Afecta a palestinos casados con ciudadanos israelíes
Ratifica la Corte Suprema ley que impide unificación familiar en Israel
Ampliar la imagen En Eizariya, en los límites de Jerusalén, un niño palestino participa en la celebración de la Nakba, día de luto por el establecimiento de Israel en 1948 en la zona y el desplazamiento de cientos de miles de palestinos Foto: Reuters
Jerusalén, 14 de mayo. La Corte Suprema de Israel ratificó este domingo una ley que niega a los palestinos de Cisjordania o de la franja de Gaza, casados con ciudadanos israelíes, el derecho de vivir en Israel, con el argumento de que constituyen una amenaza potencial para la seguridad.
La Corte votó por una mayoría seis contra cinco por no cancelar una enmienda de hace cuatro años sobre la ley que proscribía la unificación familiar en Israel entre palestinos y árabes de Israel.
De esta manera fue rechazada una demanda contra esta ley de organismos de derechos humanos y familias afectadas. Para los árabes israelíes esto es otra prueba de que son considerados ciudadanos de segunda clase.
El texto, calificado de "discriminatorio" y "racista" por asociaciones de defensa de los derechos humanos, fue denunciado por Amnistía Internacional y por el Comité de la Organización de Naciones Unidas para la Eliminación de la Discriminación Racial.
La ley fue aprobada con el argumento de que entre los "cerebros" de varios ataques contra blancos israelíes se encuentran palestinos que obtuvieron el derecho de residencia al casarse con árabes israelíes. Sin embargo, los jueces no se ponían de acuerdo en su fallo, por lo que fue aprobada por un estrecho margen.
Por otra parte, el ejército de Israel mató a siete palestinos y dejó ocho heridos, entre ellos un camarógrafo que trabaja para una agencia de prensa extranjera, durante operaciones realizadas en las localidades cisjordana de Kabatiya y Jenin, para arrestar a militantes.
La primera víctima mortal se registró en Jenin durante un tiroteo que se desató cuando los soldados iban a efectuar las detenciones. Se trató de Ali Jabarren, un funcionario de inteligencia de 21 años.
Después, en Kabatiya perdieron la vida otros seis palestinos, entre ellos dos hermanos. De las víctimas, cinco eran miembros de los Comités de Resistencia Popular, y el otro de Jihad Islámica.
En ese contexto, la marina israelí interceptó frente a las costas de Gaza un embarcación palestina que transportaba cientos de kilos de explosivos y minas, y detuvo a su tripulación.
En tanto, el primer ministro palestino, Ismail Haniyeh, pidió a los negociadores de paz en Oriente Medio que traten directamente con el gobierno, encabezado por Hamas, para acelerar un nuevo mecanismo de ayuda, si bien reiteró que "no hará concesiones políticas que sean dañinas para los derechos de los palestinos".
Haniyeh dijo que las medidas adoptadas el martes pasado por el cuarteto internacional de paz, que incluye la creación de un nuevo mecanismo para transferir fondos a los palestinos sin que lleguen a Hamas, tomarán semanas y el pueblo palestino no podrá esperar más.