La sociedad rechaza "abrumadoramente" denuncias sin sustento, dice el panista
Calderón: la ley, el mejor instrumento contra proclamaciones autoritarias
Felipe Calderón invocó la ley y las instituciones para decir que son la mejor defensa contra males ya superados en México de proclamaciones autoritarias, que a partir de caprichos o de pretensiones personales buscan suplantar la voluntad de los mexicanos.
Sin mencionar el destinatario de su mensaje, pero en clara referencia a las impugnaciones presentadas por el candidato presidencial de la coalición Por el Bien de Todos, Andrés Manuel López Obrador, advirtió que la sociedad mexicana rechaza "abrumadoramente" denuncias sin sustento y descalificaciones ligeras, y por ello llamó a no pretender engañar con sospechas.
Después de la polémica que suscitó el uso del término "presidente" por Calderón y López Obrador, esta vez el panista eludió proclamarse como tal, aunque sí habló de sus proyectos de gobierno para la educación superior y de las facultades que tiene el titular del Ejecutivo en ese ámbito.
Ante una treintena de rectores de universidades privadas también leyó la cartilla a las universidades públicas, al señalar que, sin ser obstáculo la autonomía universitaria, deberán rendir cuentas, con el argumentó de que los contribuyentes tienen derecho a conocer cómo se gasta "hasta el último centavo" de sus impuestos.
El panista se reunió en privado con directivos de la Federación de Instituciones Mexicanas Particulares de Educación Superior (Fimpes), cuyo vicepresidente, Alejandro Gertz Manero, ex titular de la Secretaría de Seguridad Pública del gobierno foxista y ahora rector de la Universidad de las Américas, se sentó al lado de Calderón y del coordinador de su equipo de transición, Juan Camilo Mouriño. Al término, Gertz descartó que aspire a ocupar un cargo público, porque "ya me jubilé".
Como presidente de la Fimpes, Francisco Lejarza, rector de la Universidad Chapultepec, negó que den su aval al candidato blanquiazul y expresó su disposición a entrevistarse también con el candidato perredista, sólo que a él no lo invitaron. "No nos metemos en política; sólo deseamos una reforma educativa", argumentó.
Calderón aprovechó un comentario del rector de la Universidad Anáhuac, Jesús Quirce, para responder de manera velada a las impugnaciones de su contrincante tabasqueño con cuatro referencias al autoritarismo.
Consideró que la mejor manera de contribuir a la unidad de los mexicanos es que en la disyuntiva que se presente entre instituciones y leyes o autoritarismo y desplantes México opte claramente por lo primero.
Como parte de su agenda educativa de diez puntos, se comprometió a incrementar la cobertura en enseñanza superior del actual 23 por ciento a 30 por ciento en 2012, e inclusive llevarla más allá, a 35 por ciento, con el apoyo de las propias universidades y del Congreso de la Unión.
Aunque no había rectores de universidades públicas, dijo que impulsará la rendición de cuentas sobre el destino de los recursos que reciben, partiendo de que "se respete la premisa de que el ejercicio del dinero público debe ser también conocido públicamente".
También señaló que fomentará nuevos institutos tecnológicos, al considerar que tiene un exitoso modelo de vinculación con el empleo.
En su lista de propuestas señaló que buscará que la educación forme una "sociedad de ganadores", implantar un sistema de becas y becas-crédito financiadas por los tres órdenes de gobierno y por las instituciones financieras multinacionales o internacionales, así como por la sociedad.