AL debe trabajar por la integración desde la diversidad, señala el presidente argentino

"Aún estamos en el infierno", admite Kirchner tras casi 3 años de gobierno

STELLA CALLONI CORRESPONSAL

Buenos Aires, 21 de mayo. A escasos días de cumplir tres años de su llegada al poder, el presidente Néstor Kirchner advirtió que el país aún sigue "en el infierno" pero espera que el próximo 10 de diciembre "podamos decir al pueblo que nos acercamos a las puertas del purgatorio".

En entrevista con los matutinos Página 12 y Clarín, el mandatario también definió temas fuertes de política exterior, al señalar que "todo sería mejor" con un Estados Unidos "distinto", y sostuvo que ese país "ni se acordó de la región", y en este caso mencionó que lo que propone son " tratados de libre comercio que en el marco actual son inaceptables".

Asimismo, defendió las decisiones del presidente de Bolivia, Evo Morales, y refiriéndose a su par venezolano, Hugo Chávez, dijo que "trabaja con voluntad para la integración de América" y que "tuvo actitudes muy dignas y solidarias con Argentina en el tema energético" y en las inversiones que realizó en este país.

Con relación a Morales manifestó que "Bolivia tomó una decisión soberana; tendrá que dirimir los intereses con aquellos países que tenían inversiones y se ven afectados, y habrá que adecuarse a nuevos funcionamientos para seguir los procesos integradores".

Sobre si la política de Bolivia significaba la expansión de Chávez en la región, respondió al diario Clarín que Morales es "absolutamente independiente, decide con la responsabilidad que le dio su pueblo. Y viendo las funciones, las conversaciones en que a mí me tocó participar, veo a Chávez con una vocación muy integradora. No lo veo interfiriendo en las relaciones entre los países".

En otra parte descartó que Chávez tenga que ver con las diferencias que surgieron entre Bolivia y Brasil, y recordó que siendo Bolivia el país más pobre en la región después de Haití, el papel que le corresponde al resto es "esperar y ayudar. Desde la diversidad de distintas visiones del mundo que cada uno pueda tener, debemos buscar la complementariedad. ¿O tenemos que pensar todos igual para alcanzar la integración? (...) como pasa en Europa, la integración debe estar más allá de cualquier diferencia política o ideológica".

En otro punto, el mandatario aseguró que es optimista en cuanto a encontrar una salida negociada al conflicto suscitado con Uruguay por la decisión de ese país de construir dos plantas de producción de pasta de celulosa, en la ciudad de Fray Bentos, sobre la costa del Río Uruguay, que es el límite natural entre ambos países.

Argentina solicita el cumplimiento de compromisos bilaterales firmados hace años, que obligan a cualquiera de los dos gobiernos a acordar en caso de construcciones sobre la margen del río común que puedan afectar a unos o a otros y ahora el tema está en la Corte de La Haya.

El gobierno argentino solicita que más allá del informe entregado por las empresas finlandesa Botnia o española Ence, se necesita la opinión final de expertos internacionales independientes y de ambos países, para asegurar la mínima contaminación, como se exige en Europa.

A diferencia del presidente Tabaré Vázquez, que dijo que "no había nada más que hablar", Kirchner planteó que debe encontrarse una solución al conflicto ambiental "que sea progresista, moderna, ambientalista", y se refirió a otros conflictos como "el problema de la salida al mar de Bolivia que implica a Chile y Perú. Hay problemas entre Venezuela y Colombia que hay que ir resolviendo. Hay que trabajar. No nos van a regalar la integración, la tenemos que construir", dijo en una extensa reflexión referida a su gobierno y al país en general.