Presenta la coalición "pruebas del fraude" a ciudadanos
"No hay ni habrá diálogo con el PAN", asegura Horacio Duarte
Cobijado por el afecto y la participación de la ciudadanía, que llenó el Museo de la Ciudad de México para escuchar a los miembros de la coalición Por el Bien de Todos, Horacio Duarte pidió al auditorio no confundirse con la versión de un presidente interino, pues la exigencia es el recuento voto por voto.
La respuesta de la ciudadanía no tardó. No sólo exigieron la revisión, sino también pidieron a gritos no cejar en esa lucha: "¡arriba corazones, que ya somos millones!", corearon.
Duarte primero detalló el sustento de la impugnación ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF). Posteriormente, el representante de la coalición ante el Instituto Federal Electoral (IFE) hizo un paréntesis y aprovechó para mandar un mensaje a Josefina Vázquez Mota, coordinadora de relaciones políticas de Felipe Calderón: "Que le quede claro que el líder de este movimiento es Andrés Manuel López Obrador y no hay diálogo ni habrá con el PAN".
Que no se equivoque ese partido, insistió al señalar que lo único que se puede hablar con el blanquiazul es sobre cómo contar sufragio por sufragio. Los asistentes secundaron esa decisión con aplausos, y uno de ellos, en la esquina del patio del recinto, condenó de antemano un supuesto entendimiento entre algunos miembros del PRD y el PAN: "Yo soy decente, ya tengo presidente", indicó.
Desde su entrada al museo, Claudia Sheinbaum, vocera de la coalición, y Horacio Duarte fueron recibidos con una fuerte ovación de los asistentes, quienes inclusive se pusieron de pie. "¡Duro!, ¡duro!", gritaban.
Sheinbaum empezó la plática con la ciudadanía, que tuvo como finalidad demostrar que existen pruebas suficientes para "afirmar que en el proceso electoral ha ocurrido un fraude".
Con el apoyo de una pantalla, en la que se mostraban los números con las contradicciones entre los resultados del cómputo distrital y los del Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP); los votos agregados al PAN y eliminados al PRD; los resultados en los que se abrieron los paquetes y sí se contó voto por voto, se demostró que el PAN perdió sufragios, Sheinbaum reiteró que hay un millón 621 mil 188 votos que no tienen correspondencia con las boletas comiciales.
Por ello, insistió en que la verdad de la elección del 2 de julio está en las urnas y se requiere abrir las casillas para hacer el recuento. Mientras hablaba, la señora María Alvarez, vendedora de comida en un tianguis de Tlalpan, quien se encontraba en un rincón del museo ubicado en Pino Suárez, no pudo contener el llanto.
Entre sollozos dijo que "hay mucha gente abandonada y López Obrador se acercó a ellos. Yo tengo sesenta y tantos años y no recibo nada de él, pero voy a luchar por otras personas que lo necesitan. En el tianguis veo a mucha gente que viene de muchos estados a cantar, a vender, porque no tiene nada. México está realmente muy pobre".
A unos metros, Alfredo Nila Pérez, trabajador, comentó que estudió dos semestres de estadística y tres de matemáticas, "y por ello estoy convencido de que hubo fraude. En estadística, todas las conductas son típicas y el comportamiento de los resultados que dio el IFE no corresponden a uno normal, sino a una alteración".
En su turno, Horacio Duarte habló de la violación a los principios rectores de la contienda electoral, como la objetividad, la independencia y la imparcialidad. Se refirió a la propaganda negra, a la utilización de los programas sociales en favor del PAN, a la intervención ilegal de las empresas, y cuando anunció que a las cinco de la tarde acudieron a interponer una denuncia penal contra Luis Carlos Ugalde y los consejeros, estallaron los aplausos. Uno de los asistentes preguntó insistente de qué manera se sanciona "a los delincuentes electorales".