En Yucatán acusan al familiar del panista de evadir el pago de otros impuestos

Calderón Hinojosa busca deslindarse de su cuñado: "no me toca defenderlo"

Ahora acepta que perredistas entregaron "fotocopias de una presentación power point"

CLAUDIA HERRERA BELTRAN ENVIADA

Cancún, QR., 10 de junio. El candidato presidencial del PAN, Felipe Calderón, negó que el crecimiento de las empresas de su cuñado Diego Zavala se compare con los negocios de la familia Bribiesca Sahagún, y advirtió que a pesar del escándalo va "muy arriba" en las encuestas.

En su gira por Cancún y Campeche trató de deslindarse de su cuñado, al decir que no le toca "defenderlo ni tampoco condenarlo", pero después, en apoyo de Zavala, señaló que nueve de cada 10 ventas de Hildebrando SA de CV-de la que su cuñado es socio- son a empresas nacionales e internacionales, y no del gobierno como acusan.

Desde temprano intentó finiquitar la discusión sobre el tema del presunto tráfico de influencias en favor de su cuñado. En tono jocoso, en Campeche comentó: "ya pueden recoger a su gallo desplumado. A ver si es bueno para un caldo". Pero en todos sus mítines volvió al asunto de manera recurrente.

A lo largo del día descalificó en distintos tonos a los perredistas. A Jesús Ortega, Gerardo Fernández y Claudia Sheinbaum los llamó "tercia de payasos", pidió que se cambien las boletas electorales para que Andrés Manuel López Obrador se llame "López Hablador" y lo calificó de "boxeador mañoso".

Realizó una gira por bastiones priístas. En Cancún se encontró con una plaza de toros medio vacía, pero en Campeche -la tierra de su coordinador de campaña, Juan Camilo Mouriño- los panistas demostraron su fuerza con una nutrida concentración en la Plaza de la República.

Calderón y López Obrador casi se pisaron los talones. En Mérida, donde un día antes tuvo una concentración, se hospedaron en hoteles contiguos, lo que generó expectación, pero sus equipos hicieron todo lo posible para que no se vieran las caras. En Campeche, el perredista tuvo actividades por la mañana y el panista en la noche.

El caso Hildebrando lo persiguió a la ciudad de Mérida. El Diario de Yucatán publicó una carta firmada por José Cárdenas, de Jalisco, en la que acusa al cuñado del panista "de evasor del impuesto sobre productos del trabajo, ya que a sus empleados los tiene como cooperativistas.

"Trabajé con esas personas, quienes a la hora que quisieron corrieron a todos sus empleados sin darles ningún cinco, ya que alegaron que éramos socios".

Por cuarto día, el candidato blanquiazul dio nuevas explicaciones sobre el escándalo del llamado cuñado incómodo, en el contexto de la gira que inició el jueves pasado y concluirá este domingo en el estado de México.

A su llegada a Cancún, declaró a la prensa que no se pueden corroborar las afirmaciones por demás "calumniosas" y que generan daño moral del candidato del PRD a la Presidencia de la República, Andrés Manuel López Obrador, y por ello, dijo, se dejó a un juez que se encargue de castigarlas.

Cuando se le preguntó si consideraba a Zavala como un empresario modelo, por quien metería las manos al fuego, señaló que tiene opinión de él porque lo conoce, pero que él ya ha dado amplias explicaciones a la opinión pública y ha recurrido a los tribunales para aclarar todo.

Al insistirle si era moral el enriquecimiento inexplicable de su cuñado, expresó que no le toca hacer un juicio personal sobre familiares suyos, pero que respeta mucho a los empresarios e inversionistas que trabajan, generan y pagan impuestos, y hacen su labor para sacar adelante a su compañía y a México.

En una entrevista publicada también por el Diario de Yucatán, explicó que Hildebrando es otro caso de éxito de una empresa mexicana.

No eran cajas vacías, pero tampoco tenían pruebas

En la plaza de toros de la avenida Kukulkán, los panistas tuvieron que echar mano de figuras de la farándula. Paty Sirvent, del grupo musical Jeans, y el matador José de Jesús, El Gleason, dieron su respaldo al panista y fungieron como teloneros del show político.

Un día después de haber dicho que el PRD había entregado en su casa de campaña cajas vacías y no las pruebas en contra de su cuñado, cambió la versión y dijo que en realidad sí contenían "fotocopias de una presentación de power point".

Bromeó con el asunto y como si fuera el personaje cómico el Chapulín colorado" señaló que los perredistas no contaban con la astucia de los panistas, y que por eso llevaron un notario público, el cual certificó que el PRD mintió.

Sostuvo que en vez de acusarlo los perredistas deberían explicar dónde están los dólares que dio el empresario argentino Carlos Ahumada a René Bejarano y Carlos Imaz, esposo de Claudia Sheinbaum -quien entregó las pruebas en su contra-, porque a lo mejor los tienen "abajo del colchón" o en la campaña de López Obrador.

Respecto de las encuestas aseguró que le siguen dando ventaja, porque los señalamientos de López Obrador son un "golpe bajo, mentiroso, del candidato del PRD, que se le está revirtiendo".

Y se mostró confiado en que la polémica terminará pronto. "El lodo que se avienta es como el barro, nada más hay que esperar a que se seque para que se quite".