Protesta de sindicalistas contra esa iniciativa en la Cámara de Diputados

Suspendieron sesión sobre la ley de cultura

ARTURO GARCIA HERNANDEZ

A última hora fue suspendida ayer la sesión de la Comisión de Cultura de la Cámara de Diputados, en la cual presuntamente las fracciones del PRI y del PAN aprobarían llevar al pleno un nuevo proyecto de ley de cultura, considerada por sus opositores como un ''clon" más de la llamada Ley de Fomento y Difusión de la Cultura, la ley Bermúdez.

Con la suspensión, los tiempos para discutir y aprobar el mencionado proyecto se acortan, pues el periodo de sesiones de la Cámara concluirá el 30 de abril.

En tanto, la Coordinación de Comunicación Social del PRD señaló en un comunicado que el ''desacierto" de incluir el tema de la ley de cultura en la agenda de la sesión dio al traste con la aprobación del dictamen de la iniciativa de Ley del Libro y la Lectura, que cuenta ya con el consenso de todas las fracciones parlamentarias y de un amplio espectro del gremio editorial.

''Con esta falta de oficio político se boicotea la posibilidad de aprobar una iniciativa tan importante y con un trabajo detrás del más amplio nivel", dice el boletín.

La suspensión de la sesión de la Comisión de Cultura fue anunciada por su presidente, el priísta Filemón Arcos, poco antes de la hora programada para su realización. Mientras, cerca de 300 trabajadores de instituciones del sector cultura (INBA, INAH, Radio Educación) de la Secretaría de Educación Pública se manifestaban a las puertas de la Cámara contra la nueva iniciativa.

El motivo oficial de la suspensión -de acuerdo con un comunicado de la oficina del diputado Arcos- es que se espera la incorporación de nuevos integranets de la comisión que suplan a otros ausentes por distintas razones (algunos del PRI que se volvieron independientes).

No obstante, en un encuentro con una comisión de representantes sindicales del sector cultura, Filemón Arcos también afirmó que prefería ''suspender la sesión a que haya un albazo o una cosas así".

El compromiso de Filemón Arcos

El lunes pasado, integrantes de la comisión organizadora del Parlamento Alterno de Cultura y Educación (PACE) -conformado por integrantes de distintos sectores de la comunidad cultural- advirtieron (La Jornada, 17 de abril) sobre un intento de albazo de diputados del PRI y del PAN para dar el visto bueno en la Comisión de Cultura a un proyecto de ''Ley de Coordinación para el Desarrollo Cultural", que no era más que otra versión ''parchada" de la ley Bermúdez, enviada a la Cámara el año pasado por el Ejecutivo.

Cuestionado por los representantes sindicales, Arcos sostuvo reiteradamente que él no ha faltado al compromiso contraído el 8 de diciembre pasado, cuando dijo estar de acuerdo en que antes de legislar en la materia se llevara a cabo un diagnóstico nacional de cultura.

También afirmó que no todo dependía de su voluntad: ''No soy absoluto". En este punto fue increpado sobre el papel de Alejandro Sandoval, quien a principios de año admitió (La Jornada, 23 de enero) estar elaborando un nuevo proyecto de ley de cultura en su calidad de secretario técnico de los trabajos en conferencia de las cámaras de Diputados y Senadores.

Sandoval explicó entonces que se trataba de un ''anteproyecto de predictamen'' elaborado por un ''equipo técnico'', cuya responsabilidad ''es tener listo el documento para el periodo de sesiones".

Ayer Filemón Arcos reconoció que fue decisión de la comisión técnica de la Comisión de Cultura integrar al orden del día la discusión del nuevo proyecto de ley: ''No estuve de acuerdo, pero hay que respetarlo".

No obstante, ayer se comprometió con la representación sindical a detener la discusión del dictamen en la comisión hasta el próximo martes, cinco días antes del final del periodo de sesiones.

Los trabajadores dieron la bienvenida al compromiso de Arcos, pero consideraron que ''el peligro" persiste y anticiparon que estarán pendientes.