Exhubera, el polvo de rápida acción que podrán utilizar los enfermos tipo 1 y 2
Lanzarán insulina inhalable que controla diabetes durante 2 años
En fase de experimentación otra droga que ayuda a reducir la ceguera ocasionada por ese padecimiento, informa compañía en encuentro de la Asociación Estadunidense sobre ese mal
Washington, Los Angeles, Nueva York, 12 de junio. El laboratorio Pfizer Incorporation informó en un encuentro de la Asociación Estadunidense de Diabetes que nuevos datos de ensayos clínicos demostraron que su versión inhalable de insulina, recientemente aprobada por los reguladores de salud estadunidenses, controla de manera segura el azúcar en la sangre durante dos años.
El mayor fabricante de medicamentos del mundo espera lanzar Exhubera el mes que viene en Estados Unidos, después de recibir en enero la aprobación de la Administración de Alimentos y Fármacos (FDA, por su siglas en inglés) para comercializar el producto en adultos que padecen diabetes tipo 1 y 2.
Los analistas de la industria farmacéutica prevén que las ventas alcanzarán los mil millones de dólares anuales, ya que millones de estadunidenses que ahora dependen de la insulina inyectable remplazarán al menos algunas inyecciones por la forma en polvo de rápida acción.
Pfizer dijo que dos ensayos en marcha mostraron que los pacientes que utilizaban Exubera experimentaron un control sostenido del azúcar en sangre durante un periodo de dos años y que aumentaron la mitad del peso que aquellos tratados con insulina inyectable.
"Existe una cantidad de barreras físicas para la insulina inyectable. Exubera es una buena herramienta para facilitar el inicio del tratamiento insulínico", consideró el doctor Julio Rosenstock, investigador y director del Centro de Diabetes y Endrocrinología Dallas.
Medicamento experimental
Por otro lado, un medicamento experimental de Eli Lilly andCompany mostró esperanzas en lo que respecta a la reducción de la pérdida de visión causada por los efectos de la diabetes en la retina, según datos combinados de un par de ensayos clínicos en etapa final.
La droga, denominada ruboxistaurina y que sería comercializada con el nombre de Arxxant si es aprobada, redujo el riesgo de pérdida de visión moderada en 41 por ciento frente al placebo, dijeron investigadores.
"Este es un enfoque completamente nuevo que puede ayudar a desacelerar la pérdida de visión", dijo durante una entrevista el doctor Paul Aiello, director del estudio.
Varios estudios demostraron que los doctores están siendo reacios a recetar dosis más altas de medicamentos o sumar nuevas drogas a los tratamientos de sus pacientes con diabetes tipo 2, cuando sus niveles de glucosa en sangre o presión alta superan los parámetros considerados normales, señalan expertos durante un encuentro de la Asociación Estadunidense de Diabetes.
"Los médicos no fueron habitualmente entrenados para continuar intensificando" las terapias, dijo Alexander Turchin, endocrinólogo del Brigham and Women's Hospital y de la Escuela de Medicina Harvard en Boston.
"Quizás subestimen el riesgo que la hipertensión implica para los diabéticos", agregó.
La mayoría de los enfermos padece diabetes tipo 2, provocada por una combinación de factores genéticos y estilo de vida, muy relacionada con la obesidad y la falta de ejercicio.
Deben cuidarse presión arterial y colesterol
Los pacientes diabéticos tienen un riesgo mucho mayor de sufrir enfermedades cardiacas o renales, ceguera y pérdida de miembros, y no sólo deben controlar su nivel de azúcar, sino también cuidar su presión arterial y mantener el colesterol bajo.
Si bien la dieta y el ejercicio pueden ayudar a controlar estos factores, muchos pacientes necesitan también medicamentos.
Investigaciones presentadas durante la reunión mostraron que los médicos en Estados Unidos, Alemania y Gran Bretaña no elevan las dosis de los medicamentoes cuando es necesario.
El equipo de Turchin revisó los registros de mil 244 personas con diabetes y alta presión arterial que habían sido tratadas por 166 médicos entre 2000 y 2004.
La medicación sólo había sido intensificada en 26 por ciento de los casos, en los cuales los pacientes tenían presión demasiado alta.
La doctora Shari Bolen y sus colaboradores de la Johns Hopkins University, en Baltimore, estudiaron los registros de 254 empleados gubernamentales y miembros de sus familias con diabetes tipo 2 y presión elevada, los cuales pertenecían a un programa de cuidados dirigido.
Los médicos mejoraron las dosis de drogas sólo en 12 por ciento de los pacientes, en los que la presión arterial estaba claramente por encima de los límites.
En tanto, el equipo del doctor Stephen Gough, de la Universidad de Birmingham en Gran Bretaña, analizó datos de mil 600 médicos de su país y de Alemania y halló que los niveles de azúcar en la sangre de los pacientes estaban escasamente controlados.