El magnate australiano le pagó 10 mil euros al mes
Durante su mandato Aznar trabajó para Rupert Murdoch
Madrid, 28 de junio. El ex presidente del gobierno español José María Aznar ocultó durante más de un año y medio que trabajaba para el magnate australiano de la comunicación Rupert Murdoch, quien por medio de su empresa News Corporation le pagaba cada mes 10 mil euros mensuales por servicios de asesoría y consultoría.
El gobernante Partido Socialista Obrero Español (PSOE), la coalición pro comunista Izquierda Unida (IU) y nacionalistas gallegos reclamaron una explicación al político más emblemático de la derecha española, al considerar que pudo haber incurrido en "una grave incompatibilidad" mientras integraba el Consejo de Estado.
El propio ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, indicó que el gobierno preguntará a Aznar si efectivamente cobró un sueldo por asesoría a Murdoch y no lo notificó, como establece la ley de incompatibilidades. Añadió que en el registro de altos cargos no consta la constitución de la empresa del ex gobernante.
Aznar abandonó el cargo de presidente del gobierno español en abril del 2004, tras sufrir una severa derrota electoral en los comicios de marzo de ese mismo año, marcados por los brutales atentados de terroristas islamitas en Madrid y luego de haber atribuido equivocadamente la responsabilidad a ETA.
Para formalizar su relación profesional con Murdoch, Aznar creó en 2004 una empresa que denominó Famaztella (la abreviación de familia Aznar-Botella, éste último el apellido de su esposa, Ana Botella), a través de la cual cobró 120 mil euros anuales de la empresa de Murdoch, que la semana pasada lo designó integrante del consejo de administración de News Corporation.
Aznar se limitó a señalar que "siempre ha cumplido de manera escrupulosa sus obligaciones" y "jamás ha realizado negocios privados" relacionados con sus actividades públicas. Sostuvo que su relación con el emporio de Murdoch se limitó a "colaboraciones ocasionales" y sin que hubiera relación de empleo o servicios.
En tanto, en horas recientes parecía que el proceso de pacificación del País Vasco pendía de un hilo después de que el juez de la Audiencia Nacional de España, Fernando Grande-Marlaska, entró de nuevo en escena con una serie de instrucciones judiciales que pretenden procesar y hacer testificar a destacados dirigentes del gobernante Partido Nacionalista Vasco.