La corte declara nulas decisiones del Consejo de Ministros y la Comisión Europea
"Ilegal", el traspaso de datos de pasajeros de Europa a EU: Tribunal de Justicia Europeo
Bruselas, 30 de mayo. El Tribunal de Justicia Europeo (TJE) determinó hoy en Luxemburgo que el traspaso de datos de pasajeros europeos a las autoridades estadunidenses es ilegal y declaró así nulas las decisiones correspondientes acordadas por el Consejo de Ministros y la Comisión Europea.
La TJE otorgó plazo hasta el 30 de septiembre para que ambas partes renegocien una nueva base jurídica para el acuerdo.
Según el Tribunal de Justicia, ni la decisión del consejo europeo, que aprueba el acuerdo, ni la de la Comisión Europea, que constata la protección adecuada de esos datos -número de teléfono del pasajero, dirección electrónica, número de tarjeta de crédito- por Estados Unidos, "están fundadas en bases jurídicas apropiadas".
Tras los atentados del 11 de septiembre de 2001, Estados Unidos adoptó una legislación que obliga a las compañías aéreas con vuelos que llegan o salen de su territorio, o que lo sobrevuelan, brindar a las autoridades acceso electrónico a los datos de su sistema de reserva y control de partida, denominado Passenger Name Records.
En ese contexto, y desde marzo de 2003, las compañías aéreas europeas están obligadas a brindar acceso a esos datos para los vuelos con destino a Estados Unidos, ya que en caso contrario pueden ser objeto de multas o controles más rigurosos a sus pasajeros.
Tras largas discusiones con Estados Unidos, la Comisión Europea había constatado finalmente a mediados de 2004 que la protección de esos datos era "adecuada", con lo que convalidó una situación considerada "ilegal" hasta aquel momento.
Este acuerdo fue adoptado más tarde por los cancilleres europeos, en nombre de los 25 miembros del bloque.
Sin embargo, el Parlamento Europeo, molesto por haber sido marginado del procedimiento y a la vez juzgar que las garantías de Estados Unidos eran insuficientes, recurrió al Tribunal de Justicia Europeo para verificar si el acuerdo respetaba las leyes del viejo continente y no violaba los derechos fundamentales.
Sobre esto último, la corte no se pronunció y afirmó simplemente que la Comisión Europea no tenía competencia para pronunciarse sobre la cuestión, ya que el tratamiento de datos recolectados con fines de seguridad pública no es de su competencia.
En Bruselas, un responsable estadunidense afirmó que su país examina el fallo. "Nuestro objetivo es evitar problemas en el tráfico aéreo transatlántico y mantener el alto nivel de seguridad. Esperamos encontrar una solución con la Unión Europea que respete el fallo de la corte", señaló la fuente que pidió el anonimato.