Da entrada juez del DF a petición de amparo del capo
García Abrego exige saber quién ordenó su detención
El ex líder del cártel del Golfo impugna que la Sedena rehúse informarle sobre su captura e "inmediata extradición" a EU
Nueve años después de que el gobierno de Ernesto Zedillo detuvo a Juan García Abrego, llamado barón de las drogas, en la ciudad de Monterrey, Nuevo León, para deportarlo de inmediato a Estados Unidos, en medio de un operativo de Estado, el ex líder del cártel del Golfo -quien durante varios años compró protección de autoridades gubernamentales, judiciales y militares de México, a fin de operar con total impunidad- quiere saber los verdaderos motivos de su detención, quién delató su ubicación, cuál fue la implicación del Ejército en su aprehensión y quién ordenó su captura.
Desde la prisión conocida como ADX, en Florence, Colorado, el ex capo de la droga firmó una demanda de amparo en la que solicitó la protección de la justicia federal mexicana para que se obligue al general Ricardo Gerardo Clemente Vega García, titular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), a dar respuesta a tres peticiones de información que realizó durante 2005, pues el militar se ha negado rotundamente a otorgarle esos datos.
El pasado lunes, el otrora poderoso narcotraficante aseguró por escrito a un juez del Distrito Federal que es mexicano de nacimiento, y negó su naturalización como ciudadano estadunidense, como argumentaron en su momento las autoridades del país para justificar su extraña deportación.
En su demanda, García Abrego exige que se le explique por qué fue detenido el 14 de enero de 1996 por militares y judiciales federales, estatales y municipales, auxiliados por agentes de la DEA, sin que le mostraran una orden de aprehensión.
Asegura que con esa acción, las autoridades militares y el gobierno zedillista violaron sus garantías constitucionales, en específico los artículos 8, 14 y 16 de la Carta Magna, pues si se le imputaba algún delito debió quedar preso en una cárcel mexicana y a disposición de un juez.
Hace nueve años, Ernesto Zedillo fue convencido por sus colaboradores cercanos de expulsar del país al baron de las drogas, con el propósito de "proteger a la sociedad mexicana" de la supuesta amenaza que representaba tener en cualquier cárcel del país al jefe del cártel del Golfo, aunque la postura oficial fue que García Abrego era naturalizado estadunidense y procedía su deportación.
Según consta en el juicio de garantías 417/2006-II, al que tuvo acceso La Jornada, el juez Jacinto Figueroa Salmorán admitió a trámite la petición del narcotraficante y ordenó al titular de la Sedena que a más tardar el próximo primero de mayo le informe si es verdad que ha negado esa información al quejoso y, de ser así, explique cuál es el fundamento legal para tal negativa.
García Abrego firmó su demanda de amparo el pasado 31 de marzo, y el próximo 12 de mayo Figueroa Salmorán celebrará la audiencia constitucional, a partir de la cual determinará si concede o niega el amparo al ex líder del cártel del Golfo, actualmente liderado por Osiel Cárdenas Guillén desde el penal federal de La Palma.
Las tres peticiones que directamente hizo el barón de las drogas a la Sedena fueron el 28 de abril, el 10 de junio y el 5 de noviembre de 2005.
En el escrito de demanda el capo mexicano refiere: "El día 14 de enero del año de 1996, en la ciudad de Monterrey se me detuvo y aprehendió para inmediatamente ser subido a un avión y trasladado a Estados Unidos.
"En dicha aprehensión y traslado intervinieron elementos militares de la Sedena, agentes policiacos de diversas corporaciones y agentes americanos (sic) (...)
"En tal virtud, solicito atentamente se me expida constancia de la intervención que tuvo la Sedena en el hecho a que me refiero, se me informe de quién provino la orden de mi entrega a Estados Unidos, a qué autoridad norteamericana (sic) fui entregado y las causas o motivos de este hecho."
Además, García Abrego indica en el escrito que, en su momento, la Sedena le respondió -mediante los oficios S34308 y S20900 del 2 de junio de 2005- que no localizaron antecedentes sobre el caso.
Sin embargo, el capo del narcotráfico expuso en su demanda: "No es lo mismo que la Sedena no tenga documentación al hecho de que sí tuviera participación en mi detención, como demuestran diversas notas periodísticas de entonces y los videos transmitidos por las televisoras Reuter Tv, Tv Azteca y Televisa".