México SA
Benefició a la banca española el avance de Calderón
Los gasolineros Mouriño preparan jugosos negocios con Pemex
Con esa pachorra con la que suele reaccionar ante los embates de la tienda de enfrente, el primer círculo de Andrés Manuel López Obrador dejó correr nueve largos días y varias "felicitaciones" de gobiernos foráneos a Feliproa para finalmente -según dice- ponerse las pilas.
El siempre pausado Jesús Ortega anunció que a nombre de la Coalición Por el Bien de Todos remitirá sendas cartas a los secretarios de Gobernación y de Relaciones Exteriores (embajadas mexicanas incluidas) para "informarles" que todavía no hay presidente electo, o lo que es lo mismo que no ha lugar para que los gobiernos extranjeros envíen bombones en forma corazón al provocador candidato que hoy implora a su feligresía "no caer en provocaciones, ni generar un ambiente de tensión", como la que él indujo por medio de su propaganda negra.
Ortega pierde su tiempo, porque monseñor Carlos Abascal está en misa y el ingeniero petroquímico Luis Ernesto Derbez a punto de concluir su tratado sobre la diferencia entre una bala de plástico y otra de goma, independientemente de que ambos conocen perfectamente lo que el perredista quiere informarles. Entonces, no es cuestión de cartas, sino de demandas por el parcial proceder de los titulares de Gobernación y Relaciones Exteriores.
A estas alturas, ya dos gobiernos (Zapatero y Bush) intentaron justificar el envío adelantado de bombones a Felipillo y solicitaron indulgencia por el acelere, y el modorro coordinador de la campaña del Peje apenas hace como que reacciona.
Como se comentó en este espacio, el gobierno español -de acuerdo con la agencia Efe- habría explicado que la "felicitación" del presidente José Luis Rodríguez Zapatero a Felipe Calderón "no pretende prejuzgar el resultado final" de los comicios mexicanos. Sin embargo, el envío adelantado de bombones -más allá del respectivo cabildeo que la embajada mexicana en Madrid- puede entenderse por otras razones, según documenta la prensa financiera de la madre patria:
"La gran banca española logró lo que al inicio del periodo parecía difícil: encadenar la tercera semana consecutiva al alza en la bolsa española. Gran parte de esta alza tiene su base en el resultado de las elecciones presidenciales de México, que dieron como ganador al candidato conservador Felipe Calderón. Esta victoria repercutió en la banca española, sobre todo en el Banco Bilbao Vizcaya Argentaria, que ganó en la semana 4.79 por ciento y le situó como líder del EuroStoxx 50. También los otros pesos pesados, Santander, Repsol y Telefónica proyectaron la estabilidad política del país latinoamericano. En total, desde que el índice tocara, el pasado 13 de junio, sus mínimos dentro del periodo de corrección, el parqué español ha mejorado el 7.68 por ciento. La mayor parte del negocio en nuestro país ha ido a las acciones de Telefónica, Banco Santander y BBVA. En el caso del banco vasco, la variación tan positiva se explica por el próximo dividendo del lunes, unido a los persistentes rumores de compra y la celebración por el afianzamiento del poder conservador en México, donde está muy expuesto", pero con un tercio de sus ganancias en este país.
Lo anterior es un botón de muestra del "cambio con continuidad" que pregona Felipe Calderón. Otro, en la misma línea, es el nombramiento adelantado de dos personajes de su círculo íntimo para la transición: Josefina Vázquez Mota y Juan Camilo Mouriño. La editorial que publicó la magna obra de Chapina (Dios mío, hazme viuda por favor) sólo está atenta al sonido de la caja registradora.
Pero si alguien está contento con los recientes nombramientos de Calderón es el Grupo Energético del Sureste, cuyo propietario Carlos Mouriño Atanes -padre de Juan Camilo Mouriño y magnate del sureste mexicano por obra y gracias del foxismo- va por otro sexenio pletórico de concesiones y jugosos contratos de y con Petróleos Mexicanos.
Carlos Mouriño Atanes y su Grupo Energético del Sureste opera 38 gasolineras en Campeche, Tabasco y Quintana Roo, amén de ser dueño de Transportes Especializados Ivancar, que "está al servicio" de Pemex Refinación, además de atender a otros clientes y a sus propias estaciones de servicio. También acapara en esa zona de la República las franquicias de comida chatarra y otros jugosos negocios.
Mouriño Atanes es un verdadero "emprendedor" al estilo del "cambio", cuyos fructíferos resultados financieros no pueden entenderse sin el dato clave: como en este espacio se publicó, en el año 2000 dedicó tiempo, dinero y pasión a la política, al ser cabeza visible de Amigos de Fox en Campeche.
Ya con la llave del éxito en la mano, este empresario decidió repetir el numerito, invertir en la campaña de Calderón y confiar en su hijo Juan Camilo para que el "cambio" tenga continuidad.
Las rebanadas del pastel:
Falta lo mejor, porque en los corrillos panistas ya se menciona al ultra privatizador Luis Téllez Kuenzler (ex salinista, ex zedillista, ex foxista y ahora calderonista, operador del Grupo Carlyle -léase familia Bush- y consejero de Sempra Energy) como próximo director de Petróleos Mexicanos, y a Juan Camilo Mouriño como secretario de Energía, o lo que es lo mismo, la Iglesia en manos de Lutero.