en el Centro de Readaptación Social de Hermosillo, por los delitos de organización delictuosa, secuestro, robo de vehículo, amenazas, daño a propiedad privada y vía pública, entre otros cargos que no alcanzan el beneficio de la fianza.

Enrique Carrera Vega, coordinador del Consejo Sindical Permanente de Sonora, organismo que se hará cargo de la defensa legal del líder minero detenido, llamó a los gobiernos federal y estatal para que "saquen las manos" de la huelga de trabajadores de la sección 278 del SNTMMSRM en la mina La Caridad, de Nacozari de García.

El líder de la organización que agrupa a 300 mil trabajadores de 28 organizaciones sindicales de la entidad, manifestó que el gobierno debe entender que los conflictos sindicales y laborales no se resuelven con agresiones penales, como el encarcelamiento de Pérez Morones, cuyo único delito -dijo- fue defender los derechos de los mil 200 mineros de Nacozari de García.

Manifestó que esta aprehensión "es una clara agresión contra el gremio, por la disputa que desató el gobierno federal en un intento por mantener el control de la dirigencia nacional que encabeza Napoleón Gómez Urrutia y desviar su responsabilidad sobre la muerte de 65 mineros de Pasta de Conchos, Coahuila".

La querella en contra de Indalecio Pérez fue interpuesta por los empresarios del Grupo México, propietarios de la minera en huelga desde el 24 de marzo pasado, quienes se han negado a negociar con el sindicato con el argumento de que consideran ilegal el movimiento que mantiene paralizadas las actividades de la mina.

Los delitos que se le imputan a Pérez Morones también fueron promovidos por funcionarios de Bancomer y el ayuntamiento de Nacozari de García, por el bloqueo a dichos inmuebles en protesta porque un juez de Nuevo León congeló una cuenta de cuatro millones de pesos del fondo de resistencia depositado en esa institución bancaria.

Por su parte, Ricardo Díaz, integrante del comité ejecutivo de la sección 298 del sindicato minero, con sede en Nacozari de García, advirtió que pese a la detención de su líder continuarán con el paro porque se trata de un movimiento justo que el Grupo México se niega a reconocer.

 
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