Tuneros dominó gran parte del juego; cuarta corona de Tuzos, lograda ahora en casa

Pachuca, campeón del Clausura 2006 con polémico tiro penal

MARLENE SANTOS A. ENVIADA

Pachuca, Hgo., 21 de mayo. El juego deslucido y tenso prevaleció en la gran final, pero Armando Archundia marcó una inexistente pena máxima al minuto 76, la cual concretó el uruguayo Richard Núñez, y así el silbante mundialista entregó en bandeja de plata al Pachuca su cuarto trofeo, el correspondiente al Clausura 2006, mientras San Luis se quedó sin el anhelado milagro y con las manos vacías.

Los abrazos, las felicitaciones y el llanto del timonel José Luis Trejo, quien así conquistó su primer cetro como estratega, alegraron el graderío del entusiasta público que en todo momento se entregó a su equipo.

En el primer tiempo el San Luis fue la mejor oncena sobre la cancha. Raúl Arias ubicó bien a sus pupilos a la defensiva, los Tuneros aplicaron una férrea marca a los anfitriones, y poco a poco los visitantes se fueron adueñando del estratégico medio campo, cada vez más amenazantes ante la meta defendida por el colombiano Miguel Calero, quien al minuto 22 quedó doliéndose de la cabeza tras chocar con el enjundioso Israel Jagger Martínez.

Todavía aturdido por la colisión y con un hematoma en la sien izquierda, Calero mostró sus grandes condiciones al desviar un remate de Jesús Mendoza. Chuy peinó el esférico y si el guardameta no se aplica la pelota hubiera entrado por el ángulo superior izquierdo. Ni el grito alentador de "¡Tuzo, Tuzo...!" sacudió al conjunto hidalguense, que estaba sometido ante el vendaval sanluisino.

Para el complemento Arias ingresó a Angel Reyna y sacó a Luis Ignacio González, mientras que un nervioso Trejo puso a calentar a toda su banca. Al minuto 55 el Jagger Martínez remitió un largo disparo que pasó muy cerca de la meta de Calero.

Garra visitante

En el cuadro visitante nada parecía cambiar; San Luis retornó al campo con la misma garra pese al mayor despliegue físico exhibido en la primera parte, y Reyna tuvo una buena opción al minuto 57, pero su disparo resultó muy desviado.

Por fin el Pachuca dio señas de querer ganar después de que Trejo relevó a Rergis e ingresó a Enrique Badillo. Al minuto 62 Luis Landín sembró rivales por el lado derecho, centró para Gabriel Caballero y éste cedió para un poco imaginativo Richard Núñez, quien estampó la pelota en el abdomen del portero Adrián Martínez.

San Luis tuvo otra inyección revitalizante en su ataque con la entrada de Didí en lugar de Marcelo Guerrero, pero el delantero local Landín asestó el primer gran susto al guardameta Martínez al remitir un potente disparo que se estrelló en el larguero, al minuto 70. La acción sacudió al público que coreó el "¡Tuzos, Tuzos!"

Armando Archundia, quien había hecho un trabajo impecable, regaló la pena máxima a Tuzos cuando Andrés Chitiva incursionó en el área chica con balón dominado, sintió atrás la marca de Angel Reyna y se tiró un clavado. El silbante cayó en el embuste y desde los 11 pasos Richard Núñez fusiló a Martínez con potente disparo.

El uruguayo Núñez se ganó la amonestación al festejar quitándose la playera, pero el público por fin se liberó de la tensión en que lo tenía preso el mejor juego de los visitantes. El ensordecedor canto de "¡Oeee, oeee, oeee, Tuzos, Tuzos...!" inundó el coso, la fiesta ya no paró y continuó con el Cielito Lindo.

El timonel visitante echó su última carta a la mesa con el ingreso de Emilio Mora, pero sus delanteros perdieron la calma ante el paso inexorable del cronómetro, inclusive estuvieron a punto de sufrir el segundo tanto en contra cuando Landín en un mano a mano entregó la pelota a Adrián Martínez.

Por último, Caballero arrancó el postrero alarido con un cabezazo picado que se fue por un costado.