En la entidad 780 pacientes necesitan un órgano
Sinaloa, primer sitio nacional en trasplantes de riñón: 104
Culiacán, Sin., 24 de mayo. Cuando a Rodolfo Ceniceros Villa y a Víctor Alvarado Alcántar les diagnosticaron insuficiencia renal quedaron frente a una catástrofe, pues además de sus carencias económicas no tenían seguridad social y eso hacía imposible que tuvieran acceso a un trasplante de riñón.
Ante esto, no les quedó más que engrosar la lista de aproximadamente 100 mil personas en el país que se encuentran a la espera de recibir en donación un órgano. Ellos se inscribieron en el Seguro Popular y, con el tiempo, les llegó la buena nueva: fueron elegidos para recibir un riñón, financiados por este programa.
El trasplante se realizó en la Unidad de Hemodiálisis del Hospital General Bernardo Gastélum, de Culiacán, inaugurada el 29 de abril de 2005.
Un paciente puede salvar de 9 a 12 vidas
Para este éxito, sin embargo, ha sido necesario inculcar entre la población la cultura de la donación, lo que ha permitido que Sinaloa se ubique en el primer sitio nacional en trasplantes de riñón de donantes con muerte cerebral: de 2001 a la fecha se han realizado 104 operaciones de este tipo, por arriba de los efectuados en Jalisco y Nuevo León.
El Consejo Pro Cultura de Donación de Organos, una institución de asistencia privada, es la vanguardia en este terreno. Junto con las instituciones de salud, pero sobre todo con directivos y especialistas del Hospital General de Culiacán, han logrado generar una cultura favorable para que la donación sea una realidad.
El consejo ha distribuido alrededor de 40 mil tarjetas de donadores a personas de diferentes edades en la entidad, pero son documentos simbólicos, ya que a la hora del deceso por inactividad cerebral son los familiares quienes finalmente deciden si donan o no los órganos del fallecido.
No obstante, en muchas ocasiones ''hemos logrado que los órganos de las personas que padecen muerte cerebral no queden en los depósitos de las funerarias, sino en el cuerpo de otro ser humano, dándole vida'', manifestó Martha Ceceña, presidenta de este organismo, fundado en 2001 y que se financia con aportaciones de empresarios y diversos organismos.
La funcionaria agregó que existen dos tipos de donadores: los vivos relacionados (familiares) y los cadavéricos, es decir, los que padecen muerte cerebral, que suman apenas alrededor de 3 por ciento del total de decesos que ocurren cada año en la entidad.
"En vida, las personas pueden donar y recibir riñones, segmentos de hígado y médula ósea, y en el caso de los donadores que sufrieron muerte cerebral pueden ser aprovechados órganos como el corazón, el hígado, los riñones, pulmones, córneas, huesos y piel'', explicó.
En Sinaloa hay 780 personas que requieren el trasplante de algún órgano, y para ello en los hospitales públicos de la entidad hay 25 médicos que cuentan con formación especializada para estos casos.
Fuentes de la Secretaría de Salud de Sinaloa informaron que con los órganos de una persona con muerte cerebral pueden salvarse de nueve a 12 vidas, ''lo que confirma que los que están en esta condición irreversible, aun en esas condiciones, pueden dar vida y multiplicarla''.
La muerte cerebral, agregó Ceceña, consiste en la pérdida total e irreversible de las funciones cerebrales. El corazón sigue funcionando de cinco a 20 horas, pero una vez que el fallecimiento es diagnosticado por médicos especializados y se instalan aparatos que garanticen la respiración artificial, el músculo cardiaco sigue operando hasta por cuatro días.
Martha Ceceña agregó que los órganos fuera del cuerpo pueden durar de cuatro a seis horas, y se requiere de personal preparado y equipo especial para transportarlo hasta el lugar en el que se efectuará el trasplante.
Hay cultura de donación, pero...
Martha Ceceña sabe que han avanzado mucho y que ahora puede decirse que hay en Sinaloa una cultura de donación de órganos, ''pero hace falta que los hospitales de la región, del ISSSTE y del IMSS reabran sus programas y los pongan en marcha, porque la lista de espera es larga y angustiante para los pacientes que requieren de órganos, a lo que se agregan los altos costos y el desgaste personal''.
La legislación en la materia, agregó, es clara y permite que el agente del Ministerio Público actúe rápido y eficientemente, ya que están capacitados para enfrentar estos casos.
Dijo que desde la primaria deben impartirse a los niños materias que se refieran a la donación de órganos para que se fortalezca esta cultura desde la niñez sinaloense, lo cual debe ser promovido por la Secretaría de Educación Pública y Cultura de Sinaloa.
Dos nuevos beneficiarios
En el caso de los dos beneficiarios con trasplante de riñón, el secretario de Salud estatal, Ernesto Echeverría Aispuro, dijo que los pacientes con insuficiencia renal enfrentan una situación que se considera catastrófica porque su enfermedad anula su calidad de vida y afecta su entorno familiar, ya que la adversidad no solamente es física, sino económica.