Con paciencia y disciplina llegó la coronación, indicó Trejo
Ganar fue lo justo: Jesús Martínez
Pachuca, Hgo., 21 de mayo. Mientras en las tribunas se gritaba el "¡olé, olé, olé, Tuzos, Tuzos!", sobre la cancha y ante un mar de personas los jugadores del ahora campeón Pachuca fueron entrevistados por decenas de representantes de medios de comunicación.
Con mucha serenidad y blandiendo leves sonrisas, Trejo señaló que el campeonato "fue resultado del trabajo implantado en el equipo a lo largo de todo un año". El estratega por primera vez en 16 años de carrera lleva al título a un equipo.
"Desde luego que hubo situaciones muy difíciles que tuvimos que sortear, pero con paciencia y mucha disciplina llegó la coronación. Sí, este triunfo nos sabe a miel. Es, además, muy agradable porque se da aquí en nuestra casa y, repito, después de mucho tiempo de trabajo, vimos coronados nuestros esfuerzos", agregó.
A pregunta expresa sobre a quién dedicaba el título, Trejo contestó, siempre en forma pausada: "a mis hijos, y a mis padres, que están en el cielo".
Jesús Martínez, presidente del club, lloraba de felicidad y señaló que esta cuarta coronación del Pachuca en el torneo mexicano era de los aficionados, de los jugadores, de los integrantes del cuerpo técnico, de los cancheros, jardineros y profesores que imparten cursos en la Universidad de Futbol.
Martínez, además de señalar que fue justa la obtención del título porque fueron superlíderes, precisó que "eso habla de un trabajo serio, amor a la playera y una filosofía importante".
Agregó que están por abrir otra Universidad (de Futbol) en Veracruz.
Cuando fue llamado a recibir el trofeo, dijo "no, que lo reciban los jugadores, ellos lo ganaron", y fue así como dijo al presidente de la Federación Mexicana de Futbol, Alberto de la Torre, que lo entregara al capitán, el arquero Miguel Calero.
Este lo tomó y lo alzó en todo lo alto entre una lluvia de papelillos azules y blancos, para luego dárselo a sus coequiperos, que junto con él y cientos de aficionados lo llevaron frente a la porra Ultra Tuza y luego siguió la tradicional vuelta olímpica.