Clase Política
Partidos en la encrucijada
Los partidos políticos no somos la instancia indicada para otorgar triunfos o pronosticar derrotas. Sin embargo, con base en la información oficial publicada, observamos una tendencia irreversible que da el triunfo a Felipe Calderón Hinojosa, candidato del PAN", afirmó el también aspirante presidencial Roberto Campa, del Panal.
Este parecía ser el sentir general en los medios políticos de todos los partidos, excepto entre los seguidores del abanderado de la coalición Por el Bien de Todos, el perredista Andrés Manuel López Obrador.
También prevaleció el convencimiento de fortalecer al IFE -luego de parecer tambaleante la noche del domingo- y esperar los resultados oficiales.
Entre algunos miembros del PRD se habló de la necesidad de fortalecer al partido, pues se mostró que carece de una estructura nacional capaz de sacar adelante al candidato más popular.
Pero si de restructuraciones se trata, donde urge -bajo amenaza de que ahora sí resulten válidas las actas de defunción que se le extendieron en el 2000- es en el PRI, el gran derrotado que pasó a ser la tercera fuerza política, lejos de los dos principales contendientes.
Para dar un ejemplo, la presencia del tricolor se reducirá en las cámaras de senadores y de diputados a menos de la mitad de las posiciones que detenta actualmente.
Esta caída, de más de 4 millones de votos respecto a la elección presidencial de 2000, evidenció asimismo que la famosa "maquinaria" electoral priísta ya no funciona.
Prepararse para lo que viene
A partir de este primer balance negativo surgieron versiones en el sentido de que los gobernadores priístas preparaban una reunión para tomar directamente la conducción del partido.
También se especuló que dicho cónclave serviría para avalar el aparente triunfo de Calderón Hinojosa, pero al menos dos gobernadores del tricolor, Eduardo Bours, de Sonora, y Natividad González Parás, de Nuevo León, se manifestaron a favor de esperar la decisión del IFE y respaldar a la máxima autoridad electoral, como expresó el domingo el presidente del partido, Mariano Palacios Alcocer.
Con el accionar de los mandatarios surgidos de sus filas, el PRI se aprestaría a asumir su función de "fiel de la balanza", pues ya no podrá impulsar cambios por cuenta propia y en consecuencia deberá inclinarse a favor de los proyectos de sus dos rivales, ya sea el PAN o el PRD.
El PRI, como todos los partidos, debe alistarse para los procesos que vienen este mismo año, como los cambios de gobernador en Chiapas y Tabasco.
En Chiapas sigue la controversia en torno al material electoral y en ella se involucra de nueva cuenta al consejero Miguel Negrón, a pesar de sus declaraciones en el sentido de que no interviene en la licitación.