Choques cerca del Palacio Real; 27 lesionados
Opositores nepaleses protestan pese al toque de queda vigente
Katmandu, 23 de abril. La oposición nepalesa convocó a una movilización para el martes en las cercanías del Palacio Real de Katmandú, en cuyos alrededores miles de personas se manifestaron en favor de la democracia, pese al toque de queda vigente.
En el norte de Katmandú esta manifestación congregó, de acuerdo con testigos, a menos gente que la anterior protesta, sólo unas 30 mil personas encabezadas por los líderes de la alianza de siete partidos SPA, frente a las 200 mil ó 300 mil del sábado, estimadas por diplomáticos y medios de prensa.
Los manifestantes, algunos de ellos con ramas de olivo en señal de paz, pedían a gritos la abolición de la monarquía, y otros se empeñaban en convencer a los policías de que cambiaran de bando. De todas formas los efectivos dispararon de nuevo balas de goma para impedir el avance de la manifestación hacia el Palacio Real y estallaron enfrentamientos con saldo de 27 heridos.
Al igual que otros políticos, Bamdev Gautam, número dos del Partido Comunista de Nepal Marxista-Leninista Unificado, uno de los siete partidos de la alianza que fraguó el movimiento contra el rey Gyanendra, animó a las fuerzas de seguridad a unirse a los manifestantes y a éstos les rogó que dejen de apedrear a la policía.
Durante la manifestación de este domingo, Gauman también convocó a una protesta masiva para el martes y pidió a todo el pueblo que salga a la calle.
Las calles de la capital estaban prácticamente desiertas, mientras numerosos soldados vigilaban el Palacio Real.
Ante una serie de protestas sin precedente desde el 6 de abril, el monarca instó el viernes a la oposición a proponerle un nombre para el puesto de primer ministro, oferta rechazada por la alianza de partidos que pide una Asamblea Constituyente.
El rey Gyanendra se atribuyó plenos poderes tras destituir a su gobierno en febrero de 2005, al que acusaba de corrupción y de incapacidad para erradicar la rebelión que libra una lucha contra la monarquía, con un balance de 12 mil 500 muertos en diez años.