Encuentran similitudes en las características de las víctimas y de los homicidios

Sospechan de asesino serial en Edomex

Según las autoridades, podría tratarse de un taxista ''robusto''con ayuda de un cómplice

RENE RAMON CORRESPONSAL

Nezahualcoyotl. Méx., 24 de abril. Físicamente eran parecidas: complexión regular y estatura media, entre 15 y 24 años de edad. Todas fueron ahorcadas y sus cuerpos abandonados en medio de los escombros de obras en construcción en Chimalhuacán. Se trata de cinco de las siete mujeres asesinadas en las últimas semanas en esta región del estado. Cuatro fueron secuestradas entre las cinco y las seis de la mañana, cuando se dirigían a su trabajo. La autoridad policiaca presume que se trata de un asesino serial.

Han transcurrido ocho meses desde el primer hallazgo y hasta ahora la Procuraduría General de Justicia del estado de México (PGJEM) no ha logrado mayor avance. La línea de investigación más sólida se refiere a un taxista robusto.

De acuerdo con los expedientes de la investigación, hay otros indicios que hacen suponer que se trata de un mismo homicida y que podría tener un cómplice, pues dos de las jóvenes fueron violadas.

La primera víctima tenía un cordón en el cuello y el otro extremo estaba atado a un clavo en la pared. La segunda fue ultrajada y después ahorcada con un cable de electricidad atado a una trabe. Sus manos estaban amarradas por detrás con unas agujetas.

En el tercer caso la chica estaba menstruando y presumiblemente por eso no fue ultrajada. La encontrason ''atada con una piola al cuello, con punto de apoyo en una armella de la puerta, manos maniatadas con la misma piola y los ojos vendados con una franela''.

La cuarta víctima, desaparecida el 28 de febrero, se encontraba maniatada y amordazada con una tela y mostraba ''un surco completo en el cuello''. Al igual que la primera no presentaba signos de violación.

La última, quien apenas tenía 15 años, desapareció un domingo. Fue ultrajada y su cuerpo abandonado en un colchón viejo tirado en el piso, ''maniatada con agujetas, amordazada con una sudadera, el cuello amarrado con una piola y el otro extremo hacia una varilla de un castillo'' de la casa en construcción donde fue abandonada.

Los tres primeros secuestros ocurrieron a menos de medio kilómetro de la franja del Bordo de Xochiaca, en Nezahualcóyotl. El primero sucedió en la colonia Las Flores y los otros dos en la colonia El Sol. Sólo hay diez calles entre ambas colonias.

Los últimos dos homicidios -atribuidos al asesino serial- se cometieron en Chimalhuacán, uno a sólo 70 metros de la vivienda de la víctima, en el fraccionamiento Los Olivos, y el último en la colonia Tlatel Xochitenco.

Comienza el terror

Según el expediente CHIM/III/4513/05, el primer feminicidio ocurrió el 25 de agosto de 2005. Esa mañana Aideth Váldez Solano, de 19 años, desapareció cuando se dirigía a la fábrica de plásticos donde laboraba, en Iztapalapa. Al término de su jornada recogía a su hija Monserrat, de dos años, en la guardería. Su madre, María Eugenia Solano, recibió por la tarde dos llamadas telefónicas; la primera fue para avisarle que su hija no recogió a su nieta y la segunda para decirle que tampoco había ido a trabajar.

Encontraron el cadáver un día después. Solano Moreno ha estado ocupada gestionando ante la Procuraduría Federal del Trabajo (Profedet) una pensión alimentaria para su nieta huérfana.

Concepción Victoria González González, de 16 años, fue la segunda víctima. El tercer homicidio, indica la PGJEM, ocurrió el 21 de febrero. Inés Martínez Fuentes, de 19 años, fue encontrada en un predio del npumero 26 de la calle Gardenia, barrio Portezuelos, en Chimalhuacán. Inés tenía un mes viviendo con unos familiares en la calle 22 de la colonia El Sol y trabajaba de secretaria en un taller de herrería ubicado a unas calles de donde vivía.

Diana Nayeli Gaona Ponciano, de 24 años, egresada del Instituto Politécnico Nacional, fue secuestrada poco después de las seis de la mañana del 28 de febrero, a 70 metros de su casa, en el fraccionamiento Los Olivos de Chimalhuacán. Según la denuncia CHIM/I/1168/06 el homicidio ocurrió el mismo día, durante el cual su familia la buscó intensamente luego de que les informaron que Diana Nayeli no había ido a trabajar al Hospital General Gustavo Baz Prada.

La chica fue encontrada en la calle 12, lote 42 de la colonia Arturo Montiel. Se presume que fue asesinada en otro lugar, pues en el predio se encontraron huellas de que su cuerpo había sido arrastrado.

Laurencio Gaona Sánchez, padre de la víctima, relató que el día de su desaparición él encontró el almuerzo que minutos antes había preparado a Diana.

''Yo voy algunas veces a la lechería. Ese día no me tocaba leche, pero fui al expendio a tratar de conseguir una bolsa. Al pasar encontré el sándwich de mi hija. En ese momento no me imagine que hubiera pasado algo malo; a lo mejor mi hija vio el transporte que iba pasando; a lo mejor corrió, se le cayó el alimento y lo dejó ahí...''

Sin embargo, llegó la noche y luego el recorrer durante tres horas los módulos de vigilancia policiaca y otros centros de emergencia en Nezahualcóyotl y Chimalhuacán, hasta que la encontraron.

El último homicidio que se atribuye al presunto asesino serial es el de Dulce Janet Moreno Santiago, de 15 años. Según la denuncia CHIM/I/1413/06, la menor fue asesinada en las mismas circunstancias que las otras víctimas, y también fue violada.

La joven vivía en la calle Centeno, a unas cuadras de donde su cuerpo fue encontrado.

De acuerdo con su familia, la menor desapareció el domingo 12 de marzo a las 7 horas, cuando se dirigía al domicilio de una tía para cuidar a un primo.

Exhorto a Peña Nieto

Abel Villicaña Estrada, procurador del estado de México, acudió a la subprocuraduría regional de justicia con sede en Nezahualcóyotl para conocer del avance de las investigaciones y ahí reconoció que aún no hay pistas que indiquen si son uno o más los asesinos de las cinco mujeres.

En el Palacio Legislativo San Lázaro, la tarde del jueves 6 de abril diputados federales aprobaron un exhorto al gobernador mexiquense Enrique Peña Nieto para que diseñe y aplique ''un programa de prevención, atención e investigación de delitos violentos contra las mujeres''.

Chimalhuacán, tierra de nadie

En los último ocho meses se han hallado aquí los cadáveres de siete mujeres, cinco ahorcadas y dos más descuartizadas. En uno de los últimos casos las extremidades fueron arrojadas al canal La Compañía y en otro fueron abandonadas en bolsas a un costado del panteón Los Rosales. La PGJEM consignó ante un juez del penal estatal de Chalco al párroco César Torres Martínez, quien presuntamente asesinó a su pareja sentimental, Verónica Andrade Salinas, luego de que ésta le exigió pensión alimentaria para su hija de un año y seis meses de edad.

El otro caso pendiente es el de Marlene Natalia Pérez Villafuerte, de 21 años de edad, quien era estudiante de la UNAM. Su cuerpo fue destazado y arrojado al canal La Compañía. Sólo se han encontrado algunas extremidades.