Censura académico a medios de comunicación
Las autoridades de la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH) no podemos suscribir "la petulancia" con que la autoridad policial del estado de México, en especial del director de la Agencia de Seguridad Estatal, Wilfrido Robledo, negó en televisión, "e inclusive se burló" de la posibilidad de que las agresiones y denuncias de violación sexual de detenidos en Atenco fueran ciertas, manifestó Federico Martínez, secretario académico de esa institución.
En conferencia de prensa, informó que los directivos de la ENAH se han solidarizado con los estudiantes para exigir la liberación de sus compañeros detenidos en el penal de Santiaguito, sobre todo de Mariana Selvas, alumna de esta institución, y el cese del hostigamiento gubernamental contra movimientos sociales. Asimismo, condenó el procedimiento por medio del cual fueron expulsados del país los estudiantes chilenos Valentina Palma y Mario Aguirre, acción que refleja "el modo de construir delitos sin el menor recato institucional y jurídico".
El académico manifestó que autoridades, ciudadanos y medios de comunicación deben entender "que los jóvenes están mostrándonos algo que no podemos pasar de lado: sigue habiendo causas dignas y legítimas para que ellos protesten, se enojen y, en algunos casos, pierdan el control y cometan excesos".
Criticó la cobertura que los medios masivos de comunicación han dado al conflicto y a los reclamos estudiantiles, porque "no hay educador más despiadado que los medios, sobre todo los visuales". Exhortó a los periodistas y a las empresas del ramo a "dar cuenta de un sector que puede no ser numeroso, como evidentemente no lo es, pero que es apacible y firme, y que está claro sobre lo que demanda. Ante esos hechos, la autoridad de esta escuela no puede rehusar el apoyo que ellos reclaman y así lo estamos expresando públicamente".
Indicó que los medios de comunicación deben transmitir a su público "cómo en cada época, en cada generación, en este caso estos muchachos, están haciendo específicamente un reclamo de justicia. Los medios tienen que ayudar a que sus espectadores entiendan que ese reclamo es absolutamente legítimo".
Emir Olivares Alonso