Desfiladero
México, zona de desastre democrático
Lo que puede perderse si Fox impone a Calderón
El Yunque, detrás del fraude y el golpe mediático
Peligran sindicatos, EZLN, Atenco, la libre
Ampliar la imagen Una caravana de jóvenes del PRD, con disfraces de mago y urnas embarazadas, llegó al tribunal federal electoral para manifestarse contra el fraude y sumarse al plantón y huelga de hambre que mantiene otro grupo de inconformes frente al inmueble FOTOJoséAntonioLópez
México debe ser declarado, oficialmente, zona de desastre democrático. El Instituto Federal Electoral (IFE), visto con calma, presenta hoy el aspecto que ofrecía el edificio Nuevo León, allá en Tlatelolco, después del terremoto de 1985. Las cortinas flotan como blancos fantasmas, las entrañas de cemento y varilla han quedado reventadas, y los pisos y techos se han comprimido como un trágico y monstruoso acordeón.
A medida que se disipa la polvareda del 2 de julio, llenos de un horror que cada día crece más, los mexicanos comprendemos que, otra vez, ya no tenemos una autoridad electoral confiable. Después de tantos años de lucha para darnos el privilegio de contar con un instrumento como el IFE, éste fue destrozado en unos días y ahora estamos igual que en 1970, cuando Gustavo Díaz Ordaz nos impuso como presidente a Luis Echeverría Alvarez, o quizá peor, como en 1988, cuando a pesar de la victoria del ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas, Miguel de la Madrid nos impuso a Carlos Salinas.
Hoy Vicente Fox trata de imponernos a Fe-lipe Calderón para los próximos seis años y, también, para que, al término de ese plazo, Calderón designe a su propio heredero, como en los mejores tiempos del PRI. Si esto es indignante en sí mismo, y más aun porque Fox llegó al poder gracias a las aspiraciones democráticas de los mexicanos, lo que resulta intolerable es la trágica perspectiva que anuncia el futuro inmediato si este proyecto se consolida.
Fox subió a la Presidencia con el apoyo económico de un grupo de empresarios mexicanos ligados a poderosos consorcios internacionales, como Coca-cola y Enron, pero sobre todo porque Ernesto Zedillo le transfirió el mando institucional mediante un acuerdo de cúpula entre los representantes locales del neoliberalismo y los intereses estadunidenses y europeos que aceptaron al ranchero de Guanajuato a condición de que les entregara Pemex, lo que no ocurrió.
Descartado Fox, por ser uno de los políticos más torpes e incompetentes de América Latina, los dueños de México y los intereses foráneos "eligieron", ellos sí, a Felipe Calderón. Este lanzó su precandidatura en Guadalajara, desafiando a Fox desde territorios dominados por El Yunque, la organización de ultraderecha que ya estaba incrustada en Los Pinos desde diciembre de 2000, y no sólo desplazó a Santiago Creel, que era pan comido, sino que tomó posiciones estratégicas dentro del gabinete con Carlos Abascal en Gobernación, Francisco Salazar en la Secretaría del Trabajo y Manuel Espino en la dirección nacional del partido, mientras Ramón Muñoz se encargaba del propio Fox.
El Yunque, en pocas palabras, asaltó silenciosamente la estructura del poder y ahora se dispone a dominar el país con mano durísima, después de orquestar el fraude electoral del pasado 2 de julio y tejer las alianzas necesarias para dar el golpe de Estado me-diático, tras el conteo de votos de los 300 distritos, que le fabricó a Calderón una desfalleciente "ventaja" de medio punto, un supuesto triunfo, ha escrito el diario San Francisco Chronicle, "tan grueso como una tortilla".
sin pasado y sin futuro
La catástrofe del 2 de julio, que destruyó las jóvenes instituciones democráticas del país, por fortuna tiene remedio. La gente ha reaccionado con madurez y agudeza extraordinarias. Desde ese día, miles y miles de ciudadanos de todo el país percibieron extrañas anomalías en el Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP): los resultados escritos en las sábanas oficiales, afuera de cada mesa de votación, no eran, como tenían que ser, idénticos a los del PREP. El fenómeno instantáneamente fue bautizado como fraude hormiga.
Después se produjo la asombrosa "desaparición" de 3 millones de votos dentro del propio PREP, que el IFE se apresuró a reconocer inventando ridículas explicaciones, mientras el grueso de la gente comprendía que sí, que en efecto había algoritmos para abultar las cifras de Calderón y reducir las de Andrés Manuel López Obrador en las computadoras oficiales. Luego vino el conteo del 5 de julio, que, la madrugada del día 6, detonó el golpe de Estado mediático.
Pero las trapacerías de la ultraderecha no se agotaron allí: cuando López Obrador informó que solicitaría el recuento voto por voto, a lo largo de esta semana, en todo el país, misteriosas personas han entrado a las juntas distritales a violar los paquetes electorales, robarse actas y alterar de nuevo los resultados del proceso, allí donde casualmente ganó López Obrador.
A todo lo anterior pueden agregarse, como elementos constitutivos de fraude electoral, tanto la conducta de Vicente Fox hablando a toda hora contra López Obrador como la propaganda gubernamental en favor de Calderón, el gasto ilícito de incontables millones de pesos para comprar entre los pobres decenas de miles de votos para Calderón, y la entrega del padrón electoral del IFE y de todas las bases de datos estratégicas del país a Hildebrando, el gigante informático del cuñado de Calderón.
Un análisis detallado de la jornada electoral del 2 de julio ha puesto de relieve que, gracias a la información que posee Hildebrando, votaron por Calderón algunas personas que, de acuerdo con datos recientes del Instituto Nacional de Migración, estaban en el extranjero el día de los comicios.
Todo esto forma parte de una gigantesca operación de Estado para sentar en la silla grande a Felipe Calderón y proceder al desmantelamiento de Pemex. Pero los peligros que este golpe de Estado anuncia no amenazan sólo a esta paraestatal, la empresa pública que junto con las remesas de los migrantes ha impedido la quiebra técnica del país: también están en riesgo los sindicatos, la organización autónoma de las comunidades indígenas de Chiapas, el mismísimo pueblo de San Salvador Atenco, en donde Calderón no vacilaría en construir el aeropuerto que no pudo hacer Fox y, desde luego, la libertad de expresión y con ella las libertades políticas elementales, empezando por la de elegir a nuestros gobernantes.
Lo que acecha tras la gritería ensordecedora de los locutores que a toda hora exigen a López Obrador aceptar la "derrota", lo que puede arrollarnos a los mexicanos si triunfa la imposición, es una dictadura en toda la extensión de la palabra. Afortunadamente, para millones de personas que votaron por López Obrador y contra el neoliberalismo, las leyes electorales aún vigentes permiten que todas las anomalías del 2 de julio sean examinadas y corregidas por un tribunal inapelable, y la Constitución, en el estado en que todavía se encuentra, autoriza las protestas pacíficas.
De modo que a eso, a rechazar la imposición de una dictadura de ultraderecha es a lo que millones de mexicanos se van a dedicar, sumándose al esfuerzo de miles y miles en todo el país que ya están luchando contra el golpe foxista. Saben que si en esta ocasión son derrotados ya no tendrán una nueva oportunidad en esta tierra: los viejos perderán las recompensas que merecen por lo que hicieron en el pasado y los jóvenes serán expulsados del futuro.
el blog desobediente
Unas 500 mil personas acudieron el sábado al Zócalo para repudiar el fraude y proclamar el triunfo de López Obrador. ¿Cuántas irán a la marcha de mañana que, para bien o para mal, definirá la historia de México en lo inmediato? Si el número de asistentes no supera el millón y medio del 24 de abril de 2005, los golpistas se sentirán con ínfulas para seguir avanzando. Pero si el pueblo responde se abrirá un rayo de luz en la espesa oscuridad del cielo.
Si la marcha es un éxito e inaugura una etapa de intensa resistencia popular pacífica, un grupo de artistas y académicos estrenará en Internet, mañana en la noche, el portal www.lahoradelpueblo.blogspot.com, que propondrá novedosas acciones de desobediencia civil, alegre e incruenta, y difundirá las experiencias de aquellos que quieran relatarlas al buzón de correo electrónico que aparece al pie de esta página. Y ya entrados en gastos, los grupos del Lado Izquierdo Opositor (LIO) convocan para el próximo miércoles a una reunión abierta en el local del SUTIN.
Nos vemos mañana pero en la marcha.
www.senderodelpeje.com
www.plandelos3puntos.org