Constata el gobernador las quejas por el uso excesivo de fuerza en el poblado mexiquense
Demuestra la CNDH a Peña Nieto saña y abusos policiacos en Atenco
El mandatario instruye al procurador estatal a iniciar averiguaciones para sancionar a quien resulte responsable
Ampliar la imagen Enrique Peña Nieto y José Luis Soberanes. Imagen, cortesía de la CNDH
El gobernador del estado de México, Enrique Peña Nieto, asistió ayer a la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), donde sostuvo una reunión de tres horas con el presidente de ese organismo, José Luis Soberanes Fernández. El motivo del encuentro, se informó oficialmente, fue para que el mandatario estatal constatara de manera directa las quejas de los habitantes de San Salvador Atenco, por la saña y los abusos con que actuó la policía al irrumpir en ese poblado los días 3 y 4 de mayo.
En la reunión, Peña Nieto conoció las quejas de ciudadanos atenquenses contra las diferentes policías por la brutalidad y el excesivo uso de fuerza con que actuaron en las detenciones e irrupción a dicho poblado. Trascendió que en el encuentro -''estrictamente privado''- el mandatario mexiquense vio algunas imágenes de los detenidos, casi todos golpeados y algunos con severas lesiones, algunos ensangrentados por las golpizas que recibieron, otros recibiendo toletazos y patadas, unos más con rostros hinchados, moretones, raspones, cortadas u otras lesiones.
Sobre la mesa, testimonios de los afectados
Luego de escuchar que se han recibido ya más de 150 quejas por presuntas transgresiones a los derechos humanos, entre ellas 23 por abuso y violación sexual, Peña Nieto -informó la Comisión Nacional de Derechos Humanos- reconoció ante José Luis Soberanes que ''con los testimonios, evidencias y determinaciones periciales en poder de la comisión nacional se podría acreditar los excesos en el uso de la fuerza cometidos por algunos elementos policiacos''.
Además del mandatario estatal, Peña Nieto, y del ombudsman nacional, Soberanes Fernández, en dicho encuentro estuvieron el primer visitador de la CNDH, Raúl Plascencia; la segunda visitadora, quien lleva la investigación del caso, Susana Thalía Pedroza, y el procurador general de Justicia del estado de México, Abel Villicaña.
La CNDH informó que el gobernador instruyó al procurador estatal a iniciar las averiguaciones previas sobre los casos de siete presuntas violaciones y 16 por abusos sexuales, además del uso excesivo de fuerza.
De acuerdo con el comunicado que emitió la CNDH, el mandatario mexiquense dijo en esa reunión privada que el gobierno que encabeza se compromete a sancionar a quienes resulten responsables de las presuntas violaciones a derechos humanos de los detenidos durante los hechos de Atenco, así como posibles irregularidades durante el traslado al penal de Santiaguito.
Con esta versión queda en entredicho lo que han informado tanto el secretario de Seguridad Pública federal, Eduardo Medina Mora -quien sostuvo que no se habían registrado excesos de fuerza-, y Miguel Angel Yunes, subsecretario de Prevención y Participación Ciudadana de la SSP, quien aseguró en la Cámara de Diputados que ''la policía actuó con apego a la norma''.
El encuentro de Peña Nieto con el presidente de la CNDH se dio horas después de que el ombudsman nacional acudiera a la Secretaría de Gobernación. Cabe recordar que el mando del operativo policiaco que entró a San Salvador Atenco recayó en el gobierno federal.
El trabajo de los visitadores
Luego del encuentro, en el que el mandatario estatal preguntó cómo se había allegado la comisión los testimonios y las imágenes -videos y fotografías-, se le informó que visitadores de ese órgano de defensa de los derechos humanos estuvieron en el poblado de Atenco, en el penal de Santiaguito y en los hospitales donde fueron llevados los detenidos; otros fueron llevados directamente a la CNDH.
Trascendió que Peña Nieto cuestionó el porqué no se tienen los testimonios de los policías agredidos, y en respuesta se le precisó que ''la Comisión Nacional de Derechos Humanos documenta los abusos de las autoridades contra la población, y las agresiones de particulares se deben presentar ante el Ministerio Público''.
También se le explicó que ''existen los señalamientos de agresiones sexuales, pero que no habían sido ratificadas y no se habían hecho las pruebas requeridas''.
El gobernador del estado de México expresó en ese encuentro que su compromiso es atender dicho asunto, por ser de la competencia estatal a raíz de los operativos de los días 3 y 4 de mayo, cuya finalidad, insistió, fue la de ''restablecer el orden y la seguridad pública''.
Por su parte, la CNDH se comprometió a colaborar con la autoridad estatal para el esclarecimiento y terminación de las averiguaciones previas que se inicien, y a seguir al pendiente de las indagatorias ''hasta su resolución final''.