Redita el FCE la novela del historiador liberal Héctor Pérez Martínez

Con más de 70 años Juárez, el impasible ''no se ha enmohecido''

Mi padre no exaltó la figura del prócer, sino quién fue en realidad, manifiesta Silvia Molina a La Jornada

La escritora subraya la inteligencia del Benemérito para hacer rupturas

ARTURO GARCIA HERNANDEZ

Todavía como parte de la celebración del bicentenario de Benito Juárez, el Fondo de Cultura Económica (FCE) acaba de reditar Juárez, el impasible, novela de corte biográfico escrita por el historiador liberal Héctor Pérez Martínez (1906-1948).

A más de 70 años de su primera edición (1934) -señala Andrés Henestrosa en la contraportada- el libro conserva frescura. ''Su edad no registra ningún signo de vejez; puede leerse con el mismo deleite y provecho con que se leyó la primera vez."

Héctor Benito Pérez Martínez nació un siglo después que Juárez, el 21 de marzo de 1906, en la ciudad de Campeche, en el seno de una familia de abogados. A los 21 años se trasladó a la ciudad de México, donde estudió en la Preparatoria Nacional, y en la Universidad Nacional hizo la carrera de odontología.

En 1929 entró de corrector de estilo al recién fundado diario El Nacional; luego fue reportero, cronista parlamentario, jefe de información, columnista y subdirector.

También escribió, entre otras obras, las novelas Un rebelde, Querido amigo, dos puntos, Imagen de nadie, así como el libro histórico Piraterías en Campeche.

Fue gobernador de su estado natal entre 1939 y 1943. Su brillante carrera política e intelectual se vio truncada prematuramente con su muerte, a los 41 años de edad.

Defectos y virtudes

La escritora Silvia Molina, hija del autor, reflexiona en entrevista sobre la vigencia y aportaciones de Juárez, el impasible.

Considera que la fecha de nacimiento de su padre pudo ser un factor determinante en su juarismo, pero no el único: ''Provenía de una familia liberal, de los fundadores del estado de Campeche, conformada por abogados liberales cuya formación estaba encaminada a destacar la figura de Juárez, quien firmó el acta por la cual Campeche pasó a ser un estado independiente de Yucatán."

-Entre todo lo que se ha escrito y dicho de Juárez, ¿cuál es para usted la principal aportación del libro de su padre?

-Aun cuando era un liberal, mi padre trato de ser lo más objetivo posible en su visión de Juárez; tan es así que la primera edición del libro fue criticada porque había subrayado los aspectos negativos del prócer. En una revisión posterior -la que ahora se publica- él mismo aclara que algunas cosas fueron corregidas, pero no dejó de señalar defectos y virtudes. No es un libro para exaltar a Juárez, sino para decir quién fue en realidad.

Molina dice que es ''un libro muy bien escrito: no es una biografía de corte académico; es una novela cuya esencia literaria no se ha enmohecido. Te mete de lleno en la vida cotidiana de Juárez, en la problemática familiar o en la política".

Al respecto, objetivamente, ''hablamos de una buena novela".

-¿Qué es lo que más le conmueve de Juárez, el impasible?

-Lo que más me conmueve e interesa literariamente es su niñez, su formación en la vida cotidiana. Lo imagino tratando de conquistar a esa familia que lo acogió y cómo pudo romper con la vida conservadora que llevaban, cómo no fue vencido por esa necesidad de aparente humildad y obediencia y tuvo inteligencia suficiente para manejar esos ambientes e ir haciendo rupturas.

-¿En qué parte Héctor Pérez Martínez se atiene a los hechos históricos y qué parte de la vida de Juárez es la que está novelada?

-Tengo su archivo, en el que hay un artículo en el que reflexiona sobre eso y dice que se atiene en todo al contexto histórico. Lo novelado es la atmósfera de la Oaxaca en que vivió Juárez de niño, el ambiente familiar con su hermana o el de la familia Maza. O cómo lo pinta en el seminario. No traiciona nunca la verdad histórica, pero lo coloca en una atmósfera literaria.