Una deportación masiva no va a funcionar, señala
Bush insta al Congreso a lograr una reforma "racional"
Irvine, 24 de abril. El presidente estadunidense, George W. Bush, instó el lunes al Congreso a aprobar una reforma migratoria "racional" que mejore la seguridad fronteriza, otorgue permisos de trabajo temporales a extranjeros y defina la suerte de millones de indocumentados en el país.
En un discurso sobre migración pronunciado en Irvine, California, el estado con más migrantes de Estados Unidos, y a seis meses de las elecciones legislativas de noviembre, Bush advirtió que el tema enciende pasiones y admitió el deber del gobierno de dar seguridad a la frontera.
Sin embargo, también defendió su plan de otorgar permisos temporales de trabajo a extranjeros para llenar vacantes que los estadunidenses no quieran ocupar.
"Creo que la mejor manera de controlar mejor nuestra frontera, además de asegurarnos de que tenemos equipamiento moderno y personal allí -que tenemos y que está aumentando cada semana- es tener un plan racional que reconozca que la gente viene aquí a trabajar y permitir que lo hagan de manera temporaria", indicó.
"Sé que éste es un debate delicado", señaló Bush. "Pero una cosa que no podemos perder de vista es que estamos hablando de seres humanos, seres humanos decentes."
Tras multitudinarias manifestaciones de inmigrantes y sus defensores en California y todo el país en las últimas semanas, Bush insistió asimismo en que es "irreal" llevar a cabo una "deportación masiva" de los 12 millones de indocumentados que, según estimaciones, residen en Estados Unidos. "Simplemente no va a funcionar", aseguró.
Las manifestaciones llegaron hasta el hotel donde se hospedó Bush durante su visita a California. Los inconformes llevaron mantas que decían "Salven nuestra nación, aseguren nuestras fronteras", y "Respalden los derechos de nuestros migrantes".
El Senado estadunidense reanudará esta semana el debate sobre una reforma migratoria, tras fracasar en lograr un acuerdo a comienzos de abril.
La Cámara de Representantes aprobó en 2005 un proyecto de ley que se limita a endurecer los controles en la frontera pero no habla de un programa de trabajadores temporales ni de qué hacer con los indocumentados que residen en Estados Unidos.
El secretario de prensa de la Casa Blanca, Scott McClellan, informó que el presidente Bush citó a un grupo de senadores demócratas y republicanos en la Casa Blanca este martes para analizar el tema.