Conforme se acercan las elecciones han sacado capitales, que ya suman 6 mil mdd
Inversionistas nacionales retiran sus recursos a posiciones seguras
Los foráneos incluso han aumentado la compra de bonos de deuda gubernamental
Los fondos de las Siefore encabezaron la salida de los papeles que representan el débito público interno
Inversionistas nacionales comenzaron a retirar en las últimas semanas sus posiciones en el mercado local de dinero, en el que se negocian bonos de deuda gubernamental, en una actitud que contrasta con la de los extranjeros, que incluso han aumentado su participación en la compra de esos instrumentos.
Según datos oficiales, en lo que va del año, y conforme se acerca la elección presidencial, los inversionistas nacionales han retirado capitales del mercado de dinero por al menos 6 mil millones de dólares, unos 65 mil millones de pesos, en un movimiento que se ha acentuado en las últimas seis semanas.
Los recursos invertidos por las Sociedades de Inversión Especializadas en Fondos de Retiro (Siefores), entidades mexicanas controladas por los grupos financieros, que manejan los fondos de pensión e invierten básicamente en el mercado financiero local, han encabezado el retiro de sus posiciones en papeles representativos de la deuda pública interna.
Datos del Banco de México muestran que después del nivel máximo alcanzado en diciembre pasado, de 35 mil millones de dólares, la inversión de las Siefores en el mercado de dinero disminuyó al cierre de abril a 29 mil millones de dólares, un retiro de 6 mil millones de dólares, equivalente a una reducción de 17.14 por ciento en el periodo.
''Una tendencia similar se puede observar en el mismo periodo con las Sociedades de Inversión, que han disminuido sus posiciones en papeles mexicanos'', comentó Adolfo Albo, director de estudios económicos de BBVA Bancomer, uno de los dos principales grupos financieros que opera en el país.
Las sociedades de inversión son entidades privadas, controladas por inversionistas residentes en México, que invierten en papeles de la deuda pública, obligaciones emitidas por bancos y empresas y acciones en el mercado de valores.
Los recursos retirados por los inversionistas nacionales del mercado de dinero, a decir de especialistas consultados por este diario, han sido llevados a instrumentos de mayor liquidez y menos sujetos a los vaivenes diarios de las tasas de interés en el mercado secundario de deuda, donde se negocian cotidianamente los bonos emitidos por el gobierno federal.
''El contexto internacional es de incertidumbre y a ello se suma la parte local y su vinculación con el proceso electoral'', comentó a este diario Adolfo Albo, director de estudios económicos de BBVA Bancomer, al explicar las cifras que dan cuenta del movimiento de capitales en el mercado local de deuda.
''Lo que pasa es que los inversionistas locales están buscando más liquidez'', expuso; es decir, tener el dinero a la mano para ver qué pasa en las siguientes semanas.
En las últimas semanas, las operaciones en los mercados financieros del mundo han estado marcadas por la incertidumbre generada por la situación económica y fiscal de Estados Unidos, la mayor economía del planeta. Ese país enfrenta un déficit fiscal y en su cuenta corriente que superó ya los 780 mil millones de dólares, una cantidad similar al valor del producto interno bruto de México. Temores de un repunte de la inflación en ese país, así como los elevados precios del petróleo que pueden frenar la expansión de la economía, han estado entre los factores que explican la volatilidad de los mercados financieros, incluidos los de México, donde además se suma la coyuntura electoral, un factor típico de incertidumbre.
El alza en las tasas de interés de referencia en Estados Unidos, que han pasado de uno por ciento en agosto de 2004 a 5 por ciento a la fecha, también representa otro elemento de incertidumbre. Aunque sea sólo por coincidencia, cambios en la política monetaria de Estados Unidos, representados por un alza en sus réditos de referencia, han ocurrido antes de las crisis de México en 1982 y 1994. Mayores tasas de interés en los países desarrollados pueden provocar menores flujos de inversión en los países en desarrollo y por eso la relevancia en el comportamiento de este indicador.
''Lo relevante para México para explicar este movimiento de capitales, esta salida del mercado de dinero de los inversionistas nacionales, es que se percibe un riesgo derivado sobre todo del entorno internacional'', expuso Adolfo Albo.
Las cifras de fuentes oficiales como el Banco de México muestran que en este periodo de incertidumbre y con el proceso electoral mexicano como marco, los inversionistas extranjeros han mostrado mayor confianza en invertir en instrumentos denominados en pesos que los propios nacionales.
El saldo de la inversión extranjera en el mercado de dinero mexicano pasó de 9 mil 700 millones de dólares en diciembre de 2005 a 12 mil 800 millones de dólares al cierre de abril pasado, un incremento de 31.9 por ciento, de acuerdo con la fuente oficial citada.
''Los inversionistas nacionales están viendo como un factor de riesgo el contexto internacional: el alza en las tasas de interés de Estados Unidos, el alza en los precios del petróleo, los temores de inflación en la principal economía del mundo. El otro factor que explica lo que está pasando en México es la parte local y la vinculación al proceso electoral'', añadió Adolfo Albo. ''Es difícil en este momento decir cuál de los dos temas, el externo y el interno, tiene más peso en la decisión de los inversionistas'', agregó.
Según el especialista, lo que los inversionistas mexicanos están haciendo al reducir sus posiciones en el mercado de dinero local es bajar su ''perfil de riesgo'', debido a que tienen menos opciones para diversificar las inversiones. En cambio, añadió, los inversionistas extranjeros, con intereses y estrategias para diferentes partes del mundo, pueden aumentar sus recursos aquí dado que México es sólo uno de los países en los que invierten.
''Tener sus portafolios diversificados reduce el riesgo de los inversionistas internacionales; mientras que los nacionales están básicamente aquí, invirtiendo en instrumentos de renta fija o en la Bolsa, por lo que su universo es más reducido'', explicó.
Añadió: ''Estamos viendo que el tema internacional es el de más riesgo, que es el que domina el ánimo de los inversionistas; y que también el tema doméstico está aquí, pero no se puede justificar todo el movimiento por el proceso electoral''.
Aunque sólo como ejercicio de memoria, en el otoño de 1995 el Fondo Monetario Internacional emitió un reporte sobre la crisis mexicana que estalló con la devaluación del peso en diciembre de 1994. En aquella ocasión, aseguró el Fondo, fueron los empresarios mexicanos quienes primero sacaron sus capitales del país.
Bajaron precios, asegura el Banco de México
En la primera quincena de mayo se registró una variación negativa del Indice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), indicador que mide la inflación, informó el Banco de México.
Durante ese periodo, el promedio de los precios disminuyó 0.49 por ciento, en una variación atípica influida sobre todo por el comportamiento de bienes y servicios administrados por el gobierno, agregó el banco central.
El comportamiento de la inflación en el periodo de referencia, explicó Arturo Vieyra, analista de Banamex Citigroup, obedeció principalmente a la reducción en las tarifas eléctricas en algunas zonas del país por el inicio de la temporada de calor.
En la primera quincena de mayo de 2005, la variación del INPC también había sido negativa, en aquella ocasión de 0.42 por ciento.
El banco central explicó que los genéricos cuyos incrementos de precios destacaron por su incidencia sobre la inflación general en la primera quincena de este mes fueron: jitomate, vivienda propia, papa, pollo en piezas y huevo. En contraste, añadió, los que tuvieron la mayor incidencia negativa fueron: electricidad, gasolina de bajo octanaje, servicios turísticos en paquete, mango y pepino