Burócratas, indígenas y clase alta participaron en la marcha en favor de Ulises Ruiz
¡Avanzando borregos!, gritaron a los asistentes al mitin en Oaxaca
Anuncia líder magisterial que se formará una comisión de intermediación; participarían el arzobispo Chávez Botello, el pintor Francisco Toledo y el obispo emérito Samuel Ruiz
Ampliar la imagen Un autobús quemado, varios vehículos particulares dañados y 40 heridos fue el resultado del enfrentamiento la madrugada de ayer entre profesores acompañados de militantes del PRD y simpatizantes del PRI, quienes en caravana de unos 150 autobuses se dirigían a la capital del estado para participar en la marcha en apoyo al gobernador de Oaxaca, Ulises Ruiz. Profesores e integrantes de organizaciones sociales bloquearon carreteras para evitar que empleados de gobierno, de comercios y empresas que están en desacuerdo con el paro de labores del magisterio, llegaran a la manifestación. El autobús fue quemado por quienes bloqueaban la carretera. Jorge Aguilar y Oscar López, empleados del ayuntamiento de Juchitán, fueron retenidos por los docentes, por lo que confesaron que viajaban en el autobús por instrucciones de los regidores priístas Florentino López y Jaime Guillermo Avila Peña Foto: Hiram Moreno
Oaxaca, Oax., 22 de junio. Miles de burócratas -a quienes se amagó con descontarles un día de salario- campesinos e indígenas traídos desde sus comunidades, la clase alta del estado y policías vestidos de civil participaron este jueves, cuando se cumplió un mes del paro magisterial, en la denominada "marcha de la legalidad" que tenía como objetivo respaldar al gobernador Ulises Ruiz -quien supervisó el recorrido desde un helicóptero- y exigir a los profesores de la sección 22 regresar a clases y desalojar el Centro Histórico de la ciudad.
Como respuesta a esta movilización, que convocó según datos oficiales a unas 45 mil personas, aunque por la noche la Coparmex afirmó que asistieron 200 mil, el líder seccional del magisterio, Enrique Rueda Pacheco, anunció que se iniciaron contactos con el arzobispo de Antequera Oaxaca, José Luis Chávez Botello, el pintor Francisco Toledo, y el obispo emérito Samuel Ruiz García, para invitarlos a formar parte de una comisión de intermediación, que conduzca a una salida negociada. Dijo que los tres personajes habían aceptado, en principio.
Rueda condicionó, asimismo, la convocatoria del secretario de Gobernación, Carlos Abascal Carranza, a una tregua del movimiento para permitir el desarrollo de las elecciones, a que antes del 2 de julio se les ofrezca una solución a sus demandas, pero mientras ello ocurre confirmó la realización del paro estatal de labores convocado para este viernes.
El carácter oficial de la marcha, que había sido negado durante días por la administración estatal, se corroboró cuando reporteros y fotógrafos observaron y captaron que, desde un helicóptero de la policía, el gobernador y su secretario de Gobierno, Jorge Franco Vargas, vigilaban el recorrido.
Los funcionarios de más alto nivel en el estado sobrevolaron las calles de Oaxaca en la nave Scala 407, matrícula XA UCJ, la misma que la Policía Ministerial utilizó el miércoles 14 para disparar bombas de gas lacrimógeno a los maestros en plantón, en el fallido desalojo del primer cuadro.
Otro helicóptero de las mismas características, y al que se le cubrió la matrícula, fue facilitado a Tv Azteca para que la empresa de Ricardo Salinas Pliego obtuviera imágenes desde el aire.
La movilización, que buscó equilibrar la demostración de fuerza expresada por el magisterio en sus tres marchas realizadas en las semanas recientes, contó todo el tiempo con la participación de integrantes de la administración del estado, e inclusive la coordinación operativa estuvo a cargo del director general de Seguridad Pública, José Manuel Vera Salinas, y el coordinador de Seguridad Pública y Tránsito Municipal de Oaxaca de Juárez, Aristeo López Martínez.
Pese a todos los pronósticos, la caminata que comenzó en el Monumento a Juárez, ubicado en la salida al istmo, y que culminó en El Llano, no derivó en incidentes ni confrontación con los maestros en paro, excepto el intercambio de consignas entre burócratas y comerciantes del mercado Las Flores, que dejaron sus puestos para salir a cuestionar el acarreo. "¡Orale, órale, a desquitar la playera! ¡Avanzando, borregos!", gritaba un comerciante desde la acera, en una ácida crítica a las miles de camisetas blancas que, con la leyenda, "sí a la educación, no al plantón" se repartieron como distintivo.
Como habían previsto, los maestros de la sección 22 aplicaron una serie de acciones para ahogar la marcha, como la toma de 14 tramos carreteros, 25 alcaldías y la detención de autobuses de las líneas Autobuses Unidos, Fletes y Pasajes, Cristóbal Colón y Sur, rentados para el traslado de indígenas, inclusive de Puebla y Veracruz, hacia la capital del estado.
En conferencia de prensa, el líder magisterial oaxaqueño refirió que ante la actuación de profesores en San Gabriel Mixtepec, el presidente municipal de Nopala, Fredy Gil Pineda Gopar, "disparó contra los compañeros, quienes como pudieron repelieron la agresión".
Refirió que en Pochutla, mientras se realizaban los bloqueos "resultó herido el compañero Manuel (no ofreció su apellido), intendente de la escuela primaria Morelos del lugar, el cual es atendido en el hospital".
Los profesores también cercaron el primer cuadro con camiones, ante el riesgo de un enfrentamiento, pero nada ocurrió. En las puertas del local sindical, desde el que ha vuelto a operar la estación Radio Plantón, Enrique Rueda anunció que en la búsqueda del diálogo y la solución política de las demandas magisteriales, y ante la imposibilidad de la Secretaría de Gobernación para negociar, se decidió convocar a la creación de una comisión de intermediación.
Esta, dijo, ayudaría a destrabar el conflicto y darle cauce por la vía de la negociación política, mediante contactos, intercambios, diálogos y espacios de encuentro con la Federación.
Rueda Pacheco denunció también que en la marcha participaron decenas de funcionarios del gobierno de Ruiz Ortiz.
Y es que durante la caminata, de casi nueve kilómetros, se vio al senador priísta Jorge Franco Jiménez, padre del secretario de Gobierno, y a los diputados federales del PRI, Javier Villacaña Jiménez y Elpidio Concha Arellano, dirigentes locales de la CNOP y la CNC, respectivamente, así como el legislador local Nahum Carreño Mendoza.
También participaron los secretarios de Economía, de Obras Públicas y de Desarrollo Rural, Jorge Tamayo López Portillo, Eviel Pérez Magaña y Carlos Torres Avilés, respectivamente; los coordinadores general de Asesores de la gubernatura, Raúl Castellanos Hernández; de giras del gobernador, Manuel Sánchez León, y de Delegaciones de Gobierno, Alejandro Avilés Alvarez, así como los directores del Monte de Piedad, José Germán Espinoza Santibáñez, del Instituto de Atención al Migrante, René Ruiz Quiroz -tío del gobernador-, y del Consejo Estatal del Café, Fortino Figueroa Montes.
Además, a los directores de Tránsito, José Guzmán Santos; del Instituto de Desarrollo Municipal, Mario Alberto Guzmán Castrezana; del Patronato de Servicios Culturales y Turísticos, Emanuel Toledo Medina, y de la Academia de Policía, Francisco Ahuyama.
Inclusive, caminaron los regidores del ayuntamiento local, Tomás González Ilescas y Manuel de Esesarte Pesqueira, también candidato suplente a diputado federal de la Alianza por México, así como varios presidentes municipales.
Por su parte, el vicepresidente de la Comisión Ejecutiva de la Unión Nacional de Trabajadores (UNT), José Luis Hernández Andrade, anunció que buscará un encuentro con Abascal Carranza, para referirse a la ingobernabilidad en el estado y la necesidad de restituirla, dijo, con la salida de Ruiz Ortiz de la gubernatura, porque "ya no constituye un elemento de cohesión social".
Gobernación, añadió, "no debe permitir que el conflicto se encone más. Tiene que actuar. Hay una situación de ingobernabilidad en el estado, una ingobernabilidad provocada por la actuación del gobernador. Me parece, y quiero decirlo con toda responsabilidad en nombre de la UNT, que es muy perverso enfrentar a la sociedad civil oaxaqueña. Esta es una actitud que sólo puede caber cuando hay ausencia de ética y de principios políticos", enfatizó.