Bours Castelo niega víveres a huelguistas; tres meses de la tragedia en Sabinas
Cárdenas Batel indemniza a familias de trabajadores caídos en Sicartsa
Mientras el gobernador de Michoacán, Lázaro Cárdenas Batel, entregó ayer 300 mil pesos a cada una de las familias de los dos trabajadores muertos hace un mes durante el intento de desalojo de la Siderúrgica Lázaro Cárdenas Las Truchas (Sicartsa), el mandatario de Sonora, el priísta Eduardo Bours Castelo, se negó a enviar despensas a los mineros de Nacozari en huelga desde el 23 de marzo, porque advirtió que no volverá "a los viejos esquemas de subsidiar los paros laborales".
Cárdenas Batel entregó indemnizaciones de 300 mil pesos a los familiares de Mario Alberto Castillo Rodríguez, empleado de Sicartsa, y de Héctor Hugo Alvarez, quien laboraba en la empresa Mittal Steel y apoyaba a sus colegas el día del desalojo
y enfrentamiento con la policía. El primero tenía esposa y dos hijos. El segundo era sostén de sus padres y una hermana.
Además del dinero, afirmó, el gobierno del estado busca otros apoyos para los hijos y dependientes de los mineros muertos. Aclaró que este apoyo es independiente de lo que hagan otras instancias.
"Esperamos pronto una salida que parta de la prioridad de reactivar la fuente de empleo y del respeto a las decisiones autónomas de los trabajadores; es decir, a la dirigencia que ellos mismos decidan, tanto en Ciudad Lázaro Cárdenas como a nivel nacional. Es un asunto que exclusivamente compete a ellos, por lo que la autoridad, la empresa y el gobierno tienen que respetar y reconocer", expresó.
Indicó que con la mediación de la Secretaría de Gobernación continúan las conversaciones entre los propietarios de la siderúrgica y el Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos y Similares de la República Mexicana.
Independientemente de que haya un arreglo entre empresa y sindicato, las investigaciones sobre los hechos violentos continuarán para deslindar responsabilidades, aseveró el gobernador perredista.
Bours da la espalda a obreros
A su vez, Bours Castelo se negó a otorgar ayuda a los mil 200 trabajadores en huelga desde hace 55 días, quienes han solicitado despensas a instancias oficiales.
La víspera manifestó que su gobierno no volverá a los viejos esquemas de subsidiar los paros laborales. Nuestra función es ser un "amigable componedor" en el conflicto, expuso. Agregó que las negociaciones con empresa y sindicato van por buen camino para finalizar la huelga.
A su negativa para dar víveres se sumó el Congreso local, que a pesar de haberse comprometido con los mineros durante una reunión que sostuvieron hace casi un mes, no cumplieron con la entrega de alimentos.
La Cruz Roja Mexicana, en cambio, anunció que prepara el envío de mil 200 despensas para las familias de los mineros de La Caridad de Nacozari de García, en huelga desde el 23 de marzo.
Francisco Julián Camacho Alarcón, comandante de la institución en Nacozari, explicó que este apoyo humanitario obedece a una petición expresa de Porfirio Díaz Muñoz, secretario general de la sección 298 del sindicato minero.
Explicó que desde las oficinas centrales la Cruz Roja en la ciudad de México se enviarán por vía aérea las mil 200 despensas, así como pañales y leche para bebé.
En Coahuila, en tanto, este viernes se cumplen tres meses de la tragedia ocurrida en San Juan de Sabinas, donde 65 trabajadores de la carbonera Pasta de Conchos, yacimiento concesionado a Industrial Minera México, perdieron la vida tras una explosión y derrumbes.
Tres meses después, la empresa reiteró que es posible rehabilitar el fondo de la cantera y rescatar los restos de los trabajadores. Mientras, las familias de las víctimas del accidente aún demandan justicia y castigo para los responsables.
"Para nosotros lo más importante es la recuperación de los cuerpos; a nosotros es lo que más nos interesa y desafortunadamente la empresa no lo ha podido resolver", aseguró Maribel Rico, hermana de Gil Rico, uno de los 65 mineros fallecidos la madrugada del 19 de febrero.
Mediante un comunicado, Industrial Minera México informó que ya se han removido 2 mil 560 toneladas de escombro y que en la excavación trabajan de manera permanente más de 150 trabajadores de apoyo y 50 especialistas en rescate. Señaló que las tareas de búsqueda y salvamento han sido lentas ante las elevadas concentraciones de gas metano en el área, lo cual implica riesgo para los socorristas.
Sin embargo, anunció que está por iniciar "una nueva etapa en el programa de búsqueda, que permitirá mantener las condiciones óptimas de seguridad y acelerar el ritmo de avance de las labores".