"Amenazaban la seguridad pública en cientos de vecindarios y comunidades"
Detienen en Estados Unidos a 2 mil 179 indocumentados "criminales"
Washington, 14 de junio. Las autoridades estadunidenses arrestaron en las dos semanas y media recientes a 2 mil 179 extranjeros por ser indocumentados, fugitivos, miembros de pandillas o criminales buscados, en un operativo llamado Devolución al Origen, informó hoy el gobierno.
Las 2 mil 179 personas, entre ellas muchos indocumentados que no habían violado otra ley que la migratoria, están ahora aguardando su deportación.
"La operación Devolución al Origen es otro ejemplo de una nueva y dura estrategia de aplicación de las leyes, que busca encontrar y deportar a todos los extranjeros criminales, aumentar la aplicación de las leyes en los lugares de trabajo (para detectar indocumentados) y atacar con dureza la infraestructura criminal que perpetua la inmigración ilegal", señaló el secretario de Seguridad Interior, Michael Chertoff.
"Los fugitivos que fueron capturados en esta operación amenazaban la seguridad pública en cientos de vecindarios y comunidades en todo el país. Este departamento no tiene tolerancia ante su comportamiento criminal, y estamos usando toda la autoridad de la que disponemos para concentrar la atención en operativos contra fugitivos y liberar a las comunidades de este crimen", agregó Chertoff.
Entre los 2 mil 179 detenidos bajo este operativo, aproximadamente la mitad tienen historiales criminales que van desde ataque sexual a menores hasta secuestro y asalto con arma mortal. Por ejemplo, 145 de los arrestados fueron sentenciados por delitos sexuales, cuyas víctimas fueron menores de edad.
Además, 367 extranjeros fueron arrestados por ser miembros o estar asociados a pandillas callejeras como la Mara Salvatrucha (MS-13). Uno de ellos es Samuel Gil Martínez, un miembro de MS-13 que había sido sentenciado antes a la cárcel en Boston por asalto y golpes: una vez usó un bat de beisbol y otra vez atacó a una persona en una parada de autobús con una pesada herramienta de metal.
Otros 640 eran indocumentados que habían sido citados por la justicia para presentarse ante una corte de inmigración para ser deportados, y decidieron no acudir a la cita, con lo cual se habían transformado en fugitivos.
El comienzo
El operativo empezó el 26 de mayo y terminó este martes, informó la secretaria asistente para Control de Inmigración y Aduanas, Julie Myers.
"La bienvenida de Estados Unidos no se extiende a inmigrantes que vienen aquí a cometer crímenes. No dejaremos ningún rincón sin revisar en la tarea de perseguir y deportar a los extranjeros que victimizan a nuestras comunidades", indicó Myers.
La mayoría de los arrestados fueron acusados de violar las leyes de inmigración y están ahora en el proceso de deportación. Una porción de los arrestados, 829 personas, ya habían sido repatriadas antes.
Los arrestados en esta operación vinieron de decenas de países, incluidos Angola, Bangladesh, Brasil, Cabo Verde, China, Colombia, República Dominicana, Ecuador, El Salvador, Egipto, Gambia, Georgia, Ghana, Guatemala, Honduras, Indonesia, Irak, Italia, Costa de Marfil, Jamaica, Kenia, Liberia, Libia, México, Nicaragua, Nigeria, Pakistán, Perú, Polonia, Portugal, Senegal, Tailandia, Uganda, Reino Unido y Uzbekistán.
Algunos de los arrestados con amplios historiales criminales son mexicanos, como José García Ríos, Wilber Kuk y Angel Lira Alvarez. García fue sentenciado por robo agravado, narcotráfico y amenazas terroristas; Kuk fue sentenciado por secuestro, robo, uso de arma de fuego y heridas graves, y Lira Alvarez es miembro de una pandilla de Texas y fue sentenciado por robo y tráfico de drogas.