Ofrecen testimonio varias personas afectadas por secuestro
En 14 años, 20 millones de denuncias
Entre 1991 y 2005 fueron denunciados cerca de 20 millones de delitos y el de mayor mención fue el robo, con 7 millones de querellas (3 millones implicaban robos cometidos con violencia), seguido por el de lesiones, con 2 millones de denuncias, mientras que por homicidio fueron 400 mil y por violación 174 mil querellas, según cifras reveladas ayer por el Sistema Nacional de Seguridad Pública, durante el foro Reunión de Víctimas del Delito.
En el acto, presidido por el subprocurador de Derechos Humanos de la Procuraduría General de la República (PGR), Mario Alvarez Ledesma, y el secretario ejecutivo del Consejo Ciudadano para la Justicia, Seguridad Pública y Justicia Penal, José Antonio Ortega Sánchez, participaron diversas víctimas de delitos cuyos casos obtuvieron notoriedad en los medios de comunicación.
Dieron su testimonio, entre otros, la actriz Laura Zapata, secuestrada en 2001; Isabel Miranda de Wallace, quien habló sobre el plagio de su hijo, Hugo Alberto, y Anabel Pagoza, cuyo esposo fue asesinado.
Ortega Sánchez coincidió con Alvarez Ledesma en que el Estado ha incumplido con su labor de prevenir el delito y proporcionar seguridad pública. ''Si el Estado no nos protege, no cumple su razón de ser. Si encima nos cobra impuestos, no es más que una banda de extorsionadores mantenida mediante la violencia.''
Dijo que en los últimos 14 años, según demuestran los índices sobre delincuencia, se ha incrementado de manera preocupante la incidencia delictiva en el país, y en el Distrito Federal, ante la ausencia de prevención.
Explicó que mientras en la administración del presidente Ernesto Zedillo en el Distrito Federal se contabilizaron 11 personas asesinadas por secuestro, durante el actual gobierno foxista se tiene el registro de 62 víctimas de algún tipo de plagio.
En su oportunidad, la actriz Laura Zapata habló de su experiencia de haber permanecido dos meses secuestrada en compañía de su hermana, Ernestina Sodi, en 2001. También hablaron Isabel Miranda de Wallace, Anabel Pagoza y Constantino Salinas. Este último platicó su vivencia a partir del asesinato de su hija Lizbeth Salinas Maciel, hallada muerta en mayo de 2004.
Anabel Pagoza indicó que durante la investigación policiaca que se inició tras el homicidio de su esposo, uno de los mandos policiacos intentó seducirla, mientras otros la extorsionaron.