En México, alrededor de 70 por ciento de la población padece este problema
La obesidad sólo puede reducirse con alimentos naturales y ejercicio: experta
Los productos procesados son más caros y no hay garantía de su contenido, señala
La reducción del sobrepeso y la obesidad, que en México afecta a 70 por ciento de la población mayor de 20 años, será posible mediante acciones integrales, y particularmente con la promoción del consumo de alimentos naturales, porque los procesados, "aunque les quiten 30 por ciento de grasa" son más caros y no existe garantía sobre su contenido, debido a que las etiquetas son engañosas, advirtió Patricia Miranda, internista en el Hospital de Especialidades del Centro Médico Nacional Siglo XXI del IMSS.
Comer bien, indicó, significa ingerir preferentemente verduras, frutas, carnes sin grasa, leguminosas, "olvidarnos de los pastelitos y pensar que los refrescos no existen, ni siquiera los light".
Reconoció que las empresas de la industria de alimentos hacen esfuerzos por modificar el procesamiento de sus productos; sin embargo que resultan más onerosos. Es mejor comprar un kilo de tortillas que adquirir unas galletas sofisticadas y caras. Actualmente, resaltó, existe una "epidemia de los cereales, existen varias marcas, pero habría que preguntarse por qué ahora tenemos que comprarlos si antes no nos alimentábamos así".
Resaltó que en Estados Unidos, donde también se reportan índices elevados de exceso de peso corporal, alta incidencia de enfermedades crónicas, como diabetes, hipertensión arterial e hipercolesterolemia, ya ha empezado a descender la curva de mortalidad por estas causas.
Lo han logrado, dijo, con base en educación, promoción del ejercicio físico y de medicamentos, inclusive para prevenir el desarrollo de enfermedades.
La especialista destacó que en México el problema ya es grave, por la cantidad de personas que presentan alguna patología asociada con el sobrepeso y la obesidad, y por la predisposición genética de la población a esos males.
De hecho, dijo, ahora los hospitales están saturados de pacientes, algunos de ellos menores, inclusive, de 35 años de edad, quienes llegan con infartos al miocardio o hemorragias cerebrales, padecimientos que provocan muerte o invalidez.
Por eso la importancia de modificar el estilo de vida de las personas. Reconoció, sin embargo, la dificultad que el proyecto enfrenta en ciudades como la de México, donde la gente vive con estrés, come donde puede y lo que puede y no hace ejercicio. Eso, apuntó, es una realidad, pero tampoco se requiere que la dieta, sea muy complicada.
El consumidor, explicó, tiene que ser inteligente y saber elegir de la oferta de productos, así "no me como unas papas a las que les quitan 30 por ciento de grasa si puedo consumir una ensalada de jitomate que vale 10 veces menos".
Miranda participó ayer en una conferencia de prensa, en la que se dieron a conocer los resultados de una investigación científica para comparar la eficacia de un nuevo fármaco para controlar y reducir los niveles del colesterol en la sangre.
La hipercolesterolemia y su consecuencia directa, la arterosclerosis, forman parte de las enfermedades crónicas con elevada incidencia en México y el mundo. En nuestro país, comentó Miranda, alrededor de 30 por ciento de las personas padecen este mal, vinculado con la edad y alimentos ricos en grasas saturadas.
El mecanismo de acción del producto desarrollado por los laboratorios Schering Plough y Merck, es dual, pues inhibe la producción de colesterol en hígado y a nivel intestinal, a diferencia de los fármacos existentes en el mercado que únicamente actúan en el órgano hepático.
Miranda resaltó que en la mayoría de los pacientes, el colesterol alto pasa desapercibido durante varios años hasta que se hace presente en la forma de infarto al miocardio, pancreatitis, embolia o muerte súbita por infarto.