El embajador de México ante la ONU descarta que los casos se revisen selectivamente
Escrutinio del Consejo de Derechos Humanos será universal: Berruga Filloy
El embajador de México ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Enrique Berruga Filloy, afirmó que el nuevo Consejo de Derechos Humanos del organismo no revisará selectivamente los casos que se le presenten, sino que su escrutinio tendrá carácter "universal", para elaborar "una especie de gran tabla mundial" sobre el estado que guardan los derechos humanos en el orbe.
Dijo que el tema migratorio puede entrar en los casos que se presenten al nuevo consejo, e inclusive someterlo a la propia Alta Comisionada de los Derechos Humanos de la ONU, siempre que se encuentre vinculado a una problemática de violación de garantías individuales.
El diplomático reiteró que México ya presentó su candidatura para formar parte de este consejo, el cual estará integrado por 47 miembros, repartidos proporcionalmente entre regiones geográficas; a América Latina y el Caribe le corresponden ocho asientos, 13 a Africa, 13 a Asia, siete a Europa occidental y otros estados, y seis a Europa del este. La elección será el próximo 9 de mayo y el inicio de los trabajos está previsto para junio.
Señaló que Cuba presentó su postulación para conformar dicho consejo. La Habana, agregó, "tiene una serie de méritos, y también una serie de fallas", como "todos los países, sin excepción".
En este momento no se trata de buscar aquellos que tengan ciento por ciento de calificación en derechos humanos; lo que importa es la actitud que se tiene hacia el nuevo organismo y la promoción de los derechos humanos; se busca que haya congruencia entre la participación en el Consejo de Derechos Humanos y la promoción de las garantías individuales, dijo el embajador, en entrevista desde Nueva York.
Tras una reforma, este consejo sustituye a la Comisión de Derechos Humanos. De hecho, desde la fundación de la ONU no se había creado un consejo adicional a los de Seguridad, Económico y Social, y al de Administración Fiduciaria. Por ello, esta nueva instancia pone a la par a los derechos humanos frente a los temas de desarrollo, seguridad y paz.
Mientras en el Consejo de Seguridad hay 15 miembros, cinco permanentes, el de Derechos Humanos carece de éstos y todos, los 47, son electos conforme al número que tiene cada región geográfica.
Esta es la configuración que tendrá el nuevo consejo y la duración del mandato será por tres años, con excepción de la primera ronda, lo cual será determinado por un sorteo.
"Confiamos que en la rifa nos vaya bien y tengamos una estancia más prolongada que un año, pero en cualquier caso, aunque fuera sólo uno, esa primera etapa de vida del consejo va a ser crucial para sentar las bases de trabajo de lo que será el futuro de esta nueva instancia multilateral, y que haga diferencia sustantiva con lo que venía pasando en la comisión, que tenía ya descrédito muy grande, una serie de vicios ya muy marcados, y que sea un comienzo, realmente un renacimiento, en el tema de los derechos humanos dentro de Naciones Unidas", dijo el embajador Berruga Filloy.
Precisó que una de las ideas es romper también con algunas de las inercias en la ONU, que llegan al absurdo de que, por ejemplo, países que están en guerra ocupen asientos en el Consejo de Seguridad; son contradicciones muy importantes que hay que ir rompiendo poco a poco.
"Lo mismo sucedería en el caso de los derechos humanos: si un país que viole sistemáticamente estos derechos ocupara un asiento sería una incongruencia, que precisamente llevaría a un desprestigio similar al que tuvo la antigua Comisión de Derechos Humanos. La apuesta de México es que este consejo funcione con mayor legitimidad, con mayor credibilidad de la comunidad mundial", precisó.