Subió 27.5% la entrada de remesas en enero-marzo
Contra toda previsión, el ingreso de divisas por remesas de trabajadores residentes en Estados Unidos volvió a romper un registro histórico en el primer trimestre del año, periodo en que sumaron 5 mil 185 millones de dólares, un crecimiento de 27.5 por ciento en comparación con enero-marzo de 2005, informó ayer el Banco de México (BdeM).
El banco central dio cuenta de que las remesas se han convertido en uno de los motores de impulso del mercado interno. De tal forma, han dejado de ser sólo un complemento o sustituto del ingreso familiar para volverse una fuente de crecimiento de la economía.
La entrada de divisas por remesas en el primer trimestre superó en mil 120 millones de dólares a la del periodo enero-marzo de 2004.
''En el caso de las remesas, se anticipa que su monto en el año en curso pueda resultar equivalente a 4 puntos porcentuales del gasto en consumo privado del país'', expuso el banco central en el Informe sobre la inflación enero-marzo de 2006, divulgado ayer.
Benefician al consumo y la inversión
La previsión del banco central apunta a que en 2006 las remesas superarán holgadamente la cifra, ya de por sí histórica, registrada en 2005, cuando el ingreso de divisas por esta vía fue de 20 mil 35 millones de dólares.
''La actividad económica en México evolucionó favorablemente durante el primer trimestre del año. A este resultado contribuyó de manera especial la expansión de las exportaciones de manufacturas, principalmente las relacionadas con la industria automotriz. En adición al buen desempeño de las exportaciones, el gasto interno ha mantenido su vigor. Al respecto, cabe destacar que el consumo y la inversión continúan beneficiándose de los ingresos por remesas familiares y por exportaciones de crudo. De esta manera, se anticipa un crecimiento del PIB cercano a 5.2 por ciento para el primer trimestre del año'', mencionó el reporte.
Para todo el ejercicio de 2006, el banco central anticipó un crecimiento de 4 por ciento, un cuarto de punto más que su estimación previa, comento Manuel Ramos Francia, director de investigación económica, durante la presentación del informe.
Como menciona el reporte, las remesas son ya una fuente estable de crecimiento interno, pero también un factor de estabilidad financiera y de las cuentas externas del país. Desde la crisis de 1995, la balanza de pagos del país -un indicador que mide el saldo de las transacciones comerciales y financieras con el exterior- ha resultado negativo, una tendencia que este año cambiará en parte por las remesas, según añade el reporte.
Dice: ''Al cierre del primer trimestre de 2006 la balanza comercial, al igual que la cuenta corriente de la balanza de pagos, arrojaron saldos superavitarios, aunque fue reducido el de esta última. Ello, no obstante que en ese periodo la demanda agregada y el producto presentaron expansiones a tasa anual mayores que las que habían registrado en el cuarto trimestre del año pasado y en todo 2005, con el consecuente impacto al alza en la demanda por importaciones de bienes y servicios''.