Llaman a no consumir productos de empresas que se sumaron a la guerra sucia
Brigadistas difundirán el mensaje "El fraude sí es un peligro para México"
Las primeras acciones de resistencia civil pacífica tomaron forma ayer en el Zócalo, cuando la multitud ahí reunida, horas antes de que llegara Andrés Manuel López Obrador, las propuso y aprobó, bajo la conducción de Jesusa Rodríguez, Héctor Bonilla y Daniel Giménez Cacho.
Boicot a Coca-Cola, Jumex, Bimbo, Sabritas y a otros productos de origen estadunidense, cuyas empresas se sumaron a la "guerra sucia" contra López Obrador, serán parte de la batería de acciones de la sociedad civil para exigir el recuento de los votos.
Además, se aprobó constituir brigadas de contrapropaganda que difundan en celulares, Internet, automóviles y contestadoras de teléfono el siguiente mensaje: "El fraude sí es un peligro para México". En el mismo sentido, que los ciudadanos coloquen letreros exigiendo el conteo voto por voto, durante las transmisiones en vivo de las televisoras, e inclusive colocar moños tricolores en las estatuas de Benito Juárez y en las calles, escuelas y otros lugares públicos que lleven el nombre del Benémerito de las Américas.
Los actores mantuvieron vivo el ánimo de los miles de simpatizantes del candidato presidencial que se congregaron -muchos de ellos desde el amanecer- en la Plaza de la Constitución para esperar la segunda asamblea informativa del tabasqueño. Rodríguez, Bonilla y Giménez Cacho se encargaron de dar cauce a las propuestas de resistencia civil en defensa del voto por voto y casilla por casilla.
Y lo hicieron con humor, ironía y críticas a Felipe Calderón, a personajes como Elba Esther Gordillo, al presidente del Instituto Federal Electoral (IFE), Luis Carlos Ugalde; al cuñado incómodo, Hildebrando Zavala; al ex presidente Carlos Salinas de Gortari, y a los medios eléctronicos, especialmente Televisa.
Otra de las propuestas de resistencia civil fue no pronunciar el nombre de Felipe Calderón, sino llamarlo por su apócope, Fecal, porque de lo contrario, advirtió Jesusa Rodríguez, para quien lo haga vendrían "seis años de salación".
Con las tablas que le da su trayectoria en teatro, anunció: "desde Catemaco me dicen que sí hay una solución, si se les chispa el nombre del candidato de la derecha, si lo mencionan sin querer; hay otra forma de quitarse la mala suerte: si es mujer, tiene que agarrarse la chichi izquierda, ¡pero de inmediato!, y en el caso de los varones, el huevo izquierdo".
Una carcajada recorrió el Zócalo y se repitió cuando Héctor Bonilla y Jesusa Rodríguez describían un carruaje de cartón en el que iban montados los autores del fraude electoral del 2 de julio, entre ellos el presidente Vicente Fox -a quien describieron como Tribilín-, Gordillo, Ugalde, Calderón y Salinas de Gortari, que llevaba en andas a la profesora recién expulsada del PRI.
Para referirse a Salinas de Gortari, Jesusa Rodríguez dijo que es un chaparro orejudo y pelón. Bonilla acotó: "no, no es pelón, es de frente muy amplia, cuando levanta las cejas se le arrugan las nalgas".
De nueva cuenta risas generalizadas, mientras se esperaba la llegada de la marcha encabezada por López Obrador. Giménez Cacho, actor vetado por Televisa -aclaró que él también tiene vetado al monopolio- cantó, junto con Rodríguez, un estribillo sobre el cuñado incómodo, pero con la tonada de El Martinillo: "Hildebrando, Hildebrando, dónde estás, dónde estas, dónde están mis votos, dónde están".
La indignación contra Televisa, por el manejo de la información en favor de Calderón fue manifiesta. Hubo silbidos y mentadas de madre cuando los actores se refirieron a Carlos Espejel, quien en una pésima imitación del personaje de Cantinflas instó a López Obrador a aceptar una supuesta derrota.
En ese contexto, miles de voces acompañaron a los actores a repetir pausadamente el estribillo: "Despacio, sin prisa, Televisa te idiotiza".