Aprueban por unanimidad pronunciamiento en la tercera sesión del Cabildo
Confía el GDF en imparcialidad y certeza de órganos electorales
Encinas y los 16 delegados se comprometen a actuar con transparencia durante los comicios
Ampliar la imagen Aspecto de la tercera sesión ordinaria del Consejo de Apoyo y Base Interinstitucional a las Delegaciones del Distrito Federal (Cabildo-DF), a la cual acudieron Alejandro Encinas, jefe de Gobierno, parte del gabinete y los 16 titulares de las demarcaciones Foto: María Luisa Severiano
El jefe de Gobierno del Distrito Federal, Alejandro Encinas Rodríguez, y los titulares de las 16 delegaciones políticas, hicieron ayer un pronunciamiento para expresar su confianza en la imparcialidad, objetividad e independencia de los organismos electorales federales y locales: asumir el compromiso de actuar con transparencia y vigilar que no se desvíen recursos públicos en beneficio de partidos o candidatos durante la jornada electoral y llamar a los partidos para que "una vez concluidas las campañas electorales, en una muestra de justo equilibrio entre el derecho ejercido y el deber por cumplir, retiren su propaganda dentro del término que establece la legislación electoral".
En la tercera sesión ordinaria del Consejo de Apoyo y Base Interinstitucional a las Delegaciones del Distrito Federal, Cabildo-DF, que ayer se realizó por primera vez fuera del Salón de Cabildos del Antiguo Palacio del Ayuntamiento, en el Zócalo, y se trasladó al Salón de Cabildos de la delegación Tlalpan, los titulares y representantes de las 16 delegaciones políticas y el GDF aprobaron por unanimidad un punto de acuerdo con el citado pronunciamiento sobre la jornada electoral del 2 de julio.
Respeto absoluto
De entrada expresan su confianza en que la jornada electoral transcurrirá con total normalidad en la ciudad de México y será un proceso altamente participativo en el que los ciudadanos acudirán libremente a emitir su voto.
Al asumir el compromiso de prestar el auxilio que les sea requerido por el Instituto Federal Electoral (IFE) y el Instituto Electoral del Distrito Federal (IEDF), previo y durante la elección, manifestaron su absoluto respeto a ambos órganos electorales: "tenemos la plena seguridad de que habrán de conducirse con todo el profesionalismo, imparcialidad, objetividad, certeza, legalidad e independencia que su papel de árbitro les exige", e hicieron también un reconocimiento a los ciudadanos que participaran durante la jornada electoral como funcionarios de casilla.
"Nos comprometemos -sigue el pronunciamiento- a mantener una actuación transparente y exhortamos a todos los servidores públicos del Gobierno del Distrito Federal y de los gobierno delegacionales a que hagan lo mismo. Permaneceremos vigilantes de que se cumplan cabalmente lo dispuesto por la Jefatura de Gobierno para evitar el desvío o uso inadecuado de vehículos oficiales, teléfonos y todos los recursos públicos que estén bajo resguardo de la autoridad".
El jefe delegacional de Iztacalco, Armando Quintero Martínez, propuso que el acuerdo se envíe también a los partidos políticos, dado que en éste se les hace un llamado para que retiren su propaganda electoral, "tomando en cuenta que el patrimonio arquitectónico de la ciudad es un signo de identidad y que el cuidado y protección de los espacios públicos, monumentos, mobiliario e infraestructura urbanos, constituyen una responsabilidad cívica".
No obstante, tanto el gobierno central como las delegaciones expresaron su disposición de llevar a cabo los trabajos necesarios para el retiro de la propaganda en cuanto lo requiera la autoridad electoral.
En este contexto, el GDF y las delegaciones aprobaron también por unanimidad colaborar con las secretarías de Finanzas y de Desarrollo Económico de la misma administración capitalina, en un proyecto encabezado por el Banco Mundial para hacer un diagnóstico sobre el ambiente de negocios en la ciudad de México, en cuatro aspectos: apertura de negocios; licencias de construcción; registro de propiedad y cumplimiento de contratos.
Esto, con el propósito de generar las condiciones que posicionen al Distrito Federal entre las ciudades más competitivas, no sólo del país, sino a escala mundial, "lo cual deberá traducirse en una mayor inversión y en la generación de más y mejores empleos".