Los representantes de López Obrador y Madrazo ponen en evidencia a Ugalde
Naufraga entre acusaciones de fraude la sesión informativa del IFE
''Debería darles vergüenza presumir una elección libre'', espeta Horacio Duarte a consejeros
Ampliar la imagen Horacio Duarte, durante la sesión del órgano electoral Foto: Cristina Rodríguez
Con decenas de boletas en mano, el representante de la coalición Por el Bien de Todos, Horacio Duarte, encaró a los consejeros del Instituto Federal Electoral (IFE): ''Para los que dicen que el fraude ya no existe tengo un paquete de boletas que nos acaba de llegar. Vergüenza les debería de dar que eso se permita en el país, y que tanto presuman de su elección limpia y transparente. Deberían tenerlas en la puerta de su casa como símbolo de la vergüenza de estar aquí como consejeros''.
Enrojecido, el consejero presidente, Luis Carlos Ugalde, sólo atinó a responder: ''Creo que está obligado a presentar una denuncia ante la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales, porque eso está catalogado como delito electoral''. Más adelante, la consejera Alejandra Latapí sugeriría que en la investigación debería indagarse también cómo es que llegó el material a la sesión del Consejo General.
Fracasado deslinde
El intento de deslinde de Ugalde fue atajado de inmediato por el representante de la Alianza por México, Felipe Solís Acero, quien le recordó sus obligaciones de ley: ''Si no mal recuerdo, la ley penal establece la obligación de quien tenga conocimiento de un delito, de denunciarlo. Y esa obligación es doble tratándose de una autoridad. Señor presidente, el que tiene que notificar a la Fepade es el IFE''.
Ugalde ya no respondió. La sesión del Consejo General se encontraba en pleno naufragio para los consejeros electorales que encontraban, en la presentación de cada informe en relación con la jornada del 2 de julio, un reproche conjunto de la coalición y la Alianza por México; un silencio casi misericordioso del panista Germán Martínez, que sólo a ratos, cuando la embestida opositora acorralaba a Ugalde y compañía, realizó una breve intervención para externar su apoyo a la autoridad electoral.
Ambas coaliciones denunciaron que el manejo informativo que está dando el IFE, más que defender la organización electoral está defendiendo un resultado favorable al PAN. ''El IFE -dijo Solís Acero- tiene la responsabilidad, la atribución de defender los actos del proceso electoral. Sin embargo, la percepción y el mensaje que se envía es que lo que se defiende es un resultado y con eso sí no estoy de acuerdo''.
Mucho antes de que se mostraran las boletas, la consejera Teresa González Luna elogiaba la organización electoral: ''El IFE funcionó, una vez más, como una caja de cristal que simplemente recogió la voluntad ciudadana, organizó el cómputo de los sufragios voto por voto el día de la elección... Hablar de irregularidades generalizadas o, peor aún, tan siquiera sugerir, insinuar la organización de un operativo de fraude electoral, implica desconocer lo que efectivamente todos estos hombres y mujeres vieron, oyeron, palparon el día de la jornada electoral...''
González Luna ya había desgranado un caudal de cifras: 99.99 por ciento de casillas instaladas, la mayor participación ciudadana en la historia (no aludió a que, en 1994, se alcanzó la cifra récord con una proporción cercana a 80 por ciento), 913 mil 416 ciudadanos como funcionarios de casillas, 25 mil 311 observadores electorales.
Apenas concluyó su balance estadístico, la coalición y la Alianza por México comenzaron las descalificaciones. ''El tono de su intervención, consejera, me parece de reproche, acusatorio, admonitorio'', dijo Solís Acero en el preámbulo de la descalificación contra la falsedad de información que difunde el instituto a través de comunicados y conferencias de prensa, citando el caso de la incongruencia de las cifras sobre los representantes de partidos.
''Acudí a las fuentes que citan con rigor y en ella no se encuentran estos datos; dicho con claridad, la información es falsa y no coincide con la que presentan en el informe al Consejo General.
''¿A quién le creo? ¿Al boletín con una fuente que no existe, que es falsa? ¿O al informe? Esta información es errática, caótica, sin explicaciones de los constantes cambios en su contenido; lo único que abona es incertidumbre'', reprochó el representante priísta.
El consejero Arturo Sánchez y el propio secretario ejecutivo, Manuel López Bernal, explicaron la forma de acceder en Internet a la información requerida: ''No estamos partiendo de una fuente falsa, eso sí quisiera dejarlo muy claro''. La respuesta no satisfizo al priísta, quien insistió en que tenía en sus manos dos informaciones contradictorias. ''¿Por qué informan a través de boletines? ¿Por qué traen a funcionarios en pasarelas permanentes y a éste, que es el órgano superior de dirección, se le regatea la información?'', encaró Solís Acero a Ugalde.
El consejero presidente subrayó que esto obedece a la necesidad de salir a aclarar datos desvirtuados de los comicios, cuya dinámica ha sido de tal forma que ha obligado al IFE a responder por esta vía.
Duarte y Solís Acero censuraron, por otro lado, la difusión mediática que hizo el instituto del resultado de la apertura de 2 mil 873 casillas para realizar de nuevo los cómputos en los distritos donde aumentó la ventaja del PAN en la elección presidencial, y la escasa difusión que se dio cuando el IFE tuvo que salir a informar sobre el resultado de las casillas que había en el archivo de inconsistencias del Programa de Resultados Electorales Preliminares, donde aventajaba la coalición.
Ambos coincidieron en que ello evidenciaba el interés del IFE de difundir sólo el resultado favorable para el PAN, con la intención de demostrar que es ociosa la apertura de paquetes a futuro, porque cuando se hizo se benefició al blanquiazul.
El manejo informativo no sólo fue cuestionado por la alianza PRI-PVEM, sino también por la coalición Por el Bien de Todos, cuyo representante denunció la abierta confrontación que se desprende de la política de comunicación, citando el artículo publicado por el director ejecutivo del Servicio Profesional Electoral, Guillermo Guerrero, en una revista de publicación nacional, denominado ''Siete falacias sobre una elección de excepción''.
Duarte añadió: "Si este funcionario (en cuyo currículum destaca su paso como asesor del Centro de Investigación y Seguridad Nacional de la Secretaría de Gobernación) está dando la cara en nombre del IFE, le resta totalmente autoridad en términos de ser imparcial como miembro del órgano. Es verdaderamente sorprendente que un funcionario de este nivel salga a dar la visión política del instituto", pues desde el mismo título hay una clara intencionalidad política.
Ugalde respondió que el IFE no hace valoraciones políticas y considera que la última palabra la tiene el tribunal electoral; es la hora del tribunal. "El instituto considera explicable que con un margen estrecho los partidos quieran certeza y quieran revisiones por conducto del TEPJF".
Nuevamente Solís Acero secundó la crítica, citando que se enviaron correos electrónicos difundiendo el citado texto por medio del Programa de Acompañamiento Ciudadano, donde se indica: "Comparta esta comunicación con sus colaboradores y allegados, renvíe el mensaje a quien usted lo desee o envíenos su correo electrónico para que lo hagamos en su nombre".
Acto seguido, emplazó a Ugalde a asumir si él instruyó esta difusión o a deslindarse. No hubo respuesta inicial, ante lo cual insistió Duarte: ¿qué opinión tiene de este artículo?
Ya cuestionado por ambas coaliciones, Ugalde reconocería: "Quiero decir que a través del Programa de Acompañamiento Ciudadano se ha distribuido esta información; por la prudencia del caso me parece incorrecto e indebido". El escrito lo hizo en uso de su libertad de expresión.
Si lo hizo en uso de su libertad de expresión, cuestionó la consejera Lourdes López, es deseable que no utilice el cargo como funcionario de la institución.