Usted está aquí: martes 25 de abril de 2006 Mundo EU, más cuidadoso al matar perros que al ejecutar convictos: HRW

Los protocolos, anacrónicos, denuncia; la anestesia resulta insuficiente

EU, más cuidadoso al matar perros que al ejecutar convictos: HRW

Los 12 jurados deliberan sobre el futuro del francés Zacarias Moussaoui

AFP Y DPA

Ampliar la imagen En imagen de archivo, Zacarias Moussaoui el único acusado en Estados Unidos por los atentados del 11-S, para quien la fiscalía pidió la pena capital Foto: Ap

Nueva York, 24 de abril Estados Unidos es "más considerado con el sacrificio de perros que con la ejecución de personas", denunció hoy la organización defensora de los derechos humanos Human Rights Watch (HRW), que sostuvo que los condenados a muerte en este país son sometidos al riesgo de "padecer horribles dolores durante la ejecución mediante inyección letal".

En un informe titulado Con tal que mueran: inyecciones letales en Estados Unidos, HRW sostuvo que este método, el más común de ejecución en el país, expone a los condenados al riesgo innecesario de un dolor insoportable, ya que la anestesia que se suministra posiblemente no sea suficiente para producir una muerte indolora.

Agregó que no se han realizado estudios suficientemente avanzados sobre esta cuestión.

"Estados Unidos es más cuidadosa al matar perros que al matar personas", dijo Jamie Fellner, director de programa sobre Estados Unidos en la institución con sede en Nueva York.

En un informe de 65 páginas, el organismo de control destacó que el protocolo de inyección letal, que se usa en 37 de los 38 estados del país en los que rige la pena de muerte, sigue vigente tres décadas después de haber sido instaurado.

La ejecución consta de tres etapas. Primero, el prisionero recibe una inyección de sodio tiopental, un anestésico, luego, una droga que paraliza los músculos, y finalmente, cloruro de potasio para detener el corazón.

Según citó HRW, el sodio tiopental y el agente paralizante podrían dejar al prisionero totalmente consciente al momento de recibir la inyección final.

El informe precisa que la muerte en los reos es provocada por el suministro del compuesto cloruro de potasio, el cual provoca un dolor tan fuerte "que la Asociación Estadounidense de Médicos Veterinarios prohíbe su uso para la eutanasia, a menos que un veterinario establezca que al animal que será sacrificado se la ha suministrado un anestésico capaz de llevarlo a un nivel profundo de inconciencia".

"Sólo porque un prisionero haya matado sin conciencia ni cuidado no quiere decir que el Estado deba hacer lo mismo", dijo Fellner.

El informe de HRW fue divulgado dos días antes de que la Suprema Corte de Estados Unidos tenga previsto una audiencia oral sobre los procedimientos que debe seguir un prisionero para recusar las inyecciones letales.

En este contexto, en Alexandria los doce jurados encargados de determinar si Zacarias Moussaoui debe ser condenado a la pena de muerte por su complicidad con los autores de los atentados contra objetivos en Nueva York y Washington el 11 de septiembre de 2001, se retiraron esta tarde para deliberar.

Previamente, la fiscalía pidió la pena capital para el acusado, un ciudadano francés de origen marroquí, mientras su defensa pidió que no sea condenado a muerte, al argumentar que con ello lo convertirían en un mártir.

 
Compartir la nota:

Puede compartir la nota con otros lectores usando los servicios de del.icio.us, Fresqui y menéame, o puede conocer si existe algún blog que esté haciendo referencia a la misma a través de Technorati.