La guerra sucia fue profusamente transmitida por las dos principales televisoras
Calderón y empresarios gastaron casi mil millones de pesos en denostar a AMLO
Participaron CCE, Sabritas, Jumex, Demetrio Sodi y el doctor Simi; el IFE lo toleró
Ampliar la imagen Andrés Manuel López Obrador y Horacio Duarte, en conferencia de prensa Foto: Carlos Ramos Mamahua
La guerra sucia, la campaña del miedo contra Andrés Manuel López Obrador, tan sólo en anuncios publicitarios transmitidos por televisión, principalmente en Televisa, tuvo un costo cercano a mil millones de pesos y los pagaron el panista Felipe Calderón Hinojosa y sus aliados, entre ellos el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) y personas ajenas al proceso electoral.
Se trata de los promocionales que durante los pasados tres meses se repitieron de manera sistemática en las pantallas de las dos principales televisoras, para inhibir el voto hacia López Obrador al presentarlo como ''un peligro para México'', como alguien que de llegar a la Presidencia de la República provocaría una crisis y despojaría de sus casas y demás propiedades a los ciudadanos.
Un video presentado ayer por el propio López Obrador dio cuenta de esa ''campaña negra, fascista'', en la que también participaron las empresas Sabritas y Jumex, un membrete llamado ''Armate de Valor'', el ex perredista Demetrio Sodi y el doctor Simi.
El documental, que se exhibió ante la prensa nacional y extranjera, da cuenta de campañas pagadas en televisión que tienen ''un claro sesgo en favor del PAN y de Calderón, y que en todo momento, ya sea de manera directa -como se hizo en los anuncios del michoacano y del CCE- o subliminal, se llamó a la población a no votar por el ex jefe de Gobierno.
Aunque se trató de una ilegalidad, porque el Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales (Cofipe) establece que sólo los partidos pueden contratar espacios en radio y televisión para promoción electoral, el IFE permitió que empresas e individuos lo hicieran y erogaran cientos de millones de pesos en esa campaña, los meses previos a la elección del pasado 2 de julio.
El candidato panista erogó 620 millones 778 mil 210 pesos en sus anuncios en televisión para denostar a López Obrador, y ''sus aliados'' 375 millones 936 mil 881 pesos. De éstos, el CCE pagó la mayor parte: 136 millones 476 mil 555 pesos, en promocionales ligados con los mensajes de Calderón, ya que en ambos insisten en el tema de crisis contra la estabilidad, y su objetivo central fue convencer a la opinión pública de que habría peligro económico y social si López Obrador llegaba a ser presidente.
''Está en juego el futuro de nuestros hijos y el 2 de julio vamos a decidir para ellos entre el empleo contra la deuda; entre la estabilidad económica y la crisis; entre la transparencia y las manos limpias o la corrupción. Yo seré el presidente del empleo y de la estabilidad económica con manos firmes y una economía fuerte; vamos a llevar a México al futuro para que vivamos mejor. Felipe Calderón presidente del empleo'', señala el anuncio del panista.
Los muchos anuncios del CCE llevan la misma línea discursiva de los del abanderado del blanquiazul: ''A lo largo de los últimos 10 años, nuestro país ha creado los mecanismos e instituciones necesarias para que cada día surjan más pequeños empresarios que puedan hacerse de un patrimonio y sacar adelante a sus hijos. Este es el camino para México, crecer, porque al crecer, crecemos todos juntos. Defendamos lo que hemos logrado''.
En otro mensaje del organismo empresarial se asegura que las propuestas económicas de López Obrador son las mismas de Carlos Salinas de Gortari. ''Provocan inflación y desempleo; podrías perder tu casa, tu trabajo; no votes por la crisis''. Uno más advierte: ''Votar por algo distinto es retroceder; defendamos lo que hemos logrado''.
La empresa Jumex contrató en las televisoras anuncios con un valor de 13 millones 143 mil 476 pesos, ligados en el discurso y la forma a los de Calderón. Utilizaron inclusive las mismas pizarras, los mismos colores y los mismos efectos de letra para su mensaje que los usados en el de Felipe Calderón: ''Este 2 de julio sólo queremos que votes. Jumex para toda la vida''. Igualmente, Sabritas gastó 16 millones 496 mil 800 pesos en una campaña que incitó a votar por las manos limpias, uno de los lemas de campaña del candidato panista. Un organismo denominado ''Armate de Valor'' contrató anuncios que vincularon a López Obrador con el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, calificando a ambos de ''intolerantes'', de ''violentos''.
Otro personaje que dejó una fuerte suma al monopolio televisivo fue Víctor González Torres, el doctor Simi: gastó 101 millones 252 mil 200 pesos en mensajes publicitarios, la mayor parte contra el tabasqueño. A su vez, el ex perredista y derrotado candidato del PAN al Gobierno del Distrito Federal, Demetrio Sodi, ''deliberadamente rebasó por más de 50 millones de pesos su tope de campaña para anunciarse en televisión nacional en los canales 2, 7 y 13, a fin de seguir creando un ambiente hostil'' al candidato de la coalición Por el Bien de Todos.
Al concluir el video, López Obrador aclaró que no toda la iniciativa privada participó en esa campaña mediática para denostarlo y presentarlo como ''un peligro''. No todos los empresarios se prestaron a ello, dijo; sólo el grupo de los que siempre se han beneficiado.
Algunos reporteros le pidieron dar nombres y el candidato lo hizo: Gastón Azcárraga, apoyador de Vicente Fox Quesada en el 2000, y quien ''por pura casualidad se quedó con la línea Mexicana de Aviación''; Claudio X. González, ex asesor de Salinas de Gortari; Roberto Hernández, ''que vendió su banco en millones de dólares y no pagó impuestos. No estamos hablando de todos, sino de una cúpula de poder que no quiere perder sus privilegios''.