Crecen en Polanco negocios al amparo de la ilegalidad
La ilegalidad "legalizada" se percibe en cada esquina de Polanco, denunciaron habitantes de esa comunidad al manifestar este domingo su inconformidad por la proliferación de amparos a favor de grupos económicos que sin cumplir con las normas legales afianzan sus negocios en esa colonia.
Los quejosos señalaron que las empresas inmobiliarias, así como las agrupaciones de comerciantes en la vía pública son los sectores que más se han visto beneficiados por estos recursos que obtienen con éxito de los jueces y que cada día incrementan el deterioro que se enfrenta en la zona.
La colonia debería llamarse "Polanco de los Amparos", aseveró Yolanda Boerci, quien señaló que estos recursos en muchas ocasiones "sólo sirven para diluir las leyes".
Se amparan los constructores, "aún si sus obras no cumplen con las normas, y es que las reforma en materia administrativa impulsada por la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi), para otorgar certificados sin hacer antes un estudio de campo y la verificación correcta sobre los usos de suelo lo permiten. Por otro lado, el hecho de que la delegación no supervise si las manifestaciones que hacen las constructoras cumplen con las leyes ha provocado que en esa colonia proliferen los abusos sobre el uso de suelo.
Botones de muestra
Ejemplo de esto son las construcciones que se autorizaron en los predios marcados con los números 190, 205, 217, 223 y 225, la mayoría de los cuales, aunque miden menos de 500 metros cuadrados, les fueron autorizadas edificaciones de hasta 36 metros de altura, cuando sólo se deberían haber autorizado edificios de 18 metros de altura como máximo, según el Programa Parcial de Desarrollo de 1992, "y en el que rige actualmente existen omisiones al respecto y por ello la Seduvi y la delegación han favorecido más a los constructores que al bienestar de la colonia y de sus residentes".
En un comunicado, señaló que a otros edificios que los clausuraron por no contar con suficientes cajones de estacionamiento y otras irregularidades más, y dentro de los cuales está el caso del predio marcado con el número 190, donde a pesar de no haber subsanado las irregularidades la constructora trabaja rápidamente para "terminarlo con todo y sus ilegalidades, gracias a un amparo que presentaron con una nueva manifestación".
Dijo que a este recurso también recurren los propietarios de casas catalogadas como patrimonio arquitectónico, a fin de que puedan ser demolidas, pero se amparan también los taqueros y los ambulantes, indicó.
Los árboles han sufrido las consecuencias, pues constructores y comerciantes atentan todos los días contra éstos. Indicó que mientras constructoras los afectan al demoler viejas edificaciones para construir nuevas viviendas, los comerciantes ambulantes los utilizan como pecheros o basureros.
Yolanda Boerci dijo que ciertos comerciantes envenenan estas plantas con el propósito de cementar después las banquetas y utilizarlas para estacionamiento, cuando éstas son espacios públicos para los peatones.