Más de cien mil personas huyen de sus hogares por la violencia sectaria, según cifras oficiales
Ola de atentados deja al menos 30 muertos en ciudades iraquíes
Reporta la policía el hallazgo de 45 cadáveres acribillados en varios distritos de Bagdad
El Ejército del Mehdi asegura haber derribado helicóptero del ejército británico en Basora
Ampliar la imagen Una mujer llora por la muerte de un familiar cuyo cuerpo fue encontrado ayer, acribillado, cerca de un hospital en el sur de Bagdad Foto: Ap
Bagdad, 7 de mayo. La violencia ensangrentó de nuevo a Irak este domingo con la muerte de 30 personas, casi todas en atentados suicidas, y el hallazgo de 45 cuerpos acribillados, mientras se confirmó que cinco soldados británicos murieron el sábado en Basora al estrellarse en un helicóptero, hecho que fue reivindicado por el Ejército del Mehdi, del clérigo radical chiíta Moqtada Sadr.
En la sureña Kerbala 15 personas perdieron la vida y 10 resultaron heridas al estallar un coche bomba en esta ciudad, situada al sur de Bagdad, indicó Ali Musa, responsable del servicio de urgencias del hospital local.
Según las autoridades de esta ciudad santa, uno de los lugares de peregrinación más importantes de los chiítas, el coche explotó cerca de un restaurante y de un edificio oficial, en pleno centro.
En Bagdad, un primer atentado ocurrió a primeras horas de la mañana en el barrio este de Aadamiyá, cuando un coche bomba fue detonado al paso de un convoy del ejército iraquí, matando a ocho personas e hiriendo a 15, la mayoría soldados, según el Ministerio del Interior.
Otra explosión ocurrió en Waziriyá, al este de la capital, cerca de los locales del diario Al Sabah, cercano al gobierno, y en el que falleció un civil y otros cinco resultaron heridos. Por la tarde, dos policías fueron abatidos por desconocidos en Yarmuk, al oeste de Bagdad.
Mientras, en la norteña ciudad de Mosul, cuatro policías perdieron la vida tras la detonación de una bomba artesanal en la zona este, según la policía, mientras cerca de Tikrit, también al norte, siete personas fueron heridas en un ataque.
En las últimas 24 horas la policía iraquí encontró los cuerpos de 45 personas acribilladas en Bagdad, de ellas 28 en Jarj, al este, otros 15 en el distrito occidental de Rusafa y dos más en Madain, detrás del hospital de esta localidad situado al sur de Bagdad.
Según cifras oficiales más de 100 mil personas han huido de sus hogares para escapar de la violencia sectaria entre chiítas y sunitas que se ha registrado en los últimos tres meses.
A su vez, el Ministerio de Defensa británico, aunque no confirmó expresamente la muerte de los militares, aseguró que no había más de cinco personas a bordo del helicóptero Lynx, de la real fuerza aérea, que se estrelló el sábado en la sureña ciudad chiíta de Basora.
Un comandante del Ejército del Mehdi, la milicia del clérigo radical chiíta Moqtada Sadr, aseguró que sus hombres derribaron el aparato con un misil de fabricación rusa que dispararon desde un edificio en el distrito de Al Ashaar, al noroeste de Basora. Sin embargo, no hay información independiente al respecto.
El presidente iraquí, Jalal Talabani, envió un mensaje de condolencias por la muerte de los soldados ingleses.
Tropas británicas enviadas al lugar del incidente la víspera se enfrentaron con hombres armados y como consecuencia cinco iraquíes murieron. Autoridades británicas señalaron hoy que los disparos que mataron a los civiles pudieron ser de los rebeldes, quienes también dispararon morteros.
En tanto, el Kurdistán iraquí unificó su administración al reconciliarse los dos partidos kurdos históricos, 15 años después de haber adquirido su autonomía respecto de Bagdad tras la primera guerra del Golfo.
El Parlamento kurdo, elegido por cuatro años el 30 de enero de 2005, votó por unanimidad, en Erbil, la formación de un gobierno único para esa región autónoma en el norte iraquí, poniendo fin así al anterior sistema de dos administraciones locales.
Nijirvan Barzani, dirigente del Partido Democrático del Kurdistán (PDK de Masud Barzani, su tío), es el nuevo primer ministro del gobierno unido.
Omar Fattah, de la Unión Patriótica del Kurdistán (UPK del presidente iraquí Jalal Talabani) fue nombrado viceprimer ministro en esta sesión solemne del Parlamento kurdo, compuesto por 111 diputados.
La lucha de los nacionalistas kurdos se inscribe en la reivindicación de un Estado con una cultura, una historia y una lengua, de origen indo-europeo, comunes.
Un deseo de independencia provocó reacciones muy violentas de las autoridades de Bagdad, con desplazamientos forzados de población kurda en los años 70, y una política de arabización provocó el regreso de las guerrillas kurdas a las montañas.
En 1988, cuando la guerra contra Irán llegaba a su fin, el entonces presidente Saddam Hussein lanzó una campaña de terror conocida como Anfal (botín), que dejó más de 100 mil muertos en el Kurdistán, que incluyó ataques con armas químicas en la ciudad de Halabja, donde murieron 5 mil kurdos.
Mientras una coalición internacional bajo comando estadunidense derrotaba a las tropas iraquíes en Kuwait, en 1991, la población peshmerga se sublevó nuevamente provocando una brutal represión que llevó a los países de Occidente a instaurar una zona de protección en la región, que se convirtió de hecho en una cesión de autonomía.
Los kurdos representan casi 20 por ciento de la población iraquí.