Usted está aquí: miércoles 19 de abril de 2006 Política Defraudan a por lo menos 600 migrantes

Fueron engañados por empresa fantasma

Defraudan a por lo menos 600 migrantes

Pagaron 6 mil pesos por ser llevados a Estados Unidos

AGUSTIN SALGADO

Pretendían emigrar al estado de Georgia y terminaron defraudados y sin dinero en una agencia del Ministerio Público del Distrito Federal.

Originarios de Yetla de Juárez, Oaxaca, cuatro indígenas mixtecos se enteraron por medio de un anuncio en un periódico de que la agencia de trabajos Coahuila Martínez garantizaba, a cambio de 6 mil pesos, la visa de trabajo a Estados Unidos y el traslado a ese país desde la ciudad de México.

La oferta resultaba tentadora, pues además de asegurar el ingreso legal a Estados Unidos abría un amplio abanico de posibilidades respecto a los oficios disponibles: labores de intendencia, jardinería, albañilería y carpintería, entre otras.

Finalmente decidieron "aprovechar la oportunidad", recaudaron "como se pudo" el dinero y la mañana del 5 de abril emprendieron el viaje.

Primero se trasladaron a su cabecera municipal, Santo Domingo Tonalá; ahí abordaron un camión que los llevó a la ciudad de Huajuapan de León y finalmente alcanzaron una corrida con rumbo al Distrito Federal.

Luego de más de ocho horas de carretera, llegaron a la ciudad de México apenas con el tiempo suficiente para presentarse en las oficinas de la agencia de trabajos Coahuila Martínez, ubicada en la colonia Tabacalera.

Esa misma noche, una secretaria de nombre Erika Noemí les explicó las condiciones "del contrato": ellos estaban obligados a pagar los 6 mil pesos por adelantado, tramitar su pasaporte y presentarse el 16 de abril en esas mismas oficinas; la hora se las confirmarían después vía telefónica, "ya que en ese momento aún no estaba definida la logística", en tanto la "agencia" los trasladaría primero a Monterrey, ciudad en la que les "tramitarían" las visas de trabajo, para después partir "con todo y papeles" al estado de Georgia.

Los cuatro desembolsaron el dinero y regresaron a Yetla de Juárez "para pasar los últimos días con la familia".

Sin embargo, al día siguiente y en varios estados de la República comenzaron las denuncias en contra de la agencia de trabajos Coahuila Martínez.

Las acusaciones se dieron una tras otra y todas relataban el mismo modus operandi: 6 mil pesos de pago, la necesidad de contar con pasaporte vigente y el referente del consulado estadunidense en Monterrey como la dependencia que tramitaría las visas de trabajo.

El 6 de abril el delegado del Instituto Nacional de Migración en Michoacán y el coordinador de Atención a Migrantes de ese estado, Julio Ibarrola Suárez y Claudio Méndez Fernández, respectivamente, ofrecieron una conferencia de prensa en la que denunciaron que dicha asociación carecía de "sustento legal" para realizar sus actividades, además de que no estaba registrada ante el consulado de Estados Unidos en la capital del estado de Nuevo León.

El 7 de abril la directora de la Oficina de Atención a Coahuilenses en el Exterior, Hilda Gómez Rocha, advirtió sobre la estafa de la empresa y reveló que dependencias homólogas de los estados de Chihuahua y Zacatecas ya habían solicitado información sobre la agencia defraudadora.

El domingo 9 de abril, por lo menos 70 tlaxcaltecas, provenientes de diferentes municipios de aquel estado, se concentraron en la plaza de armas de la ciudad de Tlaxcala. Ese era el punto acordado con la "agencia" para iniciar el éxodo. Sin embargo el autobús nunca llegó y las llamadas telefónicas a las oficinas de la "agencia" resultaron infructuosas.

Sin saber lo que sucedía, los cuatro indígenas mixtecos empezaron a preocuparse luego de que los seis números telefónicos que venían apuntados en una tarjeta de presentación de la agencia no eran respondidos.

Desde el lunes 10 de abril y por tres días consecutivos trataron infructuosamente de comunicarse con la secretaria para que les informará la hora en la que partiría el autobús a Monterrey.

Al no obtener respuesta decidieron regresar a la ciudad de México "para ver qué era lo que sucedía" y fue como se enteraron que habían sido defraudados.

"Venimos de un pueblo de Oaxaca. Pagamos 6 mil pesos a una compañía que nos iba a llevar a Estados Unidos a trabajar, con todo y papeles, sin problemas. Pero nos engañaron, las oficinas ya no están y nosotros somos cuatro pero nos dicen que son más de 600 las personas engañadas", relata Adán Ortiz Romero en la entrada de la Agencia 50 del Ministerio Público de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, donde presentó la denuncia penal correspondiente.

 
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