El escritor mexicano recibirá este viernes el Premio Cervantes, en Madrid
Sergio Pitol rendirá homenaje a sus maestros y al exilio español en México
Su literatura, pensamiento y profusa memoria estarán presentes en el paraninfo de la Universidad de Alcalá de Henares
Comenzará la lectura pública del Quijote en ese recinto
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Sergio Pitol, tercer mexicano en recibir el Premio Cervantes
Foto: José Carlo González
Madrid, 19 de abril. Sergio Pitol se convertirá este viernes en el tercer escritor mexicano en recibir el Premio Cervantes, considerado el máximo reconocimiento de las letras en español.
La semblanza de la literatura, el pensamiento y la profusa memoria del galardonado se escucharán en sesión solemne en el paraninfo de la Universidad de Alcalá de Henares, como hicieron en su día Octavio Paz y Carlos Fuentes.
Pitol rendirá homenaje a sus maestros y al exilio español que arribó a México y forjó a varias generaciones en nuestro país, tras la Guerra Civil
Nacido en 1933, durante su largo periplo durante la segunda mitad del siglo pasado, Pitol vivió y viajó por el entonces dividido continente europeo y se convirtió en una de las voces más conocedoras de las corrientes y nombres de la literatura contemporánea de Europa del Este.
Su vida errante y su pasión por la lectura y la escritura fueron determinantes en la creación de su lenguaje literario, en el que se intercalan sesudas disquisiciones sobre autores u obras de referencia, con vivencias personales, pasajes de la historia reciente del mundo y episodios dignos de la mejor literatura fantástica.
Así lo atestiguan sus libros, entre ellos: No hay tal lugar (1967), Infierno de todos (1971), Juegos florales (1985), El desfile del amor (1985), Vals de Mefisto (1989) y El arte de la fuga (1996).
Autor de culto
A sus 73 años, Pitol era hasta ahora un prestigioso y reconocido escritor, tanto en su faceta de cuentista, novelista, poeta y traductor, sin embargo, siempre se consideró un autor de ''minorías", inclusive se le ha llegado a llamar ''de culto", a pesar de haber recibido numerosos galardones en América Latina y Europa.
En España, el país que lo homenajea en esta ocasión, se publican sus libros desde hace al menos tres décadas, cuando conoció a uno de sus editores actuales durante un tiempo en que residió en Barcelona, Jorge Herralde, fundador de Anagrama, sello que publicó recientemente una antología de cuentos del autor.
Pero la historia de Pitol con el amplio público español empezó a cambiar con la concesión del Premio Cervantes, que le ha permitido la vasta difusión de su obra y palabra viva. En los días previos a la sesión solemne de la universidad cervantina, el rostro del escritor mexicano aparece en todos los diarios del país; su palabra se escucha en numerosas radiodifusoras españolas y, como colofón, su discurso de recepción del galardón será transmitido en directo por la televisión pública. Además de que será el encargado de comenzar la lectura pública de El Quijote, este viernes.
Pitol se dedicó los recientes meses a preparar su discurso de recepción, que es el acto central del homenaje en el que los premiados esbozan su visión de Miguel de Cervantes y de su obra cumbre, El ingenioso hidalgo don Quijote de La Mancha.
En vísperas de esa cita, Pitol adelanta: ''Fue dificilísimo escribirlo, estaba blo-queado y no me salía. Pero al final lo escribí y les puedo decir que voy a hacer un homenaje a mis maestros literarios, todos ellos ya muertos", explicó el novelista en un encuentro con la prensa, en la sede del Ministerio de Cultura, en el que estuvo flanqueado por la ministra Carmen Calvo.
Entre esos autores figuran Anton Chéjov, Julio Verne, Robert Louis Stevenson, Mijail Bulgákov, Cervantes y otros, pero Pitol también puso énfasis en los intelectuales y creadores que emigraron de España tras la Guerra Civil (1936-1939) y la posterior oscuridad del franquismo.
''Los exiliados nos abrieron las ventanas al mundo tras el desastre que se vivió en España, con lo que conocimos a figuras como María Zambrano, José Bergamín, Manuel Martínez Pedroso, José Moreno Villa, Luis Cernuda o Manuel Altolaguirre, que nos marcaron mucho a mí y a los de mi generación, nos abrieron las ventanas al mundo y al espacio", aseveró Pitol.