Posible evasión fiscal por 256 millones de pesos
PRI y PRD piden crear una comisión para el cuñadogate
Las diputaciones de PRI y PRD pugnarán porque, de la sesión de la Comisión Permanente, surja el acuerdo para constituir una comisión especial que investigue el presunto tráfico de influencias del candidato presidencial del PAN, Felipe Calderón, para favorecer a su cuñado Diego Hildebrando Zavala Gómez del Campo, quien -de acuerdo con un estudio del perredista Alfonso Ramírez Cuéllar- habría evadido el pago de 256 millones de pesos de impuestos.
Luego de que el secretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz, afirmó que la información fiscal de Hildebrando fue filtrada por el Gobierno del Distrito Federal, Ramírez Cuéllar anunció que, en el debate para constituir la comisión especial, presentará un punto de acuerdo para que el Servicio de Administración Tributaria (SAT) entregue un informe oficial sobre el cumplimiento de las obligaciones tributarias de las empresas relacionadas con Diego Hildebrando Zavala.
Los diputados Inti Muñoz y Heliodoro Díaz anticiparon que sus respectivos grupos parlamentarios propondrán que se apruebe una comisión que investigue las probables irregularidades en la asignación de contratos millonarios a Hildebrando, así como la posible manipulación del padrón electoral que se utilizará en las elecciones del próximo 2 de julio, y el uso partidista de los padrones de beneficiarios de los programas de la Secretaría de Desarrollo Social.
Muñoz señaló que la información en poder del PRD "muestra la existencia de un mecanismo para el desvío de recursos públicos a la campaña presidencial del PAN", así como la intención de favorecer al cuñado de Calderón Hinojosa "con pingües contratos", que deben ser investigados por la Secretaría de la Función Pública.
Por su parte, Ramírez Cuéllar presentó un estudio realizado por expertos fiscales de la Coordinación de Finanzas Públicas de la diputación perredista, que él dirige, para "evaluar el impacto que tiene para el fisco el tipo de operaciones que de manera ventajosa realizan empresas como Hildebrando, SA de CV y 14 firmas satélites, de la cual es accionista o por lo menos comisario Diego Hildebrando Zavala".
Los fiscalistas realizaron un ejercicio, a partir de una tasa de utilidad muy baja, de apenas 20 por ciento sobre ingresos, que se puede calificar de estimación prudente, considerando que en su página de Internet, Hildebrando señaló que se ubicó entre las más rentables de "las 500 empresas más importantes de México", de la revista Expansión.
Inclusive, agregó, esa tasa es muy baja porque en las declaraciones que se conocen de Hildebrando, de los ejercicios 2002 y 2003, se reconoce una tasa de utilidad mayor. Con esa tasa sobre ingresos, que "es considerado un parámetro adecuado para calcular utilidades, con el concepto de utilidad fiscal presuntiva", el PRD concluyó que en 2002 el consorcio habría tenido utilidades por 71.4 millones de pesos, lo que con una tasa de ISR de 35 por ciento, vigente en ese entonces, habría significado impuestos por poco más de 25 millones de pesos.
En 2003, el rendimiento habría superado los 168 millones de pesos que, con una tasa de ISR de 34 por ciento, habrían significado ingresos fiscales por más de 57 millones. Al siguiente año, con ingresos declarados de mil 306 millones de pesos, la utilidad presuntiva habría sido de 261 millones y los impuestos correspondientes, a una tasa de 33 por ciento de ISR, sumarían 86 millones de pesos. Para 2005, con ingresos de mil 459 millones de pesos, se tendría una utilidad estimada de 291 millones, lo que debe reflejarse, con una tasa de ISR de 30 por ciento, en impuestos por 87 millones de pesos.
El documento señala que esas estrategias favorecen la elusión y no son investigadas o explicadas por la Secretaría de Hacienda, e impiden el aumento de la recaudación para fortalecer las finanzas públicas del país.