Ya no recuerdan cómo se hace para prestar, sostiene

Pediré a banqueros que reactiven créditos: AMLO

Afirma que apoyará a campesinos y pescadores

JAIME AVILES ENVIADO

Jonuta, Tab., 21 de abril. Después de las elecciones del 2 de julio "voy a hablar con los banqueros, porque en este país la gente del pueblo tiene que volver a obtener créditos con intereses bajos para que se puedan reactivar las inversiones productivas", insistió hoy en sus discursos el candidato de la coalición Por el Bien de Todos, Andrés Manuel López Obrador.

Asimismo, al llegar a la cabecera municipal de Tenosique, en la triple frontera de Tabasco, Guatemala y Chiapas, se comprometió a transformar el Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen), porque "está extralimitado en sus funciones. No es una agencia de inteligencia, sino de espionaje, que viola los derechos fundamentales de los ciudadanos".

Durante su última visita como candidato presidencial al estado donde nació, entre miércoles y viernes López Obrador recorrió por carretera casi 2 mil kilómetros, estuvo presente en 13 de los 17 municipios de la entidad y habló en 13 concentraciones populares ante un total de 80 mil personas, a quienes dijo que a 70 días de los comicios conserva sobre sus contendientes una ventaja de 10 puntos, que es ya irreversible.

El abanderado de la coalición PRD-PT-Convergencia inició sus actividades públicas a las ocho de la mañana en su casa de Villahermosa, donde concedió una entrevista a un enviado especial de The New York Times, quien lo había acompañado miércoles y jueves en su gira por la costa y sierra tabasqueñas.

En opinión de ese periodista -que consultó a muchas personas en los círculos de poder de Estados Unidos, antes de venir a México para escribir sobre la campaña electoral en este país- "Washington y Wall Street no ven como problema" el probable triunfo de López Obrador. En cambio, añadió en una charla con este reportero, ayer en Tacotalpa, que "la clase dominante mexicana le tiene pánico".

En el tercer día de su gira proselitista número 13 del año, el ex jefe del Gobierno del Distrito Federal estuvo en los cuatro municipios que constituyen la región de los ríos de Tabasco, a saber, Emiliano Zapata, Tenosique, Balancán y Jonuta. Y ahí, en Zapata, fue donde abordó el tema de su "reunión pendiente" con los banqueros para reanudar la entrega de créditos a las clases populares.

Porque la banca, dijo, "ahora sólo vive del erario; cada año recibe 50 mil millones de pesos por concepto de intereses del Fobaproa, pero los banqueros ya no recuerdan cómo se hace para prestar dinero a la gente. Eso se tiene que terminar. El gobierno apoyará las actividades económicas de los agricultores, los ganaderos y los pescadores", afirmó.

Para contrarrestar los efectos del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, "que a partir de 2008 permitirá la libre introducción al país de maíz y frijol, vamos a apoyar a 25 millones de familias que cultivan esos productos, y lo vamos a hacer estableciendo precios de garantía para proteger a los campesinos; ya basta de que nuestros productores agrícolas compitan con los de Estados Unidos, que sí reciben subsidios de su gobierno, lo que tienen prohibido los campesinos de aquí".

Y abundó: "en el extranjero, a los que tienen vacas lecheras el gobierno les entrega dos dólares diarios por cabeza de ganado, mientras en México más de 20 millones de familias viven con dos dólares al día; eso no puede seguir así". También dijo sobre quienes critican su propuesta de entregar 730 pesos mensuales a cada uno de los 4 millones de adultos mayores que hay en el país: "En España, los adultos mayores reciben alrededor de 8 mil pesos mensuales; aquí los tecnócratas se escandalizan porque queremos contribuir a que tengan una vejez tranquila quienes trabajaron ya toda su vida".

Más tarde, en Tenosique, se refirió al Cisen, organismo que, dijo, revisará para que deje de hacer espionaje contra los ciudadanos. Luego, en Balancán, donde una gran manta declara que "AMLO es un peligro para los corruptos", sostuvo que su campaña "no es sólo para pedir el voto, sino para acercarse más a la realidad, porque difícilmente se puede transformar lo que mal se conoce". Y al anticipar cómo será su método de trabajo al frente del gobierno federal, dijo que todos los días, a las seis de la mañana, se reunirá con los secretarios del gabinete de seguridad y, a partir de las siete, saldrá a recorrer el país para supervisar las obras de infraestructura, que "no sólo son necesarias, sino que ayudarán a reactivar la economía fomentando el empleo".

Una gran sorpresa lo aguardaba en Jonuta, el municipio más pobre de Tabasco, donde cocinándose a fuego lento, con los 41 grados del calor de la tarde, más de 10 mil personas lo recibieron con aclamaciones, banderas y cohetes. De nuevo López Obrador repitió su oferta de política económica y social -ayuda a ancianos, discapacitados y madres solteras; reactivar la economía, ofrecer bienestar a la población, ahorrar 100 mil millones de pesos anuales combatiendo la corrupción, bajar las tarifas de luz, gas y gasolina desde diciembre y hacer obra pública-, se comprometió a construir un hospital de especialidades y una institución de estudios superiores.

Y en una ardiente evocación de la lucha de los liberales del siglo XIX contra Maximiliano, dijo que "si Benito Juárez logró restaurar la República, a nosotros nadie nos impedirá restaurar el país". Acompañado por Raúl Ojeda, candidato al gobierno estatal y oriundo de esa tierra, López Obrador denunció que en el gabinete de Vicente Fox "hay una caja de ahorros que cuesta 3 mil millones de pesos anuales al pueblo", cantidad, comparó, que "equivale al presupuesto de Jonuta de los próximos 30 años".

Antes de partir hacia Ciudad del Carmen, Campeche, asediado por los periodistas que lo siguen para que opinara sobre la resolución del IFE de no condenar los espots del PAN que lo declaraban un supuesto "peligro para México" y acerca de la decisión panista de retirarlos del aire, se limitó a contestar que esos mensajes eran "excesivos".