El Fobaproa: cuando desoyó a diputados panistas
En 1998 el grupo parlamentario del PAN se opuso -mediante una iniciativa de ley de protección al ahorro bancario- al Fobaproa, porque las operaciones realizadas en dicho fondo "son contrarias a la Constitución y a las diversas leyes aplicables; porque la forma y términos en que se llevó a cabo el rescate financiero son contrarios a los principios justos y equitativos sobre los cuales descansa un rescate de esta índole; porque muchas de sus operaciones han sido celebradas de manera fraudulenta".
Tal postura era contraria a la del entonces presidente del partido, Felipe Calderón Hinojosa, quien impulsó, junto con Carlos Medina Plascencia, Santiago Creel, Fauzi Hamdan y Diego Fernández de Cevallos, la conversión en deuda pública de 552 mil millones de pesos, que eran los pasivos derivados del rescate bancario.
De los 552 mil millones de pesos, más de 400 mil millones se convirtieron directamente en deuda pública y 150 mil fueron sujetos a un proceso de revisión, como fue definido en el artículo 30 transitorio del Instituto de Protección al Ahorro Bancario (IPAB).
El 12 de diciembre de 1998, cuando se aprobó la Ley del IPAB, aún persistía entre los panistas el rechazo a aceptar como deuda pública el monto de los pasivos del rescate bancario. Inclusive se sugirió, como ya había ocurrido en la iniciativa panista, que las operaciones que dieron lugar a la compra de cartera, "por el origen inconstitucional e ilegal de la misma, se revertirán devolviendo a los bancos que hubieren participado en dichas operaciones la cartera contra la cancelación de los pagarés suscritos por Fobaproa y avalados por el gobierno federal (...) Si como consecuencia de las auditorías fueren detectadas operaciones ilegales, ilícitas o fraudulentas, o contrarias a los sanos usos y prácticas bancarias, los bancos tendrán que cubrir el importe de dichas operaciones mediante la disminución de la garantía que para tal cartera se haya constituido como garante del instituto".
A pesar de tal rechazo, Calderón, en mancuerna con Fauzi Hamdan y con el aval de Carlos Medina Plascencia, impulsó, e instruyó directamente a los diputados de Acción Nacional, para que votaran en favor de la ley que convertía en deuda pública gran parte de los pasivos del rescate bancario.
Roberto Garduño